Pelotazos del pelotero Piqué y Pegasus

La de comisionista es una profesión con pasado y con futuro, una especialidad de la vida y del arte de la saca, alta precisión en el desempeño extractivo. De aquí a nada los niños dirán que de mayores quieren ser comisionistas. Más raro sonaba lo de "streamers" y ahí están. El futbolista Piqué y el aristócrata Luis Medina son, por ejemplo, avezados profesionales de la materia. Y ni se arrepienten ni muestran la más mínima duda sobre la probidad de sus comportamientos. Es más, sacan pecho. He ahí el noi de la Bonanova, que no ve conflicto de interés alguno en cobrar comisión por trasladar la Supercopa de la Recopa a Arabia Saudí para disfrute de los jeques. "Así funciona el negocio", dijo el joven en el canal Twicht, que es donde deponen los "influencers" de la vida para mostrar su rechazo a los medios más o menos convencionales. 

Y si Piqué no ve problema alguno con su comisión en petroeuros, menos aún el gallardo Medina, convencido de que el Ayuntamiento le tendría que poner una medalla por su contribución a la salud pública. En lo que coinciden ambos es en que tampoco se llevaron tanto, un 10% más o menos, nada para como está el mercado, apunta el defensa central. A este paso, los Pujol van a quedar como los primos menos listos del 3%. A Piqué, además, lo que le parece delito es que se hayan desvelado los audios de sus dicharacheras conversaciones con el presidente de la federación española, el exfutbolista del Levante Rubiales. 

En El Confidencial, diario que destapó el caso, avanzan nuevos detalles sobre las andanzas de estos dos peloteros, que picaban alto, muy alto. "Piqué pidió recurrir a Juan Carlos I para firmar con Arabia: 'Nos ayudaría seguro'", titula el referido digital. El texto es de José María Olmo: "Gerard Piqué y Luis Rubiales desplegaron todos los contactos que tenían a su alcance para sellar el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí y llevarse a cambio grandes subidas salariales y una comisión de hasta 24 millones de euros. El jugador del FC Barcelona y el presidente de la RFEF pactaron incluso recurrir a Juan Carlos I para que les ayudara a firmar el contrato con el régimen saudí. Así consta en grabaciones y mensajes de WhatsApp intercambiados por Piqué y Rubiales en plenas negociaciones para la venta del torneo".

Hombre, el emérito, señalado en Suiza (sí, el país del secreto bancario...) por el cobro de comisiones saudíes. Debió ser aquella la época en la que Piqué empezó a mostrar sus simpatías por los amigos españoles. Convencido de que el escándalo no arribará a los juzgados, Piqué salió a dar la cara anoche después de la derrota del Barça ante el Cádiz en el Frankfurt Stadium de Barcelona. "Todo es legal. No hay nada que ocultar. Me siento orgulloso", titula Vozpópuli. Y ahí va un extracto del texto: "A preguntas de los periodistas Piqué ha defendido su gestión y la comisión que iba a poder cobrar. "Un 10% es una comisión baja para cómo está el mercado". Piqué no ve ningún conflicto de intereses en participar en un torneo que él mismo promueve. Incluso ha mantenido una pequeña discusión con Juanma Castaño, presentador de El Partidazo de COPE, quien le ha reprochado que no es correcto desde el punto de vista moral que un jugador que participe en una competición deportiva, gestione dicha competición".

En Culemanía destacan estas declaraciones del futbolista: "No voy a pedir perdón porque me gusta y me lo paso bien y así voy a seguir", aseguró antes de remarcar que "estoy cero preocupado". "El presidente Rubiales ya lo ha denunciado a la Policía, no sé si hoy o ayer incluso, obviamente ha interpuesto acciones legales y estamos por la labor", expuso el central catalán. "Me he ganado muy bien la vida y podría estar toda mi vida tirado en un sofá sin hacer nada, pero a mi me gusta ser exitoso en todo lo que hago, quiero hacer las cosas bien y por eso fundé Kosmos"".

Sólo faltó que llamara "pringaos" a los periodistas. Del otro gran pelotazo conocido, el de Luis Medina y Alberto Luceño con las mascarillas que le endosaron al alcalde de Madrid, explica este martes Público que "Almeida avaló por carta al comisionista Luceño ante el Gobierno chino para que intermediara en el comercio de mascarillas". El texto es de Ana María Pascual: "Ya tiene el Alcalde a la firma (sic) la carta en inglés y español. Me pregunta su secre que a quién la dirigimos (¿a ti?)", le preguntó en un mail Elena Collado, la alta funcionaria del Ayuntamiento de Madrid que gestionó el contrato de las mascarillas, a Alberto Luceño, el 23 de marzo de 2020. "Sí, por favor hay que hacerla nominativa con los datos míos personales que te mandé", le respondió en otro correo electrónico el comisionista. (...) La carta a la que se refería el cruce de correos, que obra en el sumario, al que ha tenido acceso Público, era una recomendación, un aval, del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, sobre la profesionalidad de Alberto Luceño, intermediario de la empresa Leno, ante las autoridades chinas para que pudiera intermediar en la compra de material sanitario al comienzo de la pandemia".

Política. Sesenta independentistas pudieron ser espiados con un programa informático llamado Pegasus y que infecta los móviles interesados por el procedimiento de enviar mensajes de texto que activan el programa si el usuario clica sobre ellos. En El País titulan que "Los cuatro últimos presidentes de la Generalitat, espiados con Pegasus" mientras que en La Vanguardia señalan que "El espionaje al independentismo se extendió por cinco países de Europa". En el diario barcelonés firma la crónica Ignacio Orovio: "Más de 60 representantes o simpatizantes del independentismo catalán, o sus parejas o abogados o colaboradores, recibieron entre el 2017 y el 2020 --aunque hay un caso del 2015 y los puede haber posteriores-- un mensaje en sus móviles que era en realidad el anzuelo de los programas de espionaje Pegasus, creación de la empresa informática israelí NSO o, en una minoría, Candiru. El caso fue denunciado ayer en un extenso reportaje en la revista The New Yorker en el que se hace eco de una pormenorizada investigación de The Citizen Lab, un apéndice de la Universidad de Toronto (Canadá) especializado en tecnología, y tendrá con toda seguridad secuelas al menos en los cinco países europeos en los que se perpetró alguno de los casos de presunto espionaje: Alemania, Francia, Bélgica, Suiza y Portugal, además de España".

Sigue la nota: "De las 63 personas a las que se envió un mensaje trampa de Pegasus (con alguna actualización o con alguna supuesta información de su interés), 51 picaron, es decir, se infectaron, y el contenido de sus teléfonos móviles pudo ser monitorizado en remoto. Doce fueron precavidos y no lo hicieron. Cuatro personas fueron infectadas con Candiru (que debe su nombre al temible y diminuto pez amazónico que se introduce en el pene). Dos de ellas con ambos. Entre los afectados están tres presidentes o expresidentes de la Generalitat como Artur Mas, Joaquim Torra o Pere Aragonès pero no Carles Puigdemont; los también eurodiputados Diana Riba y Toni Comín; los presidentes o expresidentes de la ANC, Elisenda Paluzié, y Òmnium Cultural, como Jordi Cuixart (y su pareja, la periodista Txell Bonet), Marcel Mauri; o empresarios de la órbita independentista como David Madí y Xavier Vendrell. Aragonès fue atacado pero “no se puede determinar” si hubo una fecha de infección, dice The Citizen Lab".

O sea que a diferencia de El País, en La Vanguardia descartan a Puigdemont como espiado. El expediente ha causado un efecto positivo en el independentismo, que aparca sus diferencias para atacar al Estado. 

Nacional. "Feijóo remitirá un plan a Sánchez de gran coalición en la sombra" asegura en portada La Razón. El presidente gallego y del PP se ausentará este martes de la toma de posesión de Fernández Mañueco en Castilla y León para no coincidir con Abascal, de Vox. Del texto de Carmen Morodo: "Hoy Alberto Núñez Feijóo recibirá a sindicatos y empresarios en la sede nacional del PP. Mañana presidirá la reunión del Comité Ejecutivo del partido. Y, ejecutados estos trámites, el líder de la oposición remitirá al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, un documento de propuestas económicas que trasciende la idea de un plan temporal para hacer frente a la crisis inflacionaria agravada por la guerra de Ucrania. El alcance de las medidas del documento que ultiman en Génova suena a gran coalición en la sombra, encubierta, por supuesto, porque implícitamente no se menciona en ningún momento, pero el fondo obliga a una acción concertada entre los dos principales partidos a medio plazo".

Sigue Morodo: "La idea del consenso preside todo el documento que ha dirigido el nuevo responsable de economía, el consejero andaluz, Juan Bravo, y afecta a reformas estructurales que para poder ejecutarse deben estar por encima de los ciclos electorales".

La invasión de Ucrania. Día 54. Mariúpol resiste. La defensa de la ciudad perturba los planes imperiales de Putin. Así lo cuenta Alberto Rojas en El Mundo: "Como ya no distinguen el día de la noche, los últimos defensores de Mariupol se echan a dormir en turnos en los sótanos de la fábrica Azovstal, iluminados sólo por lámparas fabricadas con vainas de cañón, respetando una curiosa costumbre: en vez de tumbarse sobre la típica esterilla aislante de camping, similar a las usadas para el yoga, se tumban debajo de ella. "Es para que los drones rusos, que tienen cámaras termales, no capten el calor de nuestros cuerpos", cuenta una fuente militar ucraniana, que asegura que tanto la acería como algunas partes de la ciudad reducida a escombros, llena de víctimas civiles por los bombardeos de Moscú, siguen en manos ucranianas tras 52 días de asedio".

Continúa la crónica: "Nadie sabe con seguridad cuántos civiles quedan en la ciudad (el alcalde los cifra en 120.000) y cuántos militares defienden las bolsas de resistencia, tal vez unos cuantos cientos, situados en lugares estratégicos, ya con poca agua, racionando alimentos y robando la munición a los enemigos abatidos, entre los que están las mejores tropas con las que Moscú ha invadido Ucrania: los comandos rusos Spetsnaz, tropas Rogsvardia y los chechenos de Kadirov. Cada día que pasa sin conquistar Mariupol, el agujero del cinturón con el que Rusia quiere abrochar sus territorios ocupados en Crimea y el Donbás es una victoria para Ucrania y una humillación para la estrategia de Vladimir Putin. La guarnición de la ciudad, compuesta por marines ucranianos y los voluntarios del controvertido regimiento Azov, se ha atrincherado en la factoría y está comenzando a usar a sus heridos menos graves para las tareas de intendencia y logística. Las órdenes que tienen por parte de Volodimir Zelenski son resistir "hasta el último hombre"".

19 de abril, santoral: Expedito, León IX papa, Elfego, Geroldo, Jorge de Antioquía, Mapálico y Marta mártir.