Kim-Jong un ha inaugurado en la capital norcoreana, Pyongyang, un orfanato de color rosa y se ha divertido en una piscina de bolas. En las imágenes publicadas, el 'amado líder' aparece con sus bastones para caminar en un edificio que tiene hasta un pequeño circuito para que los pequeños aprendan los símbolos de circulación.
Es una nueva aparición del líder norcoreano después de desaparecer de la vida pública durante un mes, perdiéndose importantes citas como el aniversario del Partido de los Trabajadores. La agencia de notícias del hermético pais -KCNA- divulgó que Kim-Jong un asistió a la inauguración de un nuevo complejo residencial destinado a científicos en Wisong y expresó satisfacción al ver que los apartamentos y las casas habían sido decoradas con diferentes colores.
No deja de ser chocante la estampa del líder y el círculo de personalidades que le envuelve, pertrechados con uniformes militares y rostro serio, y el edificio en si, que parece extraído de alguna película infantil o serie de dibujos animados.