Si Barcelona está colapsada, las playas no se quedan atrás. En verano, los pueblos costeros están exactamente igual. Por eso, la alternativa perfecta es, cada vez más, la montaña. En Cataluña ya se ha empezado a notar.
Si tras la pandemia, la gente que se fue a sus casas de veraneo regresaron a sus ciudades, el paso del tiempo ha dejado las cosas claras: en la montaña se encuentra la paz. Eso sí, cerca de las capitales. Prueba de ello es que hay un municipio histórico catalán que cada vez está más de moda.
Dónde está
El pueblo en cuestión es Cardedeu, una localidad a medio camino entre Barcelona y Girona, por tanto, perfecta para aquellos que en un momento dado echen de menos la ciudad. Con una población de más de 15.000 habitantes, este encantador pueblo ha sabido combinar su rica historia y su vibrante presente, manteniendo intacto el encanto de su cultura y tradiciones hasta conquistar a sus visitantes que, con el paso del tiempo, se han convertido en habitantes. Motivos sobran.
La excelente ubicación del pueblo, su patrimonio monumental y cultural y su ambiente acogedor, hacen de Cardedeu un destino atractivo. Pero eso hace tiempo. La sociedad burguesa de Barcelona siempre ha tenido sus lugares predilectos para escapar de la gran ciudad. Lo que ahora pueden ser lugares como Cadaqués o Baqueira Beret, a finales de los siglos XIX y XX era Cardedeu.
Parte de este pasado se nota en sus edificaciones. El municipio es conocido por su espectacular oferta de arquitectura modernista, una herencia que se debe a esos burgueses que encontraron en este pintoresco pueblo el lugar perfecto para establecer sus segundas residencias y apostar por la vanguardia.
Qué ver
Esta élite construyó una serie de residencias modernistas que aún hoy adornan sus calles. Reputados arquitectos como Manuel Joaquim Raspall, autor de la Alquería Cloelia y la Granja Viader, y Eduard M. Balcells, creador de la Casa Gual, dejaron su huella en Cardedeu, que ahora forma parte de la famosa Ruta Raspall del modernismo. Esta ruta se caracteriza por la presencia de edificios que van desde el eclecticismo hasta el clasicismo, incluyendo joyas del modernismo y del novecentismo.
Pero no solo su arquitectura modernista atrae a visitantes y nuevos vecinos. Cardedeu ofrece una rica vida cultural con espacios como el Centre Cultural Cardedeu, donde se celebran actividades de teatro, música y danza, o el Teatre-Cine l’Esbarjo, famoso por su programación de cine de calidad en versión original. Además, el Museu Arxiu de Cardedeu Tomàs Balbey se erige como un punto clave para conocer la historia del pueblo, ofreciendo exposiciones, talleres y charlas que conectan a los visitantes con su patrimonio histórico.
Qué comer
La riqueza de Cardedeu también reside en su entorno natural, enmarcado por el macizo del Montseny al norte y la cordillera del Montegre-Corredor al sur. Su casco urbano está rodeado de campos y bosques, ofreciendo un sinfín de rutas para disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza. A eso se le suma su riqueza gastronómica.
Organizada por la Asociación de Vecinos del Centro Vila con el apoyo y colaboración del Ayuntamiento de Cardedeu, cada año se celebra la Feria de Navidad y del Turrón artesano. Pero si hay un postre de la zona que destaca son los borregos, una especialidad de repostería tradicional de Cardedeu. A pesar de que se han hecho a muchos lugares, la fabricación de borregos de anís es una especialidad exclusiva de las panaderías y las pastelerías de Cardedeu, y goza hoy de la marca registrada como producto artesano de calidad.
Cómo llegar
Para llegar a Cardedeu desde Barcelona, se debe tomar la autopista AP-7 en dirección a Girona. Esta vía rápida ofrece un trayecto cómodo y directo de aproximadamente 35 kilómetros, que se puede recorrer en unos 30 minutos, dependiendo del tráfico. Tras unos 20 minutos de viaje, se toma la salida 12 hacia Cardedeu. Desde aquí, se sigue por la carretera C-251 hasta llegar al centro del pueblo.
Desde Girona, el acceso a Cardedeu también es sencillo. Se toma la autopista AP-7 en dirección a Barcelona y, tras recorrer unos 55 kilómetros, se toma la salida 12 hacia Cardedeu. El trayecto desde Girona dura alrededor de 45 minutos.