Los medios de orientación madrileña reparan en el acuerdo entre socialistas y populares para renovar la composición de órganos tales como el Tribunal Constitucional, el Tribunal de Cuentas, el Defensor del Pueblo o la Agencia de Protección de Datos. No es poca cosa aunque haya quedado fuera del acuerdo el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), joya de la corona de la arquitectura institucional de España. En medio de una legislatura áspera y crispada, bronca y malencarada, las direcciones de los dos grandes partidos han atisbado en apariencia una oportunidad y la han cazado al vuelo tras una sentada del ministro Bolaños y el secretario popular García Egea.
A la prensa de obediencia barcelonesa le parece más interesante que el Tribunal de Cuentas haya decidido rechazar que el Institut Català de Finances avale a los investigados por la difusión exterior del proceso independentista. La "jugada maestra" del consejero Giró ha quedado en agua de borrajas. Atisban en los medios locales una mano negra que ha decidido activar el procedimiento de los embargos antes de que surta efecto el pacto PSOE y PP para renovar el órgano fiscalizador.
Por partes. "PSOE y PP pactan un nuevo Tribunal Constitucional para recolocar sus piezas" dice La Razón, que atribuye el apaño a "la urgencia del PSOE en cubrir una baja y la necesidad del PP en renovar magistrados de la etapa de Rajoy". El texto es de Carmen Morodo: "Gobierno y PP celebraron ayer con entusiasmo el acuerdo sobre la renovación del Tribunal Constitucional (TC) –que era el capítulo mollar del pacto– y sobre las demás vacantes institucionales (Defensor del Pueblo, Tribunal de Cuentas y la Agencia de Protección de Datos). Los nombres se negaron oficialmente a confirmarlos. El pacto estaba cerrado desde hace meses, pero condicionado a que se desbloqueara el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), y la coincidencia de intereses del PSOE y del PP en recolocar sus piezas del Constitucional es lo que ha favorecido que se anunciara como un consenso exprés lo que en realidad estaba ya cocinado desde hace tiempo. Además de ajustes en sus piezas dentro del Constitucional, la operación ha permitido a los dos partidos lavarse la imagen y escenificar una voluntad de acuerdo y de disposición al diálogo que, en privado, se sigue observando con el mismo escepticismo en los dos lados".
Líneas después explica Morodo que "el pacto sobre el TC afecta a cuatro plazas, pero no altera el equilibrio entre progresistas y conservadores. Y desde la cuota conservadora apuntan «a los hilos» de esta negociación que no se ven. Al PP le viene bien empezar a «meter mano», explican, en la composición del TC porque proviene de la etapa de Mariano Rajoy y en algunas de las últimas decisiones no han encontrado el «feed back» que esperaban recibir. Desde el Alto Tribunal comentan el malestar de la dirección del PP con el presidente, Juan José González Rivas, una de las piezas caducadas que caen con el acuerdo, «por salirse del criterio del voto del bloque conservador». El magistrado Andrés Ollero, también incómodo para el PP, es otro de los que deja su plaza. Para el PSOE, la urgencia venía del hecho de que la plaza de Fernando Valdés estaba desierta desde que se vio obligada a abandonarla al verse sometido a un proceso judicial por violencia de género. Las últimas resoluciones del Tribunal Constitucional sólo han traído disgustos al Gobierno, sobre todo en lo que toca a la no validación de decisiones de la gestión de la pandemia como el primer estado de alarma o el cierre del Congreso".
En El Independiente, Carmen Lucas-Torres asegura sin rodeos que "El PP controlará el TC y el Gobierno, el Tribunal de Cuentas" y acentúa que "el órgano de fiscalización del sector público emitirá próximamente un informe sobre los gastos por la pandemia de Covid". En su nota adquiere mayor relevancia el TdC que el TC: "El Gobierno alcanza en la fecha que se había marcado (otoño de 2021) su prioridad de renovar el Tribunal de Cuentas cuyos miembros vencieron su mandato el pasado 23 de julio y que ahora mismo cuenta con una mayoría de consejeros (7 de 11) propuestos por el Partido Popular en 2012, cuando era la fuerza mayoritaria de las Cortes. Precisamente la composición del órgano fiscalizador de las cuentas públicas y sus decisiones están provocando dolores de cabeza al equipo de Sánchez. Por un lado, complican su relación con los partidos independentistas: una semana después de que el Gobierno concediera el indulto a los líderes del procés condenados por el Tribunal Supremo tanto por el delito de sedición como por el de malversación, el Tribunal de Cuentas exigió una fianza de 5,4 millones de euros a los expresidentes catalanes Carles Puigdemont y Artur Mas, al ex vicepresidente Oriol Junqueras y a otra treintena de cargos públicos por su posible responsabilidad contable en la promoción de una Cataluña independiente a través de las denominadas embajadas catalanas en el exterior y el Diplocat. Precisamente este jueves el Tribunal de Cuentas ha rechazado el sistema de avales ideado por la Generalitat para cubrir las fianzas de 5,4 millones de euros impuestas por el órgano fiscalizador a los líderes independentistas. Por otro lado, el Tribunal de Cuentas ultima un informe sobre los gastos públicos durante la pandemia de Covid que no dejaría al Gobierno de Sánchez en buen lugar. La posibilidad de que los partidos del Gobierno propongan y elijan (con el cambio de mayorías en las Cortes resultado de las últimas elecciones) a un mayor número de consejeros en el órgano le daría la posibilidad de asegurarse candidatos más afines a sus intereses y un mayor control".
Además de los cambalaches en los órganos, el acuerdo tiene otra lectura, según Jorge Sáinz en Vozpópuli. "Sánchez y Casado: pacto de intereses en 24 horas para desmarcarse de Podemos y Vox" es el titular de la pieza, de la que destacan estas líneas: "Sánchez es, supuestamente, el que ha cedido. El PSOE ha aceptado el acuerdo dejando el CGPJ al margen. Algo que, dijo, no iba a tolerar. "O se renueva todo o no se renueva nada", era la consigna. Sin embargo, al presidente del Gobierno "le viene muy bien" este entendimiento con el PP, que se ha cocinado al margen de Podemos. Sánchez marca distancias con el partido morado en un momento de negociación presupuestaria, en el que el PSOE ha cedido en materia de vivienda --regulación de los alquileres-- y con el decreto eléctrico".
Y: "El PP, por su parte, también ha conseguido alejarse de Vox gracias a este pacto. Casado se sacude el sambenito del bloqueo con el que ha tratado de etiquetarle el Gobierno. Y, por otro, rompe con esas voces que veían a los populares más escorados hacia la formación de Santiago Abascal tras su convención. Al igual que González, el expresidente Mariano Rajoy reivindicó los acuerdos entre los dos grandes partidos".
La decisión de la instructora del Tribunal de Cuentas Esperanza García de rechazar el aval del Institut Català de Finances ha causado un hondo impacto en el independentismo. Artur Mas está desolado. Ha envejecido una década de golpe. Con lo contento que se le veía el otro sábado en el show nocturno de TV3 diciendo que a lo mejor lo de la independencia en 18 meses había sido una mentirijilla y lo desolado que estaba ayer en comparecencia de urgencia para decir que no le llega ni para pipas. Con lo que ha sido ese hombre, toda una vida cobrando del pueblo. Es raro lo suyo. Ahora mismo debe cobrar más de cien mil euros al año como expresidente.
Los medios afectos a la causa republicana hablan de la consumación de una venganza mientras que Elisenda Paluzie asegura que en la caja de resistencia ya no hay más que telarañas. Jaume Giró, por su parte, dice que no se quedará quieto. Del texto de Marta Lasalas en El Nacional: "El Govern presentará un recurso ante el Tribunal de Cuentas contra la decisión de no aceptar los avales del Institut Català de Finances (ICF) para cubrir las fianzas de 28 ex altos cargos de la Generalitat investigados por la acción exterior del ejecutivo catalán. "Se trata de una decisión estricta y chapuceramente política", ha denunciado el conseller de Economía, Jaume Giró, que ha destacado que ha sido adoptada "por un órgano político, formado por personas nombradas políticamente y que tienen el mandato caducado"".
Sigue el texto líneas después: "El conseller ha denunciado que el objetivo del Tribunal es "embargar directa y rápidamente a todos los encausados", como indica la resolución que hoy se ha hecho pública, lo cual demuestra que esta es "una decisión política, de venganza". "Si quisiera justicia, no venganza, habría dado un plazo de unas semanas para poder reponer el aval", ha añadido. No sólo eso, Giró ha subrayado que la decisión se ha adoptado justo en el momento en que PSOE y PP desbloquean las conversaciones para renovar los miembros de este órgano y, antes de que esto se materialice, "se han dado prisa, han corrido para emitir un dictamen"".
En cambio, en ERC ven el vaso medio lleno. "ERC prevé una salida a los embargos a líderes del 'procés' con el nuevo Tribunal de Cuentas" titulan en El Confidencial, donde dicen que los republicanos "confían que con el cambio de consejeros se propicie también una salida para la causa abierta por malversación contra 36 ex altos cargos de la Generalitat, entre ellos Puigdemont, Junqueras y Mas". El texto es de Iván Gil y Beatriz Parera, quienes escriben que "el acuerdo entre socialistas y populares para la renovación del Tribunal de Cuentas, donde los primeros se asegurarán una mayoría en los nombramientos, ha sido recibido en el independentismo con una muestra de entre alivio y cautela. A la espera de conocer todos los detalles, explican fuentes de la dirección de ERC, confían que con el cambio de consejeros se propicie también una salida para la causa abierta por malversación contra 36 ex altos cargos de la Generalitat, entre los que se encuentran Carles Puigdemont, Oriol Junqueras y Artur Mas. Para los republicanos, siempre fue una prioridad revertir esta causa, que enmarcan dentro de lo que denominan "represión" al independentismo y que podría acabar en el embargo de bienes por un valor de 5,4 millones de euros. Es por ello que las mismas fuentes de ERC advierten, en un contexto de negociación de los Presupuestos de 2022, de que los socialistas son conscientes de que "se juegan mucho". Una advertencia en referencia a la línea que adopten los nuevos consejeros y el resultado final de la causa, "en función de cómo quede todo", concluyen".
Otras noticias. "Ya no importa a qué hora poner la lavadora" avisa El País en un esquinazo de su portada. "En la situación actual, es difícil rebajar el recibo desplazando el uso de los aparatos", abunda. La nota viene con la firma de Clemente Álvarez y dice así: "Los cambios en la factura eléctrica aprobados en septiembre por el Gobierno y los elevados precios del megavatio hora en el mercado mayorista han desvirtuado en gran medida el sistema de las horas valle, llana y punta, que entró en vigor en junio. Aunque la facturación por tramos horarios sigue aplicándose a millones de ciudadanos, en estos momentos se ha vuelto mucho más complicado ahorrar poniendo a una hora determinada el lavavajillas o la lavadora. No solo por reducirse las diferencias entre los tramos más baratos y los más caros, sino porque a menudo resulta difícil atinar con la hora más económica para usar los electrodomésticos".
Sigue la pieza: "Un ejemplo: si a una lavadora con calificación energética C le aplicamos los precios de la tarifa regulada PVPC (precio voluntario para el pequeño consumidor) de ayer, la diferencia entre la hora más cara y la más barata fue de solo seis céntimos. Pero poner la lavadora a las 8.00 (periodo llano) fue más caro que hacerlo a las 12.00 (punta). Y todavía más sorprendente: lo más barato era darle al botón de encendido a las 15.00 (llano), más todavía que de madrugada, supuestamente el horario valle más económico. (...) Como señala Francisco Valverde, analista del mercado eléctrico, “los tramos no han desaparecido, pero ahora es mucho más difícil, hay que estar pendiente todo el rato”. Este experto recalca que ahora compensa especialmente ahorrar, no desplazando las horas de uso, sino, sobre todo reduciendo el consumo de energía: no poniendo la lavadora a las 23.00, sino utilizando los programas más eficientes, bajando la temperatura del agua, llenándolo a plena carga o incluso alargando el uso de la ropa para lavar menos".
Ah, estupendo, se le da la vuelta a los calzoncillos y ni tan mal.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fue entrevistado anoche en La Sexta y dijo que el rey emérito debería explicar lo de sus cuentas.
15 de octubre, santoral: Santa Teresa de Jesús o de Ávila, Barses de Edesa, Magdalena de Nagasaki, Severo de Tréveris y Tecla de Kitzingen.