El 'mástil' de Monedero, la servidumbre y Cristina Pedrochef
Una de las hijas de Zapatero se ha metido a periodista y ya es becaria en el canal del Real Madrid. Carmen Rigalt demuestra que el tamaño sí importa con una exclusiva sobre un miembro de Podemos.
24 enero, 2015 11:46Los ricos también lloran. Cristiano e Irina lo han dejado. Agendas incompatibles. Demasiados partidos y muchos desfiles. La ruptura, sin embargo, no parece haber alterado al delantero. Ya le relacionan con una periodista del canal de televisión del club, que es el Real Madrid para las despistadas/os. Lucía Villalón se llama la compañera, que sustituirá a Lobatón en las retransmisiones de lo de la Formula One. Es decir, que del canal blanco ha saltado a La Sexta o donde sea que 'hagan' las carreras de autos. Cristiano, por su parte, corre y corre en pos de otro balón dorado y de la mujer de su vida, que ahora es periodista. Como se junten todas las esposas, novias y afaires en el vestuario de sus chicos, aquello va a parecer el consejo de redacción de la revista Mary Lu, un proyecto en ciernes que pretende agitar las plácidas y densas aguas, como de Mar Muerto, del postureo del corazón, con menos mansiones delirantes y más cotilleos duros y gente fea.
El periodismo es como el agua, que puede fluir, romper, es la copa, el vaso y la jarra.... Agua, decía el filósofo oriental Bruce Lee, "be water" y lávense la manos después, y antes, como Torrente. El periodismo, pues, es todo y nada, se escapa entre los dedos o ahoga, arrastra y lo atrapa todo, de ahí que se pueda dedicar cualquiera. Como a lo de la cocina, que llega un crestas y se convierte en el rey de la fusión de los fogones. Así pues, cuando un florero (o florera) no sabe qué hacer, se hace periodista y el hábito hace al monje. Lo mismo exactamente que en la cocina con una chaquetilla y unas rastas. En eso, lo primero, ha debutado una de las hijas de ex presidente Zapatero. De becaria en el canal de Florentino se ha colocado. ¿Pero ZP no era del Barça? Sí, pero a veces ocurre que los padres nada pueden y la hija ha salido blanca aunque antes fue gótica.
En cuestión de semanas se le ve dando el minuto y resultado en una de esas fantásticas tertulias deportivas en las que individuos adultos, casi provectos, se ganan honradamente la vida parloteando de los problemas digestivos de Messi, de la táctica del rombo, los laterales carrileros y de un tal Örgeêrgardfenshen, que es un Pelé vikingo menor de edad. Lo de esas tertulias debe ser como que te paguen por jugar al Scalextric; vivir permanentemente en el momento exacto del tránsito de la niñez a la adolescencia, cuando la alegría es viernes y los domingos son muy cortos.
Periodismo y cocina. Después de dar las uvas (o antes), Cristina Pedroche se ha emparejado con David Muñoz, el triestrellado cocinero del Diver-Xo que luce un "peinado" mohicano que es el último grito. "Peloescoba" le llaman por la espalda. Así que ahora Cristina es Cristina Pedrochef y se supone que en casa cocina él, si es que alguna vez están en casa. Total que la semana pasada se hablaba mucho de Manucho, que es el chaval que escandalizó a Los Chunguitos por exhibir impúdicamente la manguera en la ratonera del big brother. Y resulta que a Manucho, que da gusto escribirlo, se le había relacionado anteriormente con nuestra Cristina, que es el mito erótico actual de los españoles, póster de fondo de los trailers continentales y la reina de los talleres mecánicos. A ella no le gusta la etiqueta de presentadora (periodista) y en eso se le nota el buen gusto. Como ha salido en 'Águila Roja' o en una de esas series de televisión españolas que dan entre pena y grima prefiere considerarse una actriz, igual que Pilar Rubio, la pareja de Sergio Ramos.
Tania Sánchez y Pablo Iglesias también han roto. Incompatibilidad de agendas, complicaciones políticas, blablablá. Es asunto conocido que tiene el glamur de una multiplicación por cero. Quién sí tiene interés es Juan Carlos Monedero. Tanto que suscita el imprescindible artículo en La Otra Crónica de El Mundo de Carmen Rigalt. "El secreto oculto de Monedero", titula Rigalt. ¿Qué piensan? ¿En el euro latino? ¿En que Monedero va sobrado de apellido? Sí, sí, pues no. Extracto literal: "De Monedero se dicen muchas cosas, verdades y mentiras, pero hay de él un aspecto ignorado que, si trascendiera, podría convertirlo en un icono. Es una dimensión nueva del personaje. Algún amigo suyo suele hacer chanza recordando la presencia del hombre de Podemos en algunas playas nudistas. Monedero no se da pisto, pero cuentan que yendo con él puedes tender la toalla y tomar el sol a la sombra de su mástil. Así de claro".
Patidifusa exclusiva que podría aclarar algunos aspectos, tal vez, de la presencia de Monedero en una reunión de amigas de Carmen Lomana, que cuentan y no paran sobre el cimbreante verbo del miembro de Podemos. Unas elecciones no son una competición de a ver quién la tiene más larga o mea más lejos, pero algo tienen que ver con esos conceptos. Cada vez está más claro que la tuna de la Complutense va a gobernar en España, en toda España. El tamaño, pues, sí que importa en este país de periodistas y cocineros, que de toda la vida han formado parte de la servidumbre.