Vida

A Pujol no se le ponen al teléfono, en La Vanguardia

El Abc continúa con la consejería de "Salud" y el lenguaje forense: "pronóstico vital corto". Marruecos pugna con Qatar por hacerse con la mezquita de Barcelona, escribe Martín de Pozuelo en el diario de Godó.

26 septiembre, 2014 09:57

Si la salud moral de una sociedad se mide por cómo sus administraciones cuidan a los enfermos, ancianos, niños y desvalidos, estamos mal, vamos a peor y nos da lo mismo. Las protestas por los recortes en la sanidad pública, aquí, en Madrid y en toda España, no han causado la más mínima conmoción en los partidos de gobierno. Si la olla a presión no ha explotado es gracias al personal sanitario, cuyas condiciones no son las de un misionero en África (murió García Viejo), pero requieren de ingentes dosis de humanidad para sofocar la incompetencia y en algunos casos la maldad de los administradores de la sanidad.

La humanidad de médicos y enfermeras es el único dique de contención contra el caos absoluto y seguramente uno de los ejemplos más hermosos y exitosos de autogestión y civilidad. La sanidad pública en España, de la que Cataluña sí es una locomotora, es un auténtico milagro, casi lo único que funcionaba y funciona a pesar de los rejonazos, palos, trinques y barbaridades perpetradas por la suma entera de administraciones que se dedican a intentar romperla.

Mientras suenan clarines, timbales, tenoras y violines, las farmacias se quedan sin cobrar lo suyo que les debe la Generalidad; igual que las entidades que se dedican a ayudar a los demás no van a cobrar este mes los cuatro euros que les dan por llegar mucho más allá de donde la dicha Generalidad ni alcanza ni le interesa. Contaba ayer el Abc la orden recibida por los médicos de familia de marcar con una cruz a los terminales, por lo de ir ahorrando. Así era el texto: "Los médicos de Familia catalanes llevan meses preocupados por la posible repercusión de un protocolo impulsado por la consejería de Salud de la Generalitat en el que se les obliga a señalar con una cruz, en un programa informático, a los pacientes crónicos más complejos que podrían fallecer en los próximos meses". Y esta la pregunta: «¿Le sorprendería que este paciente falleciera en los próximos 12 meses?».

Hoy continúa la historia, revelada por la periodista Esther Armora, que escribe: "La Generalitat de Cataluña intentó elevar el protocolo para señalar a los pacientes terminales hasta los hospitales, aunque la idea embarrancó gracias a la oposición de los facultativos, según han confirmado a Abc fuentes hospitalarias. Tal como avanzó ayer en exclusiva este diario, la Consejería de Salud ha impulsado un programa interno para los profesionales de atención primaria en el que los médicos deben responder a varias preguntas sobre el estado de los pacientes para cerrar su perfil. Entre las preguntas que se les plantea figura la siguiente: «¿Le sorprendería que este paciente falleciera en los próximos 12 meses?». Si la respuesta es que sí, el enfermo pasa de ser un paciente crónico a un paciente «MACA» (Enfermedad Crónica Avanzada) o lo que se conoce como enfermo terminal. La respuesta afirmativa puede condicionar el tratamiento que recibirá el paciente a partir de aquel momento. Los facultativos sospechan que tras la orden de clasificar a estos enfermos está el ahorro, dado que la consigna explícita de la Administración es «evitar acciones innecesarias» en estos enfermos de pronóstico vital corto".

Los eufemismos forenses son de una concisión definitiva. ¿Cómo está? Tiene un pronóstico vital corto o presenta lesiones incompatibles con la vida. No hace falta decir más y no se puede decir menos. Son perfectos.

Como sabrán las personas interesadas en la política, el presidente de la Generalidad ha decidido que el sábado se levantará, se maqueará y firmará la ley de consultas para que salga en el DOGC y acto seguido la convocatoria de lo que llaman una consulta cuando quieren decir que es un referéndum. En El País lo constatan Fernado Gara y Miquel Noguer: "Artur Mas comenzó a descubrir este jueves sus cartas sobre la convocatoria de la consulta del 9 de noviembre. El presidente de la Generalitat firmará mañana el decreto para convocar el referéndum sobre la independencia de Cataluña, después de una semana maniobrando para darle la máxima solemnidad al acto. Haciendo coincidir la firma con el fin de semana, Mas no solo conseguirá retrasar la impugnación de la consulta durante unas horas o días extra, sino que también limitará los efectos de la comparecencia de Jordi Pujol, hoy, en el Parlamento catalán para aclarar su confesión de fraude fiscal".

También apuntan otras interioridades del asunto en El País: "Mas lo tenía todo a punto para firmar el decreto de convocatoria el pasado viernes, pero lo demoró, oficialmente por cuestiones burocráticas. Fuentes de la Generalitat aseguran que antes de fijar la fecha definitiva para la firma mañana, el Gobierno de CiU barajó otros dos días de esta semana. Mas no quería plasmar su rúbrica mientras durara el pleno ordinario del Tribunal Constitucional —entre el martes y el jueves— para evitar el riesgo de una impugnación en tiempo récord. Además, los partidos que apoyan la consulta, especialmente ERC, ICV y la CUP, no querían que la firma coincidiera en con la declaración de Jordi Pujol de hoy. Mas ha acabado por encajar ambos condicionantes planificando para mañana la convocatoria del referéndum. La consulta no esconderá completamente la comparecencia de Pujol, pero sí que minimizará sus efectos, pues a la mañana siguiente de la comparecencia del expresident ya estará convocada".

Los periódicos oscilan entre el referéndum y Pujol, esta tarde en el Parlament a partir de las 16:00 horas. El primero en coger el toro por los cuernos es el director de La Vanguardia, Màrius Carol, que describe la figura de un jarrón chino roto: "Hoy un Jordi Pujol de trazo desleído comparece ante el Parlament. Ha redactado once folios en los que insiste en la explicación de la herencia paterna como origen del dinero andorrano, tal como hizo en el comunicado que escribió hace dos meses. De nuevo él ha sido el principal redactor, aunque esta vez ha consultado sugerencias de algún abogado, de algún notario y de algún antiguo colaborador. No todas las personas a las que llamó se pusieron al teléfono. Es lo que tiene la pérdida de visibilidad de quien antes estuvo perfectamente dibujado a los ojos de la sociedad catalana, hasta ser considerado un referente incluso para quienes no lo votaban. Entre los amigos y conocidos con los que Pujol habló, varios le aconsejaron que declinara ir al Parlament para no ser objeto de escarnio. Y porque difícilmente convencerá a nadie en una Cámara que ya lo ha condenado. Pero el expresident no ha querido dar plantón a los diputados".

Ningún diario espera nada de la comparecencia de Pujol, aunque El Periódico tiene siete preguntas para él. A saber: Origen de la fortuna, si existe vinculación con Banca Catalana, si rentó intereses, por qué tardó tanto en confesar, si tiene cuentas en el extranjero, si está al corriente de los negocios de sus hijos y si ha recibido presiones políticos. Interrogatorio blandito. Pocas preguntas parecen para la cantidad de derivadas que van desde el contrabando de divisas a finales de los cincuenta a los grandes negocios de consultoria de su hijo mayor.

Para el Ara y El Punt-Avui, lo sustantivo es el anuncio de Mas, mientras que Pujol ocupa un lugar menor. "Avui toca", dicen en el Avui. Y algo del "veredicto de los partidos" en el Ara. Faenas de aliño, capotazos y un muro entre la convocatoria de la consulta y el caso Pujol. En El Mundo, la apertura es que "Mas compara su 'astucia' con la de 'David frente a Goliat'". Mas el astuto, rey de Ítaca. En La Razón, en cambio, se decantan por el patriarca y titulan: "Pujol se escudará en que Cataluña sufre un linchamiento sin precedentes".

Un linchamiento y una cierta transformación. Hay noticias que pese a no estar en las portadas son tan o más importantes que las de primera página. Eduardo Martín de Pozuelo, en La Vanguardia, escribe sobre la mezquita de Barcelona, un asunto negado por nuestras autoridades con tanto celo que acaba por confirmar las sospechas. Sostiene Pozuelo: "Las autoridades marroquíes están moviendo influencias ante distintos departamentos de la Generalitat de Catalunya con el propósito de abrir una gran mezquita en tierras catalanas. El proyecto tiene buena acogida por el Govern, que se muestra muy receptivo por una idea que motivó en junio pasado la visita a Rabat de Enric Vendrell, director general d’Afers Religiosos, según fuentes de la Generalitat. (...) La trastienda de este caso se explica en informes del Estado a los que ha accedido La Vanguardia que desvelan que Rabat ha diseñado un plan con el fin de obtener el apoyo de la autoridades catalanas para que sea Marruecos quien abra una gran mezquita de Catalunya antes de que lo hagan otros países con el mismo interés, como es el caso de Qatar. Este plan marroquí, que cuenta con la simpatía institucional del Govern, ha dado algunos frutos, pues consta que ya se han producido varios encuentros también en Catalunya para encauzar el proyecto que, según los mencionados informes del Estado, se dirige desde el ministerio marroquí del Habous o de Asuntos Islámicos. Según la seguridad del Estado, especialmente atenta a los asuntos relativos al mundo musulmán, el instrumento para acercarse a la Generalitat ha sido la Unión de Centros Islámicos de Catalunya (UCCIC), a la que relacionan estrechamente con la esposa de Nouredine Ziani, el que fuera director de la fundación Nous Catalans de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) que fue expulsado de España en el 2013 por actividades contrarias a la seguridad nacional".

Pues al final va a ser verdad lo de la Monumental

26 de septiembre, San Cosme y San Damián, Justina, Amancio, Eusebio, Cipriano, García y Senador.