Vida
Esperanza Aguirre, un tanque español en la Diagonal
La prensa soberanista teme más a la ex lideresa de la Comunidad de Madrid que a un tanque de la Brunete en la Panadella y la exorcizan con titulares preventivos.
20 septiembre, 2013 09:04No es cierto que en las redacciones de los periódicos se diga eso de no dejar que la realidad estropee un buen titular, consejo que se atribuye a Hearst, William Randolph. Tal vez antes, en un pasado muy remoto, sí pasara, pero desde hace años es casi imposible encontrar un buen titular, por lo que se supone que no estarán amañados. Craso error. A la realidad se la combate ahora desde los medios de comunicación de tres formas: se niega (vieja escuela), se replica o se malinterpreta, que es lo más frecuente. Y en caso de duda, se entrecomilla y pasapalabra. Los titulares no suelen ser buenos, pero a veces sí que deben resultar eficaces para la causa, la que sea.
En el caso de quienes replican la realidad, la visita de Esperanza Aguirre al Círculo Ecuestre ha sido una gran oportunidad perdida. Aguirre se presenta en un mitin de la Esquerra, como se escribía ERC en los periódicos de Chaves Nogales, y es designada alcaldesa, o lo que haga falta, por aclamación popular. La prueba de ello es muy antigua y se renueva y destila en la máxima de Johnathan Swift: "Cuando en el mundo aparece un verdadero genio, puede identificársele por este signo: todos los necios se conjuran contra él". Y no es que Aguirre sea un genio. Se trata más bien de lo segundo, eso de los necios y tal.
El Punt Avui condensa en su portada el estilo periodístico de afrontar la realidad a base de apriorismos. Que España es una castaña es su principal argumento editorial, hoy, siempre y que no decaiga. Tener fe en lo contrario, en que los periódicos puedan ser otra cosa, es de esos esfuerzos que los cínicos relacionan con la melancolía. Y a Esperanza, en el viejo Avui, un capotazo de alivio y que salgan los picadores. Para el periodismo soberanista, la ex lideresa es peor que un blindado de la Brunete repostando en la Panadella. La temen y les desconcierta tanto que componen el titular de tres cuerpos, en el dicho diario, que paso a describir. Primero, recibimiento: "Provocadora Aguirre". Segundo, abre comillas: "Hay que catalanizar España". Tercero, aclaración, subtítulo en un cuerpo menor: "Invita a sumarse al orgullo de sentirse español". Menos mal que nos aclara el portadista que Esperanza Aguirre no se ha bebido el entendimiento y es la misma españolista irredenta y desacomplejada de siempre. Todo eso en un esquinazo de la portada. Para rematar la teoría sobre el país vecino, cuerpo sesenta para el titular del colapso radical del Estado, que deja de recaudar cada año más de quince mil millones de euros de IVA por su torpeza genética y constitutiva.
En el Ara siempre intentan ir más lejos (en lo gráfico, se entiende) y hasta muestran la foto de Esperanza avanzando decidida por la Diagonal, lado montaña. Impecable, la ex presidenta de la Comunidad de Madrid, con una cazadora, o lo que sea, de piel y roja, que debe ser lo más, como la falda, el bolso y los zapatos. Quienes se fijan y saben de estas cosas coinciden en destacar el "look Aguirre", y no sólo para meterse con otras políticas. Por encima de la imagen, el titular principal asegura que "Madrid baja impuestos, Barcelona los congelará" y una "reflexión" sobre la austeridad en Barcelona y el fracaso olímpico, que Madrid es España, que España es Botella y que lo que viene siendo el Ayuntamiento está endeudado hasta las cejas. Y todo eso en menos caracteres que un tuit, lo que es al periodismo lo mismo que un centro levantando la cabeza en el fútbol. Vamos, que saben que lo que se hacen, en lo del periodismo.
El Papa Francisco ofrece a la mayoría de los diarios una salida alternativa a quince días de portadas catalanas. La conmoción causada por las confesiones de Su Santidad (La Vanguardia ya lo deja en Francisco a secas, tratamiento que es lo último del vaticanismo) a una revista de los jesuitas es el argumento. Que ya no es de derechas, se subraya. La Razón replica a eso con un titular en clave pastoral: "Soy un pecador bastante ingenuo". Pero compone la explicación más completa de todas las revelaciones papales, incluida la sonora "retractatio", con entrevista al autor del "scoop".
En Abc sorprende la ausencia papal de la portada y la presencia de Ana Botella y su rebaja de impuestos el día de la vía catalana de Esperanza para regenerar España. Debe haber mar de fondo, en el PP. Abordan el tema, claro está, y Carlos Herrera escribe uno de los más interesantes artículos de la prensa de hoy. En Cataluña, explica Herrera, "llegabas y había sitio al fondo". Se jodió el Perú, apunta el mataroní de adopción, por culpa de CiU. "Catalanizar España no es una mala idea. Falta, solamente, que se lo crean algunos catalanes", concluye.
El País es quien más espacio dedica en su portada a los asuntos propiamente catalanes, que no a Esperanza, con un titular combativo, cavernícola que se dice aquí. "El espejismo de una Cataluña fuera de la UE, pero usando euros". Y remata en el subtitulo: "Mas se aferra a la divisa común pesea ser incompatible con la secesión". Zasca.
Mención aparte merece el artículo de Albert Garrido en El Periódico, que requiere algo más que una lectura en diagonal. También destaca el palo de Enric González a Esperanza, another time, en El Mundo, diario que abre con el Faisán. La actuación del fiscal Bautista fue digna de un editorialista muy cabreado. El asunto del Faisán, si recuerdan, es un queo de uno de la policía a uno de ETA cuando se negociaba. Está grabado, está probado, pero para nada y poco más. Espanta y deprime a partes iguales, tanto como que los fiscales se dediquen a hacer chistes de Harry el Sucio y Torrente en lugar de a investigar.