El partido que enfrentaba al Manchester United y al Bournemouth correspondiente a la trigésimo octava y última jornada de la Premier League ha sido suspendido. La Policía británica desalojó el estadio debido a la "presencia de un paquete sospechoso" en la esquina noroeste del recinto. "La Policía está realizando una inspección", informó el club en su cuenta oficial de Twitter en un primer momento mientras los agentes daban la orden de evitar las inmediaciones "si es posible". Los agentes hicieron una explosión controlada del objeto, que finalmente resultó ser un teléfono móvil conectado a una tubería, cuya semejanza con la bomba era bastante grande, según ha explicado la policía.
La megafonía del estadio comunicó la decisión de suspender el partido, como ratificó el club inglés en su cuenta de la red social. "A causa del descubrimiento del paquete, el partido ha sido suspendido, por consejo de la Policía", reza la notificación.
Alrededor de 20.000 espectadores del Stretford End y del Sir Alex Ferguson Stand habían sido evacuados por miembros de la seguridad del recinto, lo que había retrasado 45 minutos el comienzo del encuentro, minutos antes de la cancelación. El árbitro del partido, el inglés Jon Moss, tomó la decisión de posponer el inicio del duelo —que debía comenzar a las 15 horas (16.00, hora española)— después de hablar con el delegado del Manchester United, quien le dijo que había "un incidente en algún lugar del estadio".