A Ramon Espadaler se le ve de lejos que es un tipo rápido de reflejos. No hay más que ver lo poco que ha tardado en echar a los leones del Parlamento autonómico catalán al director general de los Mossos d'Esquadra, Manel Prat i Peláez, cuya dimisión, cese o "purga" -según la portada de El Periódico- es inminente. Habrá ayudado el que Prat i Peláez sea militante de Convergència y Espadaler i Parcerisas, de Unió; que el primero sea el comisario político de Felip Puig y el segundo, el sustituto del dicho Puig. Sea como fuere, Espadaler va a soltar lastre y el tiempo que le queda al frente de los Mossos al supracitado Prat se mide en telenotícies. No es fácil que supere el de este mediodía.
¿Y esto? ¿Qué ha pasado? Casi se me pasa explicárselo, por si no se han enterado aún. Es que una jueza de Barcelona ha imputado a ocho agentes de Prat. Y así podría continuar líneas y más líneas sin hablarles de la muerte de Juan Andrés Benítez; me podría tirar un mes entero, el que ha pasado desde esa muerte, escurriendo el bulto. No es que en la prensa catalana se haya eludido el asunto. Al contrario, en La Vanguardia y en El Periódico periodistas como Enrique Figueredo, Santiago Tarín y Jesus G. Albalat han obtenido informaciones, testimonios y pistas abundantes como para que alguien, Ramon Espadaler, por ejemplo, se hubiera coscado y enterado de que a ocho mossos se les había muerto Benítez en sus manos antes de que lo haya tenido que destapar un auto judicial de imputación con cargos tales como delitos contra la vida, la integridad física y moral, obstrucción a la justicia y coacciones.
De tal manera que al portadista de La Vanguardia no le ha quedado más remedio que titular: "Dura imputación judicial a los mossos del caso del Raval". ¿Dura? Salvo el detalle de este extraño adjetivo para referise a un auto (judicial) en lugar de a una detención (policial), hasta el director del periódico, José Antich, se hace cruces y señala a Prat. "Es necesario establecer responsabilidades, y no porque la oposición haya pedido explicaciones parlamentarias, sino porque la acumulación de errores no deja otra salida". Por si quedaban dudas, el editorial principal del diario de Godó está dedicado al asunto y se titula: "Una dimisión urgente". Tan urgente que de no producirse en los próximos minutos La Vanguardia apunta una sola alternativa, no dos ni tres: "O bien ser destituido de inmediato".
En El Periódico refuerzan la portada con una fotografía de la comparecencia de Prat y Espadaler del pasado jueves. El ¿todavía? director general de los Mossos tenía el día fotogénico, así que le concedió al fotógrafo Ferran Nadeu una instantanea impagable en la que junta las manos cruza los dedos y extiende los índices a modo de cañón de pistola. "Purga en los Mossos", decíamos, es el titular, calado en la imagen.
En el Ara, el asunto se explica también con cierto despliegue: "Imputados y apartados". Pero la foto, en cambio, es de tres tipos disfrazados de legionarios tocando el tambor. Tal cual. Se conoce que el Consorcio de la Zona Franca ha cedido un solar en un cuartel en desuso a una asociación de ex legionarios. ¡Uaaalaa!, notición notición.
El Ara, que aspira a ser La Vanguardia de la Cataluña Estado, es un periódico joven y sin complejos, de lo más moderno que hay en diseño y concepción. Muy visual y hasta audiovisual, rasgo que le aportan firmas tan célebres como las de Toni Soler, Antoni Bassas o Albert Om, entre tantos otros. Valga decir también que Mònica Terribas fue su editora ejecutiva (o algo parecido) entre lo de dirigir TV3 y mandar en Catalunya Ràdio. O sea, hablamos de un periódico orientado y pofesional. Y ahí está, señalando el verdadero qué de qué, la auténtica sustancia de las cosas. Entre un muerto real, un cadáver político y tres tíos tocando el tambor, no hay color. Lo que compunge a los ciudadanos hasta quitarles el sueño no es el caso Raval, para nada. La Legión es lo que preocupa. Me parto y me mondo, qué graciosos son estos humoristas del Ara. Insisten tanto en lo de la cabra, los vuelos rasantes y las maniobras militares y demás que al final, las brometas, el fino sentido de la ironía, esos guiños tan agudos al lector, más que gracia pueden producir otra cosa, más parecida a encontrarse una nata espesa y viscosa flotando en el café con leche.
Puestos a mirar para otro lado, El Punt Avui solventa el trance de la muerte del ciudadano Benítez con un titular mucho más directo, mucho más pequeño también y sin duda más del agrado de la Generalidad: "Interior aparta a los mossos imputados por el caso Raval". Ahí es ná la rapidez de Espadaler (de "drástica" califican la medida) y la solvencia democrática de la "institución". Ha sido un breve lapso, cosa de cuatro semanas (y decenas de pruebas, vídeos y fotografías de los ciudadanos) e Interior ha tomado enérgicas medidas. Pues sí, todo un caso de buena praxis política.
Pese a todo, no es previsible que al Ejecutivo autonómico le vaya a pasar factura nada que puedan hacer a título individual los mossos o a título corporativo sus cargos públicos en Interior. En la prensa de Madrid casi ni se han enterado de este expediente X. No deja de resultar significativo el revuelo causado por la censura de la imagen del torero tuerto o el cachondeo que desató la prohibición de los circos con animales (por si las cabras) frente a la escasa repercusión de la muerte de Benitez y sus derivadas. Como en el caso del Avui y el Ara, no es que no se haya informado, pero por dentro y con un relieve de menos vuelo que el que se destila respecto a las cogitaciones de la política. Pesan más otros asuntos. Por ejemplo, en El País, que: "La Banca echa un pulso a Guindos por la elección de su presidente", o que "Mas pacta con ERC nuevos impuestos y privatizaciones". En El Mundo, que: "La Fiscal pide el documento del espionaje de la NSA en España", que el Gobierno está que lo tira y se gasta 28 millones en asesores y que "Bárcenas se reunió 11 veces con Del Rivero en 11 meses". ¿11? El caso es que un día más, y van dos, no hay tema catalán en la portada del periódico de Pedro J. En el Abc, para la primera plana de la edición catalana, mantienen una imagen del hijo de Carrillo, el rector de la Complutense, con el título: "El PSOE da las gracias al rector Carrillo por apoyar su campaña". Pues bien. En un suelto, al lado del medio embargo del palacete Urdangarín-Borbón en Pedralbes, se informa sobre el caso Benítez: "La juez imputa a ocho mossos por la muerte de un detenido", en lo que sería la aproximación al asunto más directa, clara y concisa al asunto. En La Razón, por su parte, celebran su XV aniversario con una fotografía de alto voltaje político. Aznar, Zapatero, Rajoy y los Príncipes de Asturias estuvieron allí, juntos. Aparte de Soraya Sáenz de Santamaría, el presidente de la Comunidad de Madrid, el del Congreso y el del Senado. Poderío. Con decir que en la foto sólo faltaban el director y el propietario del periódico queda más que meridiano el poder de seducción del proyecto que fundara Anson cuando se rompió lo suyo con Abc. Había tanta peña ayer en La Razón que mañana dan un suplemento gráfico para que les entre todo el personal.
Lo que más subrayan en la prensa madrileña es la propuesta de la Generalidad para financiar el cine catalán con un impuesto sobre la conexión a internet. Fenomenal, lo mismo sirve para que Joel Joan haga una segunda parte de su gran película Fènix 11/23, el escalofriante caso del adolescente que fue interrogado por la Guardia Civil. La pasaron por TV3, la película, después del 11-S. En la segunda parte, podría tomar como referente el caso Benítez, ¿no?
Vista la prensa, lo nuestro, la independencia y demás, es hoy un asunto bastante relajante, con algunas novedades. Cuenta el Avui que Joana Ortega se ha vuelto del Canadá poco convencida de eso de votar por internet, pero es en La Vanguardia, como casi siempre en este asunto, donde se precipitan las claves de fondo. Jordi Barbeta, por ejemplo, explica que "Mas declara materia reservada la pregunta del referéndum", puesto que "ve contraproducente la sobredosis mediática del debate soberanista". Sobre todo para negociar con Madrid. Será materia reservada, pero María Dolores García explica en su artículo que "se abre paso una propuesta que gusta a CiU (sobre todo a Unió) y que podría parecerle bien a Iniciativa: se trata de una pregunta sobre si Cataluña debe ser un Estado propio dentro de Europa, con dos respuestas, sí o no. Pero si se elige el sí, se abre un árbol con tres opciones: federalismo, confederación o pacto fiscal".
Interesante propuesta. Como los partidarios del no, Ciudadanos y el PP, están a la gresca y no para consultas (según explican todos los diarios) no se negocia un "no" de tres subconjuntos, que podrían ser: más autonomía, menos autonomía o por si nos echan de Europa, que es un supuesto tan plausible como el de quedarse tan ricamente en la UE tras optar por ser la Somalilandia del sur de los Pirineos.