Maduro se agazapa en el búnker. Carece del valor del soldado raso y se rodea de oficiales a modo de escudos humanos. Resiste, pero cada día que pasa está más debilitado. A finales de enero, cuando Juan Guaidó se proclamó presidente legítimo, era al revés. Un día más de Maduro era un día menos del joven Guaidó. Ahora es exactamente al revés a pesar de que el último jaque, la llamada a rodear los cuarteles, ha sido un farol. "El fallido plan de Guaidó abre grietas en el chavismo" resume El País en portada. 



Es el único titular de apertura sobre Venezuela en la prensa de papel. En La Razón, la crisis ocupa un faldón donde se informa de los hábitos de Maduro. Escribe Víctor Amaya: "Pero sus rutinas no han cambiado, según algunos informantes. Maduro vive dentro de Fuerte Tiuna, una gran instalación militar enclavada en Caracas, desde hace algunos años. Nunca ha ocupado la residencia presidencial ubicada al este de la capital, y prefiere el cuartel al palacio de Miraflores, donde pasaba sus noches su antecesor, Hugo Chávez. Su entorno de seguridad tampoco ha cambiado, pero sí la vigilancia sobre los comandantes de fuerzas. Por los cuarteles corre el rumor de que los señalados de haber conspirado en contra de Maduro serían investigados a fondo, y hasta pasados por polígrafo, para detectar traiciones. Pero nada de eso estaba confirmado, pues los generales habían estado en sus actividades habituales, incluso manteniendo reuniones con el jefe de Estado".



Sin nuevas noticias de la vida de los López en la embajada española en Caracas. La pretensión de impulsar una transición sin guerra choca con los intereses en la región de los Estados Unidos y Rusia. Venezuela es un polvorín pero hay solución, según el artículo de John Carlin en La Vanguardia. "Messi, arma política" se titula. El autor glosa de entrada los efectos sobre la tensión mundial del gol de falta del futbolista del Barça frente al Liverpool: "Si el propio Klopp lo acabó aplaudiendo, podemos estar seguros de que lo aplaudieron también los chavistas y los golpistas de Venezuela; los exguerrilleros de las FARC y la derecha colombiana; los jueces, fiscales y (quizá con más fervor) los acusados catalanes en el Tribunal Supremo; los brexiters y los remainers en Reino Unido; los israelíes y los palestinos; los chíies y los suníes; republicanos y demócratas en Estados Unidos".



lavanguardia.200

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Luego ya lanza su propuesta para derrocar a Maduro: "Ya que, con la excepción de los viejos países comunistas, el mundo está casi tan opuesto al régimen chavista del presidente Nicolás Maduro como lo estuvo en su día al apartheid, ¿por qué no intentar lo siguiente? Decirle a los venezolanos que mientras Maduro se aferre al poder se impondrá un boicot a la participación de su selección en el fútbol internacional y un bloqueo a todo acceso por televisión, radio e internet al fútbol de las grandes ligas europeas".



¿Venezuela sin fútbol? Lo mismo están más preocupados por los apagones. Sea como fuere, Carlin concluye con que la Creu de Sant Jordi es poca cosa para Messi, que se merece que se le regale la Sagrada Familia. 



La prensa prosigue con el relato del descalabro, conmoción y giro del PP de Pablo Casado y Alberto Núñez Feijóo, un espectáculo alentado a derecha e izquierda y en el interior. Miquel Iceta ha copiado la portada de El Jueves para hacer el chiste del fraCasado, Vox amenaza con reventar el pacto andaluz más lo de los moderados, centristas y pragmáticos sin siglas. En Voz Populi traza Alejandro Vara la crónica sobre los últimos días de Casado: "Fulminó a Javier Maroto, su jefe de campaña, porque hacía falta que rodara alguna cabeza. Los ‘purgados’ de todas las listas, el marianismo latente, el sorayismo residual, se sumaban a la revuelta. Feijóo, atemorizado ante lo que le puede ocurrir en las principales capitales gallegas el 26-D, seguía en su fase declaratoria contra ‘el equipo actual’ de Génova. Casado tuvo que quebrar sus escasos tres días de descanso, después de ocho meses de recorrer inútilmente España, para apaciguar al ‘referente’ del Finisterre. Se personó en la zona para estar presente en una romería del PP. “Pero ¿aquí quien manda, Casado o el gallego?”, se escucha en los despachos del PP madrileño".



Sigue el texto: "Este sábado, en Coruña, se abrazaron, se prometieron fidelidad y hasta otra. Ni Feijóo es el futuro del PP ni Casado será enviado al sacrificio. El 26-M tiene la palabra. Quizás Vox adelgace y Ciudadanos se repliegue. Casado, entonces, si logra hacerse con el Ayuntamiento de Madrid, abordará la reforma de un partido que Rajoy dejó en el esqueleto. Pasará más tiempo en su despacho, que ahora apenas visita. Dejará de recorrer como un poseso las carreteras de España y, al fin, abordará la gran asignatura pendiente: Renovar o refundar el principal partido de la derecha española".



Las municipales no sólo tienen una importancia vital en Madrid. La posconvergencia se juega los cuartos en las municipales y los augurios son pésimos, según escribe Toni Bolaño en La Razón: "Las previsiones para el 26-M son malas y el malestar aumenta en sus filas. Las generales han agudizado la crisis porque los de Puigdemont han perdido de forma estrepitosa en sus feudos –Vic, Sant Cugat, Reus, Valls, por ejemplo– y han retrocedido «de forma alarmante en la Cataluña interior, la base del poder municipal». En la tropa de Puigdemont han saltado las alarmas «sobre todo, en los alcaldes que ven peligrar su reelección». Estos alcaldes fueron, por activa o por pasiva, los artífices de que en el último Congreso del PDeCAT la vieja guardia fuera incapaz de oponerse al liderazgo del ex presidente fugado y «ahora ese liderazgo está en cuestión». «No opusieron resistencia para evitar un conflicto ante las municipales y ahora se ven arrastrados a una derrota de impredecibles consecuencias», apuntan conocedores del malestar interno".



Mientras tanto, la Assemblea Nacional Catalana (ANC) se apresta a aprobar una nueva "hoja de ruta" este mismo domingo. Del texto de Vilaweb: "L’ANC ha establert un full de ruta clar a curt termini que defensa decididament la via unilateral. La ponència, que els socis hauran de votar avui en l’assemblea anual al Tarraco Arena, demana que el Parlament de Catalunya o l’Assemblea de Càrrecs Electes proclami una DUI en cas que les coalicions electorals ‘indubtablement independentistes’ assoleixin més de la meitat dels vots al Parlament de Catalunya. L’ANC considera que aquest és l’escenari més propici si, després de les eleccions municipals i europees i de la finalització del judici de l’1-O, els partits continuen sense una estratègia comuna".



Sigue: "La ponència assenyala la via unilateral com a l’escenari ‘més probable’ per a tornar a crear una oportunitat, però remarca que la manca d’unitat –molt present en tot el redactat– és el punt feble principal. L’entitat diu que treballarà perquè n’hi hagi i que, si no s’aconseguís, es reservarà el dret de ‘donar el suport’ al partit o als partits que sí que ‘haguessin manifestat una disponibilitat sincera per a arribar a acords i assolir la unitat d’acció’".



Hay más que fundadas sospechas de que en ERC no están por la unilateralidad. Pere Aragonès, la voz de Junqueras en el exterior, acaba de declarar que apuestan por un referéndum acordado. Sea como fuere, el soberanismo no sólo tiene problemas de unidad, sino de cash. Apunta A. Fernández en El Confidencial: "Las sanciones a los independentistas comienzan a hacer daño en las filas soberanistas. Las últimas fianzas exigidas a una treintena de altos cargos de la Generalitat por el juzgado de instrucción número 13 de Barcelona, que ascienden a 5,8 millones de euros, preocupan a las formaciones y a las entidades locomotoras del procés. Tanto es así que ERC, el partido que acaba de ganar las elecciones generales superando el millón de votos en Cataluña, ha pedido a cada uno de sus afiliados 100 euros para hacer frente a las citadas fianzas".



Continúa la información: "Por eso, la dirección de ERC decidió esta semana tomar una medida drástica: recaudar dinero (por defecto) de sus militantes. "Ayer, Oriol y Marta nos pidieron un esfuerzo más: hacer una aportación económica para poder hacer efectivas las abusivas fianzas que han pedido a nuestros compañeros/as imputados por el 1-O", decía un correo republicano al que ha tenido acceso El Confidencial. Se refiere este correo a Oriol Junqueras y Marta Rovira. El primero es el presidente de ERC y está en la cárcel. Rovira es la secretaria general y se encuentra fugada en Suiza".