Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ha denunciado una fiesta 'rave' de 100 personas que tuvo lugar hace dos semanas en una línea del Metro de Barcelona. La juerga congregó a unos 100 jóvenes, que consumieron alcohol y drogas, causaron desperfectos y orinaron en las vías. La turba intimidó a los vigilantes de seguridad, que no pudieron hacer nada para frenar la bacanal en la línea 4 del suburbano.
El jueves, TMB ha informado de que ha interpuesto una denuncia en el juzgado contra el grupo. Al parecer, los fiesteros tomaron los andenes y estaciones como si fueran discotecas, consumieron drogas y alcohol y llegaron a introducir un carrito con un altavoz. La 'rave' duró una hora y discurrió entre las estaciones de Jaume I y Paseo de Gracia.
Refuerzo de la vigilancia
Además de la denuncia de TMB contra la 'rave' Subway Party 2016, los Mossos d'Esquadra han anunciado que reforzarán la vigilancia en la red del suburbano. El primer teniente de Alcalde de Barcelona, Gerardo Pisarello, ha condenado una acción contra el "bien común".