Un hombre ha sido condenado a 30 días de cárcel y 1.500 euros de multa por recoger agua de lluvia en tres bidones en Oregon (EE.UU.) en su propio terreno.
Gary Harrington, de Eagle Point, ha sido condenado debido a que el Estado de Oregón considera que el agua de lluvia es un bien público y que para poder recolectarla hay que pedir permiso a las autoridades.
En el año 2002, Gary ya fue condenado por cargos tales como ‘reservas ilegales’. Pese a que en el 2003 se le dio permiso para recoger agua, posteriormente se le retiró.