El juez de instrucción número 22 de Barcelona, Emili Vila Majó, tiene la orden de redactar un nuevo auto de apertura de juicio oral contra Alexandre (Sandro) Rosell Feliu, Josep María Bartomeu Floreta y contra el Futbol Club Barcelona como presuntos responsables de varios delitos fiscales y societarios. La audiencia considera que existen indicios racionales de criminalidad respecto al presidente, el expresidente y el propio club por irregularidades contractuales en el fichaje de Neymar.
Premeditada estrategia delictiva
“El coste real que implicaba la adquisición del jugador fue ocultada por el entonces presidente, Alexandre Rosell, al club y no se incluyeron en las cuentas anuales de la sociedad.(…). Con dicha acción Rosell, en realidad, ocasionó un prejudicio económico al club al no incluir en la contabilidad como activo correspondiente al “inmovilizado intangible deportivo”, las cantidades reales de adquisición del jugador, detrayendo tales cantidades de otras partidas, simulando operaciones que no tenían como base una relación mercantil real y, a causa de esto, en las cuentas anuales de futuros ejercicios, el FC Barcelona deberá hacer constar el coste real de adquisición del jugador Neymar Jr con el consiguiente perjuicio patrimonial para el club”. Así se expresa el fiscal en el informe en que se ha basado la Audiencia para pedir al juez instructor que rehaga el auto de apertura de juicio oral.
Nuevo auto, mismas acusaciones
Emili Vila Majó, ahora, dará traslado a las partes personadas para que vuelvan a presentar sus informes. Una vez recibidos, el magistrado elaborará un nuevo auto en el que indicará que el órgano competente para juzgar a Rosell, Bartomeu y al FC Barcelona es la Audiencia Provincial y no la Audiencia Nacional.
Contrariamente a lo que algunos medios han informado una vez ha trascendido el auto de la audiencia, en el nuevo escrito el fiscal volverá a pedir penas de cárcel para Rosell, Bartomeu y una severa multa para el club.
Peticiones de cárcel
En el anterior escrito acusatorio, el fiscal pidió siete años y ocho meses de cárcel para Sandro Rosell y una multa de 25 millones de euros.
Para Bartomeu la pena se situaba en dos años y tres meses de cárcel y una multa de 3.830.645 euros, y para el club una multa de 23 millones de euros y “la perdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas y del derecho a gozar de los beneficios o incentivos fiscales o de la seguridad social durante el periodo de 3 años”.
Engaños y más engaños
Según el fiscal: “Además, para conseguir que los gastos fueran menores, Rosell ideó la operación de tal manera que el Futbol Club Barcelona eludiera o minorara subrepticiamente la tributación a la hacienda pública a la que el club estaba sujeto como obligado tributario, como consecuencia de las remuneraciones que se abonaron en virtud de los contratos anteriores. (…) Simuló las operaciones para camuflar el objeto real de los pagos, que no era otro que el de retribuir al jugador, eludiendo de esta manera el pago de los impuestos derivados de los rendimientos”.
Versiones informativas torticeras
El fiscal, mantendrá esta tesis en su nuevo escrito. El juez dictará antes de dos meses el nuevo auto de apertura de juicio oral. Después, el juicio se celebrará en la Audiencia Provincial de Barcelona.
Contrariamente a lo que el FC Barcelona explicó el pasado jueves a través de un comunicado, ni se retira la acusación ni se anula en proceso ni el caso Neymar ha dado “un giro” en ningún otro sentido que no sea el planteado hasta el momento tanto por el juez, Pablo Ruz, como por la Fiscalía.