Custodia de los hijos en la separación de parejas sin estar casadas: ¿cuáles son las condiciones y circunstancias en España en 2024?
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La custodia de los hijos en casos de separación de parejas sin estar casadas es una cuestión que suscita muchas dudas. Aunque las parejas no hayan formalizado su relación mediante el matrimonio, ello no exime de obligaciones legales respecto a los hijos comunes. El Derecho de Familia en España regula estas situaciones a través de principios del interés superior del menor, recogido en el Código Civil español y otras normativas relacionadas. En este artículo abordamos en profundidad las circunstancias y condiciones que determinan la custodia de los hijos cuando los progenitores no están casados.
El principio del interés superior del menor
El concepto clave que guía cualquier decisión sobre custodia en España es el interés superior del menor, recogido en el artículo 92 del Código Civil y en tratados internacionales ratificados por España, como la Convención sobre los Derechos del Niño. Este principio establece que cualquier medida relativa a la custodia debe garantizar el bienestar físico, emocional y social del menor.
Esto implica que, aunque los progenitores no estén casados, sus derechos y obligaciones como padres son iguales y están subordinados a las necesidades del menor. La custodia no se asigna automáticamente a uno de los progenitores, sino que se analiza cada caso concreto.
Situaciones habituales en la separación de parejas sin estar casadas
1. Acuerdo mutuo entre los progenitores
- Si ambos padres llegan a un acuerdo sobre la custodia y el régimen de visitas, pueden formalizarlo mediante un convenio regulador. Este documento debe ser aprobado por un juez para garantizar que protege los derechos del menor.
- El convenio puede incluir aspectos como la custodia compartida, la pensión de alimentos, el uso de la vivienda familiar y otros temas relacionados con el bienestar del menor.
Javier Márquez, abogado familiar del despacho de Saverio Abogados en Madrid, recomienda: "Siempre que sea posible, los progenitores deberían esforzarse por alcanzar un acuerdo mutuo. Esto no solo ahorra tiempo y costes legales, sino que también evita tensiones innecesarias que puedan afectar al menor".
2. Ausencia de acuerdo: intervención judicial
Si no hay consenso, cualquiera de los progenitores puede solicitar la intervención del juzgado de familia. En estos casos, el juez evalúa una serie de factores antes de decidir:
- La relación del menor con cada progenitor.
- La disponibilidad de cada progenitor para atender al menor.
- La situación laboral y económica de los padres.
- La estabilidad emocional que cada progenitor pueda ofrecer.
- La opinión del menor, si tiene suficiente madurez (generalmente a partir de los 12 años).
Tipos de custodia en España
En España, existen diferentes modalidades de custodia que pueden establecerse:
1. Custodia compartida
- Regulada en el artículo 92 del Código Civil, la custodia compartida es la opción preferente siempre que sea viable y beneficie al menor. Supone que ambos progenitores comparten de forma equilibrada la convivencia y responsabilidades sobre el hijo.
- Para otorgar este régimen, el juez debe comprobar que ambos progenitores tienen capacidad para cooperar y que no existe conflicto grave entre ellos.
Según Javier, "la custodia compartida es ideal en situaciones donde ambos progenitores pueden mantener una comunicación fluida y priorizar el bienestar del menor sobre sus diferencias personales".
2. Custodia monoparental
En caso de que la custodia compartida no sea posible o adecuada, se puede otorgar la custodia a uno de los progenitores (custodia exclusiva). El otro progenitor tendrá derecho a un régimen de visitas y deberá contribuir al mantenimiento del menor mediante una pensión alimenticia.
Pensión de alimentos
El artículo 93 del Código Civil establece que ambos progenitores tienen la obligación de contribuir al sostenimiento de sus hijos, independientemente de la custodia asignada. La cuantía de la pensión de alimentos se calcula teniendo en cuenta factores como:
- Los ingresos de ambos progenitores.
- Las necesidades del menor (educación, sanidad, alimentación, ocio, etc.).
- La situación económica del progenitor que debe abonar la pensión.
Uso de la vivienda familiar
En caso de que los progenitores compartieran una vivienda antes de la separación, el artículo 96 del Código Civil regula el uso del domicilio familiar. Por lo general, se otorga al progenitor que ostente la custodia de los hijos, con el objetivo de no desestabilizar al menor.
Importancia de los informes psicosociales
En los casos donde no hay acuerdo, el juez puede solicitar un informe de los equipos psicosociales adscritos a los juzgados. Estos informes analizan las circunstancias familiares, la relación entre los progenitores y el menor, y ofrecen recomendaciones sobre el régimen de custodia más adecuado.
Recomendaciones finales
Para las parejas sin estar casadas que enfrentan una separación, es fundamental priorizar el bienestar del menor y buscar soluciones consensuadas siempre que sea posible. En caso de conflicto, contar con la orientación de un abogado de Derecho de Familia es crucial para garantizar que se respeten los derechos del menor y de ambos progenitores.
Javier Márquez concluye: "Cada familia es única, y el marco legal español está diseñado para ofrecer soluciones personalizadas. La clave está en mantener siempre como prioridad el interés del menor, buscando acuerdos o recurriendo a la vía judicial cuando sea necesario".
El marco legal español, a través del Código Civil y la jurisprudencia de los tribunales, ofrece herramientas para resolver estas situaciones de forma equitativa, siempre bajo el principio rector del interés superior del menor. Si tienes dudas o necesitas asesoramiento, no dudes en consultar con un profesional.
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