El presidente de la Generalidad, Artur Mas; el comisionado lampista para la desconexión, Carles Viver Pi-Sunyer; el consejero de la Presidencia y cerebro del proceso, Francesc Homs; así como juristas del prestigio de David Fernàndez y Meritxell Borrás no salen de su asombro ante la unanimidad del Tribunal Constitucional. Se han quedado estupefactos, convencidos como estaban de que la ley de consultas, las consultas, el 9N y lo que les saliera de la manguera no sólo era constitucional, sino un compendio jurídico de primera categoría universal. Y resulta que era un truño, o eso es lo que dicen los doce magistrados del TC. No preocuparse. Aquí y ahora tiene más valor un burofax que un fallo del Constitucional.
Eso sí, tiene efectos estéticos, que son los que reseña María Jesús Cañizares en el Abc: "La foto de aquel «histórico» 28 de septiembre de 2014, fecha en la que el presidente Artur Mas firmó el decreto de convocatoria de la consulta del 9-N, se ha ido difuminando hasta que, ayer, el Tribunal Constitucional (TC) la borró completamente. De aquella imagen ya se apearon sus tres principales aliados secesionistas, ERC, ICV y CUP, mientras que Unió, socia de Convergencia en la federación de CiU y contraria a la independencia de Cataluña, lo hará previsiblemente después de las elecciones municipales de mayo. Son pocos los que todavía creen en el proceso de Mas".
Continúa la crónica: "La resolución del TC se produce a siete meses de las elecciones autonómicas avanzadas por el líder de CiU (es el segundo adelanto electoral desde que se convirtió en presidente de la Generalitat en 2010) en un intento desesperado de retener a Esquerra y demostrar que su plan cuenta con apoyo social y transversal. Y también con un discurso cada vez más radical, pues el dirigente nacionalista se ha propuesto crear « estructuras de estado » de forma inminente y ha encomendado a su nuevo comisionado de la transición nacional, el ex vicepresidente del TC, Carles Viver Pi i Sunyer, redactar una constitución catalana provisional en previsión de una hipotética independencia".
Genial. Otra "Constitución". No será por constituciones. En el orden del día del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) figura el expediente Santiago Vidal. Hoy se podría quedar con la brocha en el aire y su carta magna en el tintero. ¿Tintero? De eso va, también en e Abc, el artículo de Oti Rodríguez Marchante: "Con toda la tinta que produjo a finales del verano pasado la pluma de Artur Mas (puesto que la frase se presta a equívoco, se aclara que se refiere a la Inoxcrom de las grandes ocasiones y no a ninguna ligereza post vacacional), ahora llega el Tribunal Constitucional y por unanimidad declara que, por mucha tinta que produjera, lo que no tenía aquella pluma era precisamente tinta: firma en blanco, en el agua, rúbrica de humo…, en eso se queda aquel pomposo acto de firma del decreto de convocatoria del referéndum de independencia. (...) Aunque el que ha dejado bien seca la glándula del calamar Mas no ha sido el Tribunal Constitucional, sino el fabuloso Jordi Pujol Ferrusola, que tiene más tablas y más obra que Flotats, y que le dijo una de esas frases como sacadas de «El Padrino», más rotunda y redonda que aquella tan sobrevalorada de «le haré una oferta que no podrá rechazar»… Jordi Pujol Ferrusola le selló la glándula, le tapó la salida, le destrozó cualquier estrategia de fuga con unas palabras tan amistosas, tan cercanas, tan de corazón a corazón que a Artur Mas le tuvo que asomar forzosamente una lagrimilla: «Sé que el día que lo necesite, lo encontraré»… Glup… Menos mal que salió Rahola en su defensa: «estoy en condiciones de decir que no son tan amigos»…, que viene a ser como si Luca Brasi le dijera a Clemenza que está en condiciones de asegurarle que la oferta de Don Vito la puede rechazar si lo cree más conveniente".
La alerta generada por la comparecencia de Jordi Júnior es naranja/rojo. No sólo por la grabación de La Camarga, sino en Convergència, según refiere Francesc Marc Álvaro en La Vanguardia: "JPF no dijo la verdad cuando declaró y repitió que “ el señor Mas es muy amigo mío”. Los hechos desmienten rotundamente al primogénito. ¿ Por qué lo dice ? Es evidente que estas palabras son un dardo contra el president y, sobre todo, dan munición a todos los que quieren tumbarlo. ¿Aviso? ¿Resentimiento? ¿Ajuste de cuentas? La respuesta la encontraran ustedes en las mismas frases de Júnior: “ Él, hoy, no tiene tiempo, ni mañana, no antes, ni hace dos años ha tenido tiempo de llamarme. No me preocupa. Sé que yo el día que necesite del president Mas, se pondrá al teléfono. O me contestará con una carta. O me atenderá”. CDC y Mas tienen un problema más, y no es pequeño. Pueden simular que no existe o pueden afrontarlo con energía y coraje".
Y concluye Álvaro: "Es un problema que obliga a completar definitivamente la despujolización que Mas empezó cuando estaba en la oposición, lo cual incluye hacer una refundación de veras. Mi diagnóstico es claro y sincero : más allá de lo que dicten los tribunales, en la arena política, o se salvan los Pujol o se salva Mas y lo que CDC representa para mucha gente de este país. O una cosa o la otra".
Tras el debate sobre el estado de la Nación, Arcadi Espada, en El Mundo, subraya el silencio presidencial en relación a Caaluña. Escribe Espada: "El receso del debate secesionista es obvio, en términos de share: hay fatiga y no está pasando nada; y, además, los líderes españoles aceptan con naturalidad escalofriante el llamativo sometimiento de la política a la actualidad. Pero la actualidad no es la única ni la más inquietante razón de la actitud elusiva del presidente del Gobierno. Sobre los silencios de Rajoy deben de haberse ya escrito varias tesis doctorales. Hasta el 9 de noviembre se habló de él así, y con la boca abierta: «Calla, porque sabe lo que hace». Hoy se dice, mascullando: «Calla, porque no sabe lo que hacer». Algún docto amable debe susurrarle al presidente que el prestigio del silencio se le ha acabado para siempre".
Tremendo sidral en El Periódico y en el Ara por la religión (católica) en los colegios. Se hacen cruces en ambos periódicos de los osados planes de la Conferencia Episcopal. En el primero, Andreas González titula así: "La religión evaluable de Wert resucita los rezos en la escuela". Y escribe: "Si el temario de la nueva asignatura de Historia de España de bachillerato llegó a ser tachado de «aberrante» y «casposo» por los académicos, por su sesgo ideológico y las omisiones al abordar sobre todo el franquismo, incluido el papel de la Iglesia en la dictadura, algo más contundente, si cabe, ha sucedido ahora con los currículos que el ministerio que dirige José Ignacio Wert ha aprobado para la asignatura de Religión de los alumnos de educación obligatoria -primaria y ESO- y bachillerato. El temario, cuyo contenido ha sido elaborado por la Conferencia Episcopal, de acuerdo con los acuerdos suscritos con la Santa Sede, propone actividades como que los alumnos de primero (6 años) «expresen con palabras propias el asombro por lo que Dios hace», identifiquen y enumeren «los cuidados que reciben en su vida como don de Dios» o memoricen y reproduzcan «fórmulas sencillas de petición y agradecimiento». Una formulación ambigua que sin embargo abre las puertas de par en par para que se puedan recuperar los rezos en las aulas".
A este paso van a enseñar a los niños los Diez Mandamientos y la tabla de multiplicar. ¡Qué barbaridad!
26 defebrero, Santoral del Abc: Santos Alejandro, Porfirio, Agrícola de Nevers, Andrés de Florencia, Faustiniano de Bolonia, Víctor y Paula Montal Fornés.