El Papa Francisco ha visitado el sábado un centro de refugiados en la isla de Lesbos (Grecia) y ha ordenado acoger a tres de las famílias que allí moran. El Sumo Pontífice ha informado que las doce personas que vivirán en el Vaticano son huidos de la guerra de Siria, seis de ellos menores de edad.
En un comunicado, la oficina del líder religioso ha indicado que los acogidos son viajarán al Vaticano tras un pacto con las autoridades griegas e italianas. "El Papa ha querido dar un signo de acogida a los refugiados", agrega la nota oficial.
Visita
Antes, Jorge Mario Bergoglio ha visitado el centro de detención de Moria, en la isla griega, donde se hacinan hasta 3.000 personas de distintos países. En un discurso desde la instalación, el sumo sacerdote ha instado a la Unión Europea a "hallar una solución" al problema de los refugiados.
El obispo de Roma también ha mantenido un encuentro privado con el primer ministro griego, Alexis Tsipras, y ha sido acompañado en todo momento por el Patriarca Ecuménico de Constantinopla Bartolomé y por Jerónimo, arzobispo de Atenas y toda Grecia.
Las tres familias a las que El Vaticano dará un nuevo hogar prodecen de Damasco y Deir Ezzor, una provincia controlada por el Estado Islámico. El pequeño estado se ocupará de su reasentamiento y manutención, mientras que la ayuda inicial correrá a cargo de la Comunidad de San Egidio.