Nicolás Maduro ha anunciado que los funcionarios del país sudamericano trabajarán de lunes a jueves hasta el próximo mes de mayo, dejando de hacer el viernes, para ahorrar energía debido a la crisis de generación y abastecimiento eléctrico.

Una decisión que, según ha informado el jefe del Estado venezolano, saldrá mañana publicada en la Gaceta Oficial “estableciendo todos los viernes como día no laborable a partir de esta misma semana”. Los empleados de las provincias y de los ayuntamientos también estarán incluidos en estas medidas.

El origen de la decisión gubernamental tiene que ver con la fuerte caída del nivel de embalse de Guri, el más grande de Venezuela y cuya central hidroeléctrica provee el 63% de la energía eléctrica del país.