Otro quebradero de cabeza para Ada Colau. Un grupo de ocupas ha tomado el viejo edificio de la Llotja de Barcelona para, dicen, abrir un centro para refugiados. La acción pone en un brete al gobierno municipal, que buscaba transformar el inmueble del siglo XIX en una escuela de arte. Los planes del consistorio chocan con el proyecto de Museo Woody Allen que ha propuesto Mediapro para el activo, que es propiedad municipal y de la Generalitat.

Otro quebradero de cabeza para Ada Colau. Un

La usurpación tuvo lugar el domingo por la tarde, en el transcurso de una manifestación anticapitalista en el marco del Primero de Mayo. El grupo ha rebautizado el inmueble ubicado en la calle Avinyó como Mukhayyam Barcelona, y propone usarlo como "lugar de encuentro e intercambio".

Cabe recordar que la Llotja fue una de las sedes de la Escuela de Arts i Oficis de Barcelona. El edificio dejó de funcionar en 2009 cuando se derrumbó una parte del falso techo. Ante el mal estado de la edificación, el Consorci d'Educació de Barcelona, organismo mixto ayuntamiento-Generalitat, decidió trasladar a los alumnos a otra sedes del centro.