El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asumido en primera persona la defensa de los indultos a los presos independentistas condenados por sedición. La cuestión suscita un debate de fondo. Sánchez aboga por la reconciliación y el reencuentro. La oposición, por la mano dura y el cumplimiento de la pena. Son dos maneras antagónicas de afrontar el contencioso independentista, mano abierta o puño cerrado, dos relatos que se confrontan con el criterio de los ciudadanos.
Sánchez, de viaje en Argentina, afronta el dilema sin ambages, ni rodeos. Se dirige a la ciudanía de manera directa. Es tiempo de "comprensión" y "magnanimidad". La derecha, por contra, afila sus armas para la manifestación de la plaza de Colón en Madrid, acto que además de no estar exento de polémicas de toda índole se presenta como una encerrona para el PP por parte de Vox.
Al tiempo, se suceden las polémicas en la trinchera secesionista. Una frase en el artículo de Jordi Sànchez de respuesta a Oriol Junqueras aporta munición a la facción republicana. Escribió Sànchez en el Ara que "siempre lo he creído y no sólo ahora, después de 43 meses en prisión. De hecho, soy de quienes creen que el 1 de Octubre fue concebido más para forzar al gobierno español a abrir una vía de diálogo y negociación para lograr un referéndum acordado que para proclamar efectivamente la independencia". O sea que de "mandato", nada. Más bien un acto instrumental para propiciar una negociación. El desliz no es menor. Si Junqueras cree poco en la vigencia y consecuencias del 1-O, su colega de cárcel Sànchez, aún menos. La crisis en la coalición independentista no es menor.
En La Razón se destacan las palabras del presidente Sánchez en Buenos Aires y su negativa a vetar a Junqueras de la mesa de diálogo. Firma la nota A. Rojo: "El presidente del Gobierno ha asegurado desde Buenos Aires que la carta en la que Junqueras renunciaba --aparentemente-- a la vía unilateral es «bienvenida como cualquier gesto que contribuya a la distensión». Sánchez ha asegurado que «comprende» que «pueda haber ciudadanos que tengan reparos» sobre la decisión de otorgar indultos a los líderes independentistas pero ha pedido a estas personas «confianza» porque hay que hacer una «apuesta para pasar de un mal pasado a un futuro mejor y eso implica magnanimidad»".
Sigue la pieza: "Profundizando en la tarea pedagógica para «vender» a su electorado esta polémica decisión, Sánchez dijo que «vamos a permitir que la sociedad catalana se encuentre a sí misma» y a cerrar las heridas de esta «situación que he heredado de la anterior administración». «Pido comprensión y magnanimidad ante el desafío que tenemos por delante. Sin duda el objetivo merece la pena». dijo. En su rueda de prensa conjunta con el presidente argentino Alberto Fernández en la Casa Rosada de Buenos Aires, Sánchez también fue preguntado sobre el momento en el que se constituirá la mesa de negociación. Al respecto ha dicho que no iba a entrar en la cuestión pero que lo primero era recibir al nuevo presidente de la Generalitat Aragonés en el palacio de La Moncloa «como mandan los cánones, si me permiten la expresión». «Lo mas importante es trasladar el mensaje político: la voluntad que tienen el Gobierno de abrir un nuevo periodo para Cataluña», subrayó".
En el Abc, sin embargo, atribuyen la operación indultos a la alianza entre Moncloa y ERC. "ERC salva al Gobierno 40 veces de rendir cuentas en el Congreso" es el titular que encabeza una pieza de Ana I. Sánchez que arranca así: "La deuda que el Gobierno tiene con el secesionismo se mide en cifras que van más allá de las votaciones de investidura o Presupuestos. En tan solo año y medio, los partidos independentistas han evitado la constitución de siete comisiones de investigación en el Congreso por asuntos relacionados con los socios de coalición o su gestión y una treintena de comparecencias de miembros del Gobierno ante el pleno, de las que casi la mitad de ellas --14-- se exigían a Pedro Sánchez. Del resto de explicaciones vetadas, tres se reclamaban a la vicepresidenta primera, Carmen Calvo; otras tantas al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; y a los titulares de Justicia, Juan Carlos Campo y antes Dolores Delgado".
Los ministros quieren que los indultos se concedan cuanto antes para pasar página del espinoso expediente, según cuenta Raúl Piña en El Mundo: "Toda vez que la decisión está tomada, no demorarla. Es la sensación en el Gobierno ante los indultos que se concederán a los líderes del procés. Aunque no se ofrece una fecha concreta, el Consejo de Ministros resolverá "cuanto antes", señalan fuentes gubernamentales. Finales de junio, principios de julio es el rango que manejan en el seno de la coalición, donde algunos sectores querrían que fuera este mismo mes. "Parece lo lógico". En el Consejo de Ministros se espera que en las próximas semanas el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, eleve los 12 expedientes --uno por cada uno de los líderes del procés condenados-- y se excusa la posible demora que pueda haber en la decisión en el hecho de presentar unos textos que sobrevivan a los recursos que pretenden Vox y el PP. "Calidad mejor que rapidez", exponen en La Moncloa".
Continúa la nota: "Con todo, la posición mayoritaria es que no hay motivo para demorar la decisión, alargarla en el tiempo, pues el debate político y público ya se ha desencadenado, con la manifestación este domingo en la madrileña Plaza de Colón como muestra visible del rechazo político y social. Y, por tanto, el Ejecutivo ya está sufriendo la erosión. "Sí que me parece que antes de irnos de vacaciones, antes del 1 de agosto, seguro que lo tendremos. Tampoco me imagino que mantengamos abierta una etapa de incertidumbre" ha reflexionado Miquel Iceta, ministro de Política Territorial, poniendo voz al pensamiento de muchos en el Gobierno. "Cuanto antes resolvamos la cuestión mejor. Postergarlo no nos conduce a nada", ha expuesto José Luis Ábalos, ministro de Transportes".
Mientras tanto y en la contraparte, "Vox prepara una emboscada al PP en Colón" avisa Javier Bocanegra en El Confidencial. Del texto de Bocanegra: "En Vox son conscientes de que este (el caso catalán) es uno de sus filones para arañar espacio a Pablo Casado y aprovechan cada oportunidad para recordarlo. La convocatoria de Colón, organizada por la asociación Unión 78, que lidera Rosa Díez, no iba a ser la excepción. Esta semana, el portavoz orgánico, Jorge Buxadé, se pronunció en esta línea en rueda prensa. "Por lo menos yo, y muchos como yo, cuando vayamos el 13 de junio a la plaza de Colón, no nos vamos a manifestar solo en contra de los indultos. Va a ser un momento ideal para recordar lo que nos ha llevado al 13 de junio. Para recordar que hubo un intento de golpe de Estado en noviembre de 2014 y el Gobierno de Mariano Rajoy [no tomó] ni una sola decisión ni consecuencia... Para recordar que durante los años 2015, 2016 y 2017 se preparó la perpetración de un golpe de Estado y el Gobierno de Rajoy no hizo nada, con la complicidad del PSOE", aseguró el también eurodiputado".
Otros que están en contra de los indultos son los CDR, sí aquellos Comités de Defensa de la República que tanto gustaban al presidente Torra. Del texto de Marc González en El Nacional: "Los indultos tampoco gustan a los CDR, que han publicado un comunicado contundente contra lo que consideran "una maniobra para hacer callar a las instancias europeas e internacionales que denuncian la existencia de presos políticos". Los CDR han recordado que si "ni los políticos ni la ciudadanía lo han pedido" es porque "no aceptamos ninguna culpa". "Sólo la amnistía y el ejercicio del derecho de autodeterminación son la solución política al conflicto", han dicho recordando que los indultos sólo benefician a los presos "y dejan fuera a las personas en el exilio y las 3.300 personas represaliadas". El comunicado alerta que los indultos y su lógica crean la "paradoja" que haya independentistas "a los que se les puede 'perdonar' y otros a los que no por generar división dentro del movimiento independentista". Un ejemplo de esta división son las mismas discrepancias mostradas entre el líder de ERC, Oriol Junqueras, y Junts sobre los mismos indultos".
La cuestión de las medidas de gracia y el terremoto de la carta de Junqueras está teniendo fuertes réplicas que afectan a la estabilidad del Govern de coalición. Del e-notícies: "La portavoz de ERC en el Congreso, Míriam Nogueras, en una entrevista en RTVE, ha acusado a ERC de cambiar de posición y le reclama que respete el pacto de legislatura: "El acuerdo dice claramente que no se descarta ninguna vía. Y ese acuerdo está firmado por ERC y por Junts". Es más, ha cuestionado que el gobierno de coalición a la Generalitat tenga recorrido si se descarta esta vía: "El acuerdo no es compatible con la renuncia a la unilateralidad", ha remarcado".
Más noticias del frente independentista. Gonzalo Araluce explica en Vozpópuli que "El CNI investigó una treintena de ciberataques procedentes del separatismo catalán en 2020" y escribe: "Ataques por denegación de servicio, desfiguraciones de webs, filtraciones de datos… grupos de hacktivistas vinculados al independentismo catalán y coordinados bajo la denominación #OpCatalunya y #OpCatalonia --a menudo entremezclados con los gestionados desde #OpSpain-- llevaron a cabo 32 ciberataques a lo largo de 2020; entre ellos, a instituciones vinculadas con la administración pública. Esa es la cifra de la que tiene constancia el Centro Criptológico Nacional (CCN-Cert), órgano del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) encargado de la ciberseguridad".
Continúa el texto: "En fechas recientes se han registrado varios ciberataques contra la administración. El último de ellos contra el Ministerio de Trabajo, que a su vez ha paralizado todos los servicios centrales del Ministerio de Seguridad Social. Movimientos de un fuerte impacto social, habida cuenta de los retrasos y problemas en gestiones de la ciudadanía. Episodios que, a pesar de todo, no son tan infrecuentes. El CCN-Cert detalla en su Informe Anual 2020: Hacktivismo + Ciberyihadismo algunos de los episodios destacados en materia de ciberseguridad del último año. Habla de ataques que “principalmente” los llevan a cabo “identidades individuales” sin “conciencia de colectivo”. Apuntan a individuos “oportunistas” que están “motivados por el exhibicionismo”".
Buenas noticias económicas. La Vanguardia destaca que una empresa catalana entra en la Bolsa de Nueva York. El texto es de Blanca Gispert: "El fabricante de cargadores de vehículos eléctricos Wallbox se convertirá en la primera start-up de Barcelona en cotizar en la Bolsa de Nueva York, todo un hito para el ecosistema de la ciudad y del país, que verá nacer su tercera empresa unicornio cuando al salir a bolsa la compañía supere los 1.000 millones de valoración. Actualmente, solo Glovo y Cabify son consideradas unicornios en España. La compañía --fundada el 2015 por Enric Asunción y Eduard Castañeda-- anunció ayer que dará este gran salto hacia adelante de la mano de Kensington Capital, un vehículo de inversión que cotiza en la Bolsa de Nueva York y que opera como SPAC (las siglas significan propósito especial de compra), con el objetivo de adquirir una empresa no cotizada y llevarla al parquet. Ayer se conoció que Kensington finalmente ha elegido a la barcelonesa Wallbox. Según un comunicado, la compañía resultante de la operación se llamará Wallbox y cotizará bajo el ticker WBX. En la práctica, la SPAC desaparecerá porque su función, facilitar la salida a bolsa de la empresa adquirida y obtener los rendimientos de la operación, habrá llegado a su fin".
Emmanuel Carrère ha sido galardonado con el Premio Princesa de Asturias. “Hay una especie de locura española” dice en El País entrevistado por Marc Bassets. Ahí va un extracto:
"Emmanuel Carrère (París, 63 años) está ocupado estos días mudándose a un nuevo apartamento en París. “No me lo esperaba”, declaró ayer Carrère en una entrevista a El País poco después de saber que había ganado el Premio Princesa de Asturias de las Letras 2021. Hasta el martes no recibió el aviso de que estaba en la lista de candidatos finales. El breve lapso no le dejó tiempo para angustiarse con el resultado. “Y esto es agradable”, comentó, “porque uno no tiene el tiempo de morderse las uñas diciéndose: ‘Oh, là, là, sería genial ganar”. No le angustia, en cambio, cómo gastarse los 50.000 euros del galardón: “Encontraré un modo de usarlos”, bromea.
P. ¿Qué ven en usted los lectores en español? ¿Qué les da?
R. No lo sé. Me gustaría saberlo. Quizá haya una afinidad. Me siento cómodo tanto con los españoles como con los rusos. No son gente del todo razonable. Hay una especie de locura española como la hay rusa.
P. ¿Cómo definiría su literatura? ¿Qué diría que ha aportado?
R. ¡Vaya pregunta! Espero que una cierta honestidad y una cierta obstinación a la hora de cavar siempre en un mismo surco.
P. ¿Qué surco?
R. Se trata de intentar contar algo sobre la relación y la tensión entre mi consciencia y el mundo exterior. Es un poco abstracto. Hay una expresión inglesa que me gusta: to think out of the box, salir de la caja en la que estamos. Y lo que intento hacer en los libros y en la vida es un esfuerzo, ciertamente no muy fructífero, pero en todo caso sostenido, para intentar pensar y vivir un poquito fuera de esta caja.
P. ¿Cuál es su caja?
R. Es el hecho de estar en la propia condición social, histórica, psíquica: todo aquello que hace que uno sea uno mismo y que este ‘uno mismo’ esté terriblemente limitado, determinado y bajo detención domiciliaria. El trabajo de la vida consiste en intentar despegarse un poco de todo esto, tener una mirada algo más elevada.
P. ¿Su condición social es la de burgués bohemio parisino o bobó, como se dice en Francia?
R. Sí, es verdad. Pero reconocer algunas características de la propia caja, no digo que permita liberarse de ella, pero ya es un paso. Si uno es totalmente ciego ante sus propias determinaciones sociológicas, no hay ninguna posibilidad de reconocer nada".
10 de junio, santoral: Asterio de Petra, Amancio mártir, Arecio mártir, Bogumilo de Gniezno, Censurio de Auxerre, Itamar de Rochester, Landerico de París, Maurino abad y Trípodes mártir