350 personas han sido arrestadas en las manifestaciones anti-austeridad que han recorrido Frankfurt el día de la inauguración de la nueva sede del Banco Central Europeo (BCE) que ha costado 1.200 millones de euros y se tardado 12 años en construir.
Docenas de personas han resultado heridas después de que unos diez mil de activistas del movimiento ‘Blockupy’ tomaran parte en las manifestaciones y la policía alemana, que ha desplegado entre 5.000 y 10.000 efectivos, ha creado un cordón de seguridad alrededor de la nueva torre de 185 metros del BCE, cerca del río Main.
Neumáticos y contenedores de basura han sido utilizados como barricadas por los manifestantes que protestan contra la política económica del BCE y un camión de bomberos ha recibido un impacto que ha roto su luna delantera al intentar apagar una barricada incendiada.
Algunos de los manifestantes se han enfrentado a la policía con piedras, tres vehículos policiales han sido incendiados y algunos comercios han recibido pedradas en sus escaparates.