"Soluciones personales". Desde que las urnas del 23 de julio concedieron al independentismo la oportunidad de condicionar la configuración del Gobierno a pesar de haber obtenido unos resultados entre malos y peores, el expresidente de la Generalitat que huyó de España tras el 1-O y proclamar una república de ocho segundos, Carles Puigdemont, no deja de decir que no busca "soluciones personales", que su caso no importa, que está dispuesto a sacrificarse en el altar de la Cataluña grande y libre en aras de la superación del "conflicto" con la malévola España malaje. Al final, tanta insistencia resulta un tanto sospechosa. Y más cuando según las crónicas de la mayoría de los medios, Junts per Catalunya (JxCat) no habla de autodeterminación y sí de amnistía.
Sea como fuere, el expresidente acudió ayer a la cita de la Universitat Catalana d'Estiu, que había convocado al presidente Pere Aragonès y a los expresidentes de la Generalitat a un homenaje a Pau Casals con ocasión del cincuenta aniversario de la muerte del músico. Emotivo cónclave que permitió constatar que Jordi Pujol se ha recuperado por completo de la afasia, que al público independentista de piedra picada no le cae bien el presidente Montilla y que Puigdemont sigue siendo el héroe de las bases. Remedo de unidad secesionista con un Aragonès que trató de no quedar eclipsado entre los dinosaurios con un discurso de rompe y rasga, más contundente que el de ningún otro de los intervinientes, Pujol aparte.
A Pujol se le vio en forma mental, exhibiendo sus tradicionales obsesiones, lengua e identidad. Y hablando claro, sobre todo cuando dijo que el país tiene la obligación de acoger a "negros, asiáticos y sudamericanos", pero más obligación aún tiene de mantener la identidad. Al margen de la agenda de la Universitat Catalana, Quico Sallés explica en El Món que Puigdemont y Aragonès mantuvieron una reunión a solas. "Cumbre discreta de Puigdemont y Aragonés en plena negociación por la amnistía", apunta el titular del referido medio. Del texto de Sallés: "Día de un acto político y simbólico, pero también de un discretísimo encuentro entre los presidentes Pere Aragonès y Carles Puigdemont, en un hotel de Prada, en Conflent. Una reunión que se ha celebrado casi secretamente y utilizando una puerta escondida en el jardín del establecimiento por no despertar sospechas. En concreto, el hotel Castell Rose, un bucólico establecimiento justo en la entrada sur del municipio y a escasos cinco minutos en coche del monasterio de San Miquel de Cuixà, donde hoy (por ayer lunes) han coincidido en un histórico homenaje a Pau Casals, en el marco de la 55.ª edición de la Universidad Catalana de Verano (UCE)".
Sigue la pieza: "El encuentro se ha celebrado después de una comida «distendida» en el restaurante Nogueroles de Codalet. Una comida en la cual han participado los cinco presidentes de la Generalitat que han concelebrado el homenaje a Casals –Jordi Pujol, José Montilla, Carles Puigdemont, Quim Torra i Pere Aragonès-. Una comida donde «se ha hecho política a través de la historia, y donde el presidente Pujol, cuando ha cogido la palabra, casi no la ha dejado. En la comida también estaban presentes los acompañantes de las autoridades, escoltas, el rectorado de la UCE, el delegado de la Generalitat en la Cataluña Norte, Alfons Quera, y los abogados Gonzalo Boye y Isabel Elbal, así como el abad de Montserrat, Manuel Gasch. Una vez ha acabada la comida, los presidentes Pujol, Montilla y Torra se han marchado por separado y con sus equipos, pero Aragonés y Puigdemont han salido a la vez y, de manera rápida. A partir de aquí ha empezado un despliegue para que los dos pudieran celebrar el encuentro con intimidad. (...) Los escoltas se han mantenido en los jardines del Hotel vigilando el perímetro de curiosos y miembros del equipo presidencial se paseaban por el albergue asegurando que querían visitar el centro. Desde la otra banda, los facilitadores del encuentro se camuflaban haciendo ver que estaban trabajando por la zona mientras vigilaban que no se acercaran curiosos. El Hotel tiene tres habitaciones reservadas a personas relacionadas con el activismo cultural de los Países Catalanes que habrían hecho la cobertura de la cumbre. Un encuentro que ninguna de las dos partes quiere confirmar expresamente con el argumento que «nunca comentan la agenda privada de los presidentes». La reunión se ha alargado casi una hora. Los dos presidentes han abandonado las instalaciones por separado y todavía con más discreción".
El independentismo respira aliviado. El pérfido Pablo Llarena no ha reactivado la euroorden. En los medios de corte nacionalista se especuló durante días sobre la posibilidad de que el magistrado aprovechara el desplazamiento de Puigdemont para proceder a su detención. De nada servía que el juez hubiera dicho que se esperará a que se resuelva definitivamente el contencioso sobre la inmunidad del expresidente para adoptar una decisión.
Arrancábamos con el asunto de las "soluciones personales" y esa es la cuestión de fondo de la crónica de Marc Rovira en El País. "Puigdemont asegura que no busca “salidas personales” y llama a “pensar en el país” en la negociación para la investidura", se titula la crónica que firma el periodista y que arranca así: "El expresidente catalán Carles Puigdemont, huido de la justicia tras la organización del referéndum del 1 de octubre de 2017, se ha desplazado este lunes a la localidad de Prada de Conflent, sur de Francia, para participar en un acto de homenaje al músico Pau Casals. La visita planteaba incertidumbres porque se trataba del primer viaje lejos de Bélgica del expresident desde que, a principios de julio, el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) resolvió retirarle la inmunidad como eurodiputado. Pero el Tribunal Supremo aún no ha dictado una euroorden de arresto —porque la decisión del TGUE puede ser recurrida y el Supremo está a la espera de la decisión final— y por tanto Puigdemont, que se ha reservado un papel clave en el equipo de Junts que negocia el apoyo a la investidura de Pedro Sánchez, se ha ido de Prada con la misma parsimonia con la que llegó".
Continúa Rovira: "La cita ha reunido en una misma fotografía a Puigdemont, Pere Aragonès, Quim Torra, José Montilla y Jordi Pujol. Pese a la nutrida representación de expresidentes de la Generalitat —Artur Mas se ha excusado alegando que estaba de viaje—, Puigdemont ha acaparado la atención y, en varias ocasiones, el público que ha asistido al acto ha lanzado cánticos de “Puigdemont, el nostre president” (Puigdemont, nuestro presidente). Los mismos vítores se han escuchado en el momento de poner a todos los presidentes de lado para tomar la foto de grupo. Puigdemont se ha sentado al lado del socialista José Montilla y de Quim Torra. En un extremo del banco estaba Pere Aragonès. Tras el homenaje, Aragonès y los cuatro expresidents han compartido una comida durante dos horas “muy distendida y cordial”, según fuentes del Govern. Luego, Aragonès y Puigdemont se reunieron a parte para abordar en privado temas políticos, según avanzó el digital El Món".
Y: "El acto de homenaje se ha celebrado en el pequeño monasterio de Sant Miquel de Cuixà, bajo una temperatura sofocante. Puigdemont ha llegado a Prada a bordo de un vehículo oscuro con matrícula española. Iba acompañado de su esposa, Marcela Topor. Puigdemont, que no ha atendido a ninguna pregunta de la prensa, ha salpicado su intervención de reivindicaciones, incluso buscando paralelismos con el homenajeado: “Pau Casals defendió la nación de Cataluña de una manera inequívoca, expresada sin complejos”, ha dicho. Ha destacado algunos rasgos de la vida del músico, como su discurso en las Naciones Unidas en 1971, donde se definió como “catalán”, o la decisión de presentarse artísticamente como Pau, en detrimento de Pablo. “Lo hizo para señalar que desde el decreto de Nueva Planta hay un conflicto por resolver [...] Casals no buscaba una salida personal para él, sino para el país, y tenemos el deber de hacer lo mismo”, ha indicado. Desde que está instalado en Bélgica, Puigdemont ha insistido en varias ocasiones que el desafío que plantea al Estado no pasa por encontrar “una solución personal”, sino que dice perseguir objetivos más ambiciosos. El mismo argumentario esgrime Junts ahora en la negociación con la coalición progresista para acordar la investidura de Pedro Sánchez. Las exigencias de una amnistía, dice el entorno de Puigdemont, sobrepasan la situación de huido de la justicia que afecta al expresident, y pivotan sobre la necesidad de dar respuesta a todos los afectados que tienen causas judiciales relacionadas con el procés".
A todos los afectados y sobre todo, a los que están pendientes del juicio en el Tribunal de Cuentas por el desvío de fondos para el 1-O y la proyección internacional del "Procés". Al respecto, la entidad constitucionalista Sociedad Civil Catalana dijo ayer que no piensa rebajar ni un ápice su petición en calidad de acusación popular por mucho que la fiscalía del Tribunal de Cuentas pueda desistir de la exigencia de responsabilidades económicas. Eso aliviaría particularmente a Artur Mas, muy preocupado por su hacienda, como es lógico.
Mientras tanto y en Madrid, el Rey Felipe VI empezó ayer la ronda de contactos con los grupos parlamentarios para decidir a quien encarga que se presente a la investidura. En Vozpópuli comentan al respecto que "El difícil encaje legal de la amnistía fuerza a Sánchez a dar paso a la investidura de Feijóo: “Nos interesa ir despacio”". El texto es de Javier Portillo: "Un cambio de guion. El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha decidido modificar por completo su estrategia respecto a su posible investidura. Hasta este lunes, tanto Moncloa como Ferraz pregonaban lo absurdo de que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, decidiera postularse ante el Rey como candidato para ser elegido por las Cortes, puesto que no tenía los números suficientes. Ahora, el PSOE vira, fundamentalmente, por el difícil encaje legal de la amnistía para los condenados y procesados del procés que exigen las fuerzas independentistas catalanas (ERC y Junts). Ferraz y Moncloa necesitan tiempo y, de paso, quieren "quemar definitivamente a Feijóo", como explican fuentes que conocen bien al presidente".
Sigue la nota: ""En esta ocasión, nos interesa ir despacio y que los españoles vayan viendo la serie capítulo a capítulo. Sin atajos", explica a este diario un destacado dirigente socialista. Fuentes oficiales del partido aclaran: "Nosotros ni presionamos al jefe del Estado como ellos [en referencia al PP], ni estamos en ninguna competición. Respeto a la decisión del Rey... si Feijóo quiere seguir reincidiendo en su fracaso del 23-J, allá él. Formaremos un gobierno de progreso para España". Pero esto no deja de ser un parón para atar todo lo que el independentismo está pidiendo para dar luz verde a la investidura. El entorno de Sánchez, citado por El País, admitía que el presidente en funciones tendrá que buscar un alivio penal al procés que, en plata, implica que tanto Puigdemont como Marta Rovira, secretaria general de ERC, -ambos huidos- y otras tantas decenas de encausados pendientes de juicio no sigan sufriendo 'represión judicial'".
En la misma línea apunta una información de El Independiente. "La jugada de Sánchez: investidura fallida de Feijóo y dos meses para cerrar un acuerdo con Junts". Escribe Juanma Romero: "Llega la hora del Rey. Él es quien tiene que decidir a quién designa como candidato a la investidura. A Alberto Núñez Feijóo, el ganador de las elecciones del 23 de julio, aunque sin opciones de alcanzar la Moncloa, o a Pedro Sánchez, el segundo más votado pero el único que, por ahora, puede tejer un acuerdo a muchas bandas que le permita revalidar su cargo de presidente del Gobierno. Pero en las últimas horas el camino se ha simplificado parcialmente para el jefe del Estado, porque el líder socialista promete no "darse codazos" con su oponente para ir antes a la investidura. Ni entrar en una "competición" con él. Esto es, Sánchez deja vía libre a Feijóo para que se someta él primero al escrutinio del Congreso. También para que se certifique por tercera vez su "fracaso". Pero al acudir antes a la Cámara, será él —aunque no solo— el que fije el calendario, ya que desde la primera votación fallida de investidura se empezará a poner el contador en marcha y quedarán dos meses únicamente para poder conformar un nuevo Gobierno. De lo contrario, España caminará a unas segundas generales, que como pronto tendrían lugar el domingo 17 de diciembre".
Líneas después, Romero escribe: ""No estamos en una competición con el PP para ver quién va primero a la investidura —incidían fuentes de la sede federal del partido—. Lo que decida el jefe del Estado siempre estará bien. No vamos a darnos codazos con Feijóo. Si él necesita de un tercer tropiezo para darse cuenta de la realidad que le rodea, no seremos nosotros los que le quitemos esa idea. Tuvo el 23-J, la constitución de la Mesa del Congreso… parece que necesita más información, y si tiene que ser una investidura fake, allá él". "Lo que diga el Rey, y si Feijóo quiere hacer el ridículo, que lo haga", abunda otro alto mando del círculo más estrecho del presidente en funciones".Entre tanto, El Mundo recupera el tema de los agentes infiltrados en el movimiento independentista con este titular: "Interior evita investigar la difusión de la identidad de cuatro agentes infiltrados en el independentismo". El texto viene con la firma de Fernando Lázaro: "La pasividad con la que tanto el Ministerio del Interior como la Dirección General de la Policía han recibido en los últimos meses las informaciones sobre agentes infiltrados ha despertado especulaciones de todo tipo. Es difícil asimilar para los operativos de la Policía Nacional que desde el mundo radical independentista en Cataluña se haya desvelado la identidad de cuatro agentes encubiertos y no hayan saltado las alarmas. Fuentes policiales consultadas por este periódico muestran su enorme sorpresa y malestar por la forma en que se ha acogido la publicación de las identidades de los agentes, a los que se da por quemados en Cataluña para poder volver a las calles".
Continúa la información: "Como recuerdan, en el último año, a través de un único medio de comunicación de Cataluña (con delegación también en Valencia), se ha desvelado la identidad de cuatro agentes de la Policía Nacional, que estaban infiltrados en los grupos radicales de Cataluña, cercanos a los movimientos rupturistas. «¿Cómo puede ser que se desvele la identidad de agentes encubiertos, que trabajan con la cobertura de una autoridad judicial, y no se ponga en marcha un mecanismo urgente para saber de dónde sale la filtración y frenar esta sangría?», se preguntan sorprendidos mandos de la Policía Judicial. Son cuatro los infiltrados destapados: tres en Cataluña y una cuarta, en Valencia. Fue en junio del pasado año cuando se produjo la primera filtración. El semanario La Directa denunció que un agente, que se presentó con el nombre de Marc Hernández Pon, se introdujo durante más de dos años en las estructuras de los movimientos soberanistas y de los sindicatos de vivienda. Tras desvelarse su identidad, Òmnium Cultural y dos de las entidades infiltradas, Jovent Republicà y el Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans, activaron una investigación judicial que finalmente acabó archivada por la Audiencia Nacional".
Buenas noticias para terminar. "La mejor biblioteca del mundo está en Barcelona", informa Metrópoli Abierta. Escribe Alba Carnicé: "La biblioteca Gabriel García Márquez (BGGM) ya es la mejor del mundo, según la Federación Internacional de Asociaciones e Instituciones Bibliotecarias (IFLA). El ganador se ha anunciado este lunes en el 88 Congreso Mundial de Bibliotecas e Información, que este año se celebra en Rotterdam (Países Bajos). Entre las finalistas estaban la Public Library Janez Vajkard Valvasor Krškov (Eslovenia), la City of Parramatta Library (Australia) y la Shangai Library East (China). Inaugurada en mayo de 2022 en el barrio de la Verneda i La Pau, en el distrito de Sant Martí, la BGGM es un espectacular edificio de seis plantas con una estructura de madera vista de casi 4.000 metros cuadrados, una gran "casa" que parece colgada y semi oculta entre los altos plataneros que la rodean y que invitan a cruzar el umbral. El interior sorprende aún más, por su luz, su estructura, con un patio abierto al que se asoman las plantas como si fueran balcones, una especie de corrala del que cuelgan los espacios abiertos y otros cubículos que permiten crear intimidad a base de cortinas de gasa que cuelgan del techo o de mamparas, todo lleno de recovecos que descubrir".
En cuanto a la materia prima, la biblioteca está especializada en literatura hispanoamericana.
22 de agosto, santoral: Santa María Reina, Fabricio de Toledo, Felipe Benizio, Filiberto de Toledo, Juan Kemble, Juan Wall, Simfoniano y Timoteo de Roma.