Josep Lluís Núñez Clemente y su hijo Josep Lluís Núñez Navarro deberán volver a la cárcel después que el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 6 de Cataluña haya revocado el tercer grado que se había concedido al constructor y expresidente del Barça y a su descendiente, condenados por soborno por el caso Hacienda.
El juez ha tenido en cuenta el recurso de la fiscalía, del pasado 16 de enero, contra la decisión de permitir un tercer grado a los Núñez de la Dirección General de Servicios Penitenciarios de la Generalidad. La fiscalía recurrió este régimen de semilibertad al entender que "incumple la totalidad de los fines" de la pena al haber pasado un periodo de tiempo insuficiente desde su entrada en prisión, tan solo 36 días.
El tercer grado, que solo obliga a acudir a prisión para pernoctar, y solo los días laborables, le fue concedido a los Núñez el 23 de diciembre, tras haber ingresado en prisión el 16 de noviembre, condenados en firme por una trama de sobornos a cargos de alto nivel de la Agencia Tributaria para evitar pagar impuestos. Los hechos por los que fueron condenados sucedieron en 1991.
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