El presidente de EEUU, Barack Obama, se ha estrenado este jueves en el reconocido reality show Running Wild With Bear Grylls para reivindicar los efectos nocivos del cambio climático en Alaska. El mandatario pasará tres días en la región compartiendo su experiencia para crear consciencia a nivel nacional e internacional sobre el calentamiento global.

Además de la causa ecológica, Obama también recibe un espaldarazo a su popularidad.