Nos entusiasma recorrer los espacios naturales de Cataluña y descubrir nuevas rutas que nos permitan conectar con el territorio de una forma auténtica. Cada sendero, cada bosque y cada congosto nos ofrece una oportunidad distinta para maravillarnos con paisajes poco transitados, respirar aire puro y disfrutar de la riqueza natural del país.
Explorar estos rincones, ya sean muy conocidos o, prácticamente, secretos, se ha convertido en una manera de vivir y entender el entorno, siempre con la emoción de hallar un camino nuevo que aún nos sorprenda.
La ruta de Lleida
El Congost del Mu es un desfiladero formado por el río Segre al atravesar la sierra del Montsec de Meià, en la comarca de La Noguera (Lleida). Se trata de un entorno natural muy llamativo, donde el agua ha ido excavando durante siglos un paso estrecho entre paredes de roca. El paisaje combina zonas de bosque, cortados verticales y tramos de ribera, creando un ambiente ideal para quienes buscan una ruta tranquila, pero con encanto.
La caminata se puede iniciar desde el Pont del Pastor, cerca de Camarasa, o desde Alòs de Balaguer, siendo ambos puntos adecuados para recorrer el desfiladero en cualquier dirección. La ruta completa entre estos dos extremos suma alrededor de 16 kilómetros ida y vuelta; aunque muchas personas optan por hacer solo un tramo y regresar por el mismo camino, ya que el recorrido es fácil de adaptar según el tiempo y la condición física.
Dificultad baja
El sendero avanza siempre cerca del río Segre, alternando caminos de tierra con zonas equipadas para facilitar el paso. Uno de los aspectos más llamativos son las pasarelas metálicas y un puente colgante, que permiten bordear algunos puntos estrechos del congost, que ofrecen vistas espectaculares del desfiladero desde arriba del agua.
A nivel técnico, la dificultad es baja, ya que el desnivel es muy moderado y el sendero no presenta tramos especialmente complicados. Únicamente se debe tener en cuenta que las pasarelas pueden impresionar a personas con vértigo y que es recomendable llevar buen calzado. La ruta es apta para hacerla sin prisas, disfrutando del paisaje, de la tranquilidad y de un entorno que, pese a su espectacularidad, no suele estar masificado.
Alòs de Balaguer
Alòs de Balaguer, la provincia de Lleida donde se encuentra el Congost del Mu, es un municipio de tan solo 120 habitantes, según datos del INE 2024.
Uno de los testimonios más singulares del patrimonio arqueológico de la zona son las pinturas rupestres prehistóricas del Tallat de les Aparets I-IV. Fueron descubiertas en 1976 por Enric Sunyer y Antoni Borrell, con la colaboración de Lluís Trepat, y se adscriben al denominado Arte Esquemático: una manifestación simbólica propia de las comunidades neolíticas que habitaron el territorio entre hace 6.500 y 3.200 años.
La relevancia de estas manifestaciones llevó a que, en 1998, la Unesco las integrara dentro del conjunto declarado Patrimonio de la Humanidad, reconociendo así su importancia científica y cultural. Sin embargo, su conservación se enfrenta a un problema recurrente: la falta de protección efectiva y el desconocimiento general sobre su existencia. Esta situación, que afecta cerca del 88,45% del arte rupestre prehistórico de la provincia de Lleida, convierte estos vestigios en bienes, especialmente, vulnerables.
Alòs de Balaguer
Cómo llegar
Para llegar al Congost del Mu, en coche, has de tomar la AP-2 o A-2 en dirección a Lleida. Si vienes desde Barcelona, después de Lleida, toma la salida hacia la C-13 en dirección a Balaguer. Sigue la C-13 pasando por Camarasa y por Sant Llorenç de Montgai. Una vez en Camarasa, dirígete hacia Alòs de Balaguer por la LV-9047.