Un día después de las advertencias de Junts al Gobierno de Pedro Sánchez, el partido de Carles Puigdemont aparece en la foto con el PP de Núñez Feijóo. La geometría variable del Congreso de los Diputados es una pista de autos de choque donde operan las más extrañas alianzas.
Al Gobierno le preocupa lo justo, es decir nada, la remotísima posibilidad de que Junts articule una moción de censura con PP y Vox. En cambio, el día a día es un camino plagado de espinas por la propensión de "juntaires" y "populares" a entorpecer las iniciativas fiscales del Ejecutivo.
En el PP creen que reconstruir las relaciones con Junts, a quien toman por la vieja Convergència, es un paso imprescindible para acceder al poder. En esos cálculos no cabe esa tendencia manifiesta de los de Puigdemont por echarse al monte.
La política nacional queda condicionada por los vaivenes de Junts y por los intentos del Gobierno de satisfacer a tirios y troyanos. Pero en el caso del impuesto a las energéticas hay que elegir. Resulta imposible soplar o sorber.
"La alianza de Junts y el PP con el pacto eléctrico amenaza el apoyo de Podemos a Sánchez", destaca un titular de Vozpópuli.
En el sumario se indica que la pretensión de los independentistas y el PP es la retirada del impuesto mientras que Podemos exige todo lo contrario para mantener su apoyo al Gobierno.
El texto es de Joan Guirado, quien escribe que "Pedro Sánchez está probando su propia medicina respecto a la geometría variable con la que logró su investidura. Las promesas incompatibles que ha hecho a unos y a otros para seguir en el poder, a los socios a su izquierda y a los socios a su derecha, empiezan a provocarle quebraderos de cabeza al presidente del Gobierno. Pues lo que quiere Junts es contrario a lo que exige Podemos".
Sigue Guirado: "Tras una negociación frenética y maratoniana en la última comisión de Hacienda, que se saldó con dos acuerdos 'in extremis' incompatibles entre sí, que obligó al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero a interceder de madrugada con Carles Puigdemont, la cuestión del impuesto a las eléctricas vuelve a poner en aprietos al Ejecutivo de coalición".
Y: "La nueva alianza entre uno de sus socios, Junts, con el principal partido de la oposición, el PP, de cara a suspender el impuesto sobre el valor de la producción eléctrica, ha roto los esquemas de Moncloa. Los de Carles Puigdemont, que han empezado a enseñar las pezuñas a Sánchez, pretenden mandar un aviso al PSOE pactando con Génova una enmienda a una ley que se tramita en Congreso para suspender el impuesto".
Líneas después la información aborda la estrategia de los morados: "Podemos, que pese a tener únicamente cuatro diputados, hace imprescindibles sus votos para cualquier votación del Gobierno, ya han advertido a Sánchez que no van a permitir cualquier paso atrás en lo que refiere a los impuestos al sector eléctrico. La formación morada ha denunciado una falta de "voluntad real" por parte del PSOE y Sumar para hacer permanente este tributo".
Y: "Por ahora, como ocurrió en primera instancia con la comisión de Hacienda que se tuvo que aplazar en dos ocasiones, los dos partidos que forman el Ejecutivo han optado por aplazar la reunión que se iba a celebrar este martes por la tarde y en la que PP y Junts podían suspender dicho impuesto".
Más inconvenientes para el Gobierno. "El frente PP-Junts en el impuesto eléctrico se puede ampliar contra los tributos a Sociedades y Banca", reza un titular de El Independiente.
La pieza viene con la firma de Cristina de la Hoz: ""Lo extraño no es que Junts coincida con el PP en materia económica, lo raro es que lo haga con Podemos". Así resumen en el cuartel general de los populares el acuerdo suscrito con el partido de Carles Puigdemont para suspender el impuesto del 7 por ciento sobre el valor de la producción eléctrica, siempre y cuando no haya déficit de tarifa, y otra medida para favorecer la continuidad de la industria de cogeneración".
Continúa la nota: "Un pacto que acabaron asumiendo Vox, PNV y ERC. Tanto le pilló al Gobierno con el pie cambiado que decidieron dar una patada a la mesa y aplazar sin fecha la comisión de Transición Ecológica, prevista para este jueves. Se trata de ganar tiempo para convencer a ERC, principalmente, de que emita un voto particular que permita volver al redactado inicial".
Líneas después De la Hoz anticipa que "el sobresalto de este martes podría reproducirse de nuevo, esta vez en el Senado. Este miércoles se reúne en la Cámara Alta, primero la ponencia y después la comisión de Hacienda, donde se verá el bloque de enmiendas presentado por los populares, en el que proponen, entre otras cosas, modificaciones al impuesto a la Banca y rebajas al impuesto de Sociedades con correcciones sobre la base imponible y el tipo, que la propia Junts había enmendando en el Congreso".
Y: "El PP admite que elaboró sus propuestas "sin previa negociación con ningún otro Grupo parlamentario", a sabiendas de que iban a prosperar gracias a su mayoría absoluta, para ser posteriormente derrotadas en el Congreso. Pero, precisamente, tras lo acontecido el pasado lunes con el impuesto eléctrico, todos los ojos están puestos en si Junts se sumará a alguna de las propuestas del primer partido de la oposición y si mantendrá ese apoyo cuando la ley llegue enmendada a la Cámara Baja".
Frente a quienes aprecian posible una alianza estable entre populares y posconverentes, De la Hoz señala que "desde Génova tampoco se hacen muchas ilusiones. Creen que más que un frente común PP-Junts ven "una coincidencia programática o ideológica" puntual recordando cómo "hemos coincidido otras veces" en el Parlamento. Incluso bromean al afirmar, en conversación con El Independiente, que "hay días en los que los de Junts se levantan y no se sienten progresistas" en réplica al "Gobierno progresista" del que habla siempre, como un mantra, Pedro Sánchez".
Más noticias políticas. "El Congreso tumbará la petición de Junts para someter a Sánchez a una cuestión de confianza", advierte El Nacional.
Escribe Abel Degà: "Todo apunta, ahora mismo, a que no habrá una cuestión de confianza, porque no solo el líder socialista lo ha descartado; también fuentes parlamentarias dan por hecho que el texto registrado no prosperará en la Mesa de la cámara y ya adelantan que los letrados vetarán la iniciativa por tratarse de una 'cuestión de confianza encubierta'".
Sigue el texto: "Así lo ven fuentes del grupo parlamentario del PSOE y del equipo de Francina Armengol —presidenta de la institución— consultadas por este periódico. Se escudan en un precedente de 2013: cuando el PSOE registró una moción para desgastar a Mariano Rajoy por los casos de corrupción que asediaban al PP, y entonces los letrados lo tumbaron por tratarse de una moción de censura encubierta".
Un par de párrafos más adelante Degà señala que "24 horas después de que Carles Puigdemont instara a Pedro Sánchez a someterse a una cuestión de confianza, la Moncloa aseguraba que "no hay ninguna preocupación" sobre esta cuestión. El presidente del Gobierno mantiene su rechazo a presentarla y las fuentes del ejecutivo español consultadas por ElNacional.cat aseveran que no se contempla ninguna alternativa a no aceptar la exigencia del president de la Generalitat en el exilio (sic)".
En El Mundo, por su parte, aluden a una "gran batalla" por el control y la gestión de las fronteras entre Puigdemont y el Gobierno. Se dice que Junts quiere ya la pieza del traspaso de la inmigración.
La información viene con tres firmas, la de Víctor Mondelo, Gema Peñalosa y Raúl Piña: "Tras el ultimátum de Carles Puigdemont, Junts quiere empezar a cobrar su botín con el traspaso «integral» de la política migratoria, a poder ser antes de finalizar el año. Es el acuerdo que considera más plausible y en el que más avances se han producido con el Gobierno".
Sigue el texto: "Sin embargo, la ambición de la formación dirigida por el fugado está dificultando cerrar el pacto, dado que el líder de los neoconvergentes aspira a incluir en la transferencia dos cuestiones de calado: el control fronterizo a través de los Mossos d'Esquadra y la capacidad de «resolver» los trámites migratorios, es decir, de tener la última palabra sobre los permisos de residencia de los extranjeros que lleguen a Cataluña".
Y: "Así lo aclaró el martes el secretario general de Junts, Jordi Turull, quien precisó que persiguen que los Mossos actúen en el control fronterizo como «policía nacional de Cataluña». «No es el tema donde estamos más encallados [con el Gobierno]. Estamos negociando qué puede hacer y qué no la Policía de Cataluña», reveló Turull al ser preguntado explícitamente por la cesión.
Más adelante, la información indica que "«Todo está muy bien orientado, pero al señor Marlaska no le deben haber explicado el acuerdo de inmigración», protestó el dirigente nacionalista para señalar al ministro del Interior como principal obstáculo en la negociación".
Ahora, la versión de "Madrid": "Desde el Ministerio del Interior aseguraron a este diario que no se transferirá a la Generalitat de Cataluña competencias de control de la inmigración y recordaron que este argumento ha sido una constante en Fernando Grande-Marlaska cada vez que se ha puesto en duda este extremo. «No es que lo diga el ministro. Lo dice la ley», zanjaron".
Y: "«Las competencias de control de fronteras y de inmigración son una competencia exclusiva del Estado y del Gobierno, y no son susceptibles de ser transferidas», insistieron. Por último, Interior evitó hacer referencias a posibles delegaciones en este campo".
En cuanto a la guerra en ERC, "Junqueras ofrece la presidencia del Consejo Nacional de ERC a Helena Solà, de Foc Nou", anuncia El Món.
El texto es de Quico Sallés, que escribe que "esta es una de las propuestas que Militància Decidim ha hecho a Foc Nou en las «conversaciones» que han mantenido hasta ahora. De hecho, desde los junqueristas aseguran que ha habido «afinidad» entre los dos movimientos en unas conversaciones con ofrecimientos «claros y concisos» que no dan margen a «falsas expectativas»".
No es la única promesa, pero sí la más firme, según el relato de Sallés, que en las entrañas de la crónica escribe que ante los deseos de Foc Nou de revisar los pactos con los socialistas "desde el entorno de Junqueras responden a Foc Nou que aplicarán la «fuerza democrática» que les den los escaños del partido «en beneficio de la soberanía y el reconocimiento nacional y del derecho a decidir mediante un referéndum vinculante de independencia»".
Más noticias. "Barcelona contará con una de las siete fábricas de inteligencia artificial de Europa", certifica El País, que amplía el contenido en el sumario: "El proyecto, elegido por la Comisión Europea, será liderado por el Barcelona Supercomputing Center".
Escribe Sergi Llanas: "Barcelona es una de las siete ciudades elegidas para alojar una fábrica de inteligencia artificial. El Gobierno de España y la Generalitat de Catalunya han acordado impulsar la creación de esta AI Factory en Barcelona, un novedoso proyecto de fábrica de inteligencia artificial, que será liderada por el Barcelona Supercomputing Center, con el objetivo de posicionarse como referente en Europa".
Sigue el texto: "La Comisión Europea ha anunciado este martes la aprobación del proyecto AI Factory, que comenzará en 2025 con el objetivo de estar plenamente operativo a finales de ese mismo año. El Gobierno invertirá 61,76 millones de euros, a través del Ministerio de Transformación Digital y el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, y la Generalitat, 14 millones de euros".
Y: "A estas cifras se suma la aportación de 98,33 millones de euros de la Comisión por medio de la red europea de supercomputadores de alto rendimiento, que canaliza la iniciativa de las IA Factories. “Hoy es un día histórico. Este proyecto refuerza nuestra posición como Gobierno que apuesta por las tecnologías disruptivas. Más que una infraestructura, es toda una declaración de intenciones de liderar esta nueva era de la IA de forma sostenible y ética”, ha asegurado Núria Montserrat, consejera de Investigación y Universidades de la Generalitat".
11 de diciembre, santoral: Dámaso I papa, Daniel estilita y Victorico.