La lluvia ha regresado tímidamente en Cataluña este miércoles tras un largo periodo de sequía. Según las previsiones, un frente cruzará el territorio bajando las temperaturas y llevando un poco de agua a las regiones del interior que, con el paso de las horas, podrían llegar también a la costa durante esta tarde.

Este modesto cambio en las temperaturas llega tras la insólita pregaria del arzobispo de Barcelona para que la lluvia diera un respiro a la sequía generalizada que se vive en tierras catalanas. Hace más de tres meses que en Barcelona no cae una gota.

Tras dos semanas de invierno primaveral, el frío más pronunciado se notará a última hora del día y durante la madrugada de este jueves. No obstante, todo apunta a que, una vez pasado este frente de frío, las temperaturas volveran a subir.