Ángela Merkel y Pedro Sánchez pasean su idilio por las dunas de Doñana. La canciller está encantada con su anfitrión español, su nuevo mejor amigo, el hombre que acoge inmigrantes y no le protesta nada, ni siquiera que tres jueces de Schleswig-Holstein digan que cómo va a ser Puigdemont un rebelde. Seguidos por sus parejas, Merkel y Sánchez emiten señales de franco entendimiento. Pobre Mariano. Claro que como ya ha empezado el fútbol a tope, al registrador le debe dar igual arre que so.



La lideresa germana avala al joven líder socialista, que no deja de incurrir en las típicas contradicciones del poder. Por ejemplo, esas terribles devoluciones en caliente (El País) de los saltavallas que practicaba con saña el Ejecutivo de Rajoy son las mismas que ejecuta y ejecutará el actual Gobierno, según se desprende de la defensa del procedimiento ante los tribunales europeos. Del diario de Prisa, el texto de Óscar López Fonseca: "El Gobierno ha decidido seguir adelante con el recurso que el Ejecutivo de Mariano Rajoy presentó ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) contra la decisión de la Corte de Estrasburgo de condenar a España por la devolución en caliente de dos inmigrantes africanos en la frontera de Melilla en 2014. En el escrito, la Abogacía del Estado evita esgrimir la Ley Mordaza del PP –en una de cuyas disposiciones se legalizaron estas polémicas expulsiones exprés- pero utiliza uno de los argumentos que planteó el Gobierno popular ante la Corte. Pese a ello, un portavoz del Ministerio de Justicia insistía esta semana a este diario que "la voluntad del Gobierno es acabar con las devoluciones en caliente", aunque añadía que no se trata de "suspenderlas y ya está. Se está a la espera de ver qué marco jurídico marca precisamente Estrasburgo" cuando se pronuncie sobre el fallo el próximo septiembre".



Sigue la nota: "Ese recurso ha llegado ahora a Estrasburgo y en sus 76 folios el Gobierno de Sánchez mantiene la postura del Ejecutivo de Rajoy para negar cualquier irregularidad en la expulsión de los dos inmigrantes. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ya había apuntado en esa dirección en julio al justificar las expulsiones exprés que realizó en aquella fechas la Guardia Civil tras el salto de 700 subsaharianos a la valla de Ceuta. Grande-Marlaska esgrimió que los inmigrantes rechazados no habían pisado suelo español y, por tanto, no podía hablarse de devoluciones en caliente".



La colisión entre lo que habría que hacer y lo que se tiene que hacer desconcierta a los ministros. El Mediterráneo es una inmensa fosa común de la que el Open Arms y el Aquarius rescatan a unos pocos supervivientes. Precisamente el Aquarius (ABC) navega con otro "cargamento" de desesperados. Escribe Ángel Gómez Fuentes: "El enfrentamiento entre la embarcación Aquarius, --con 141 inmigrantes a bordo desde el pasado viernes rescatados frente a las costas de Libia-- y el ministro del Interior, Matteo Salvini, vive el segundo acto. Después de la odisea del mes de junio, cuando la nave Aquarius se vio obligada a esperar durante ocho angustiosos días en el Mediterráneo con 630 inmigrantes antes de que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, aceptara acogerlos en Valencia, el ministro del Interior italiano se mantiene en su firme estrategia. «Aquarius no entrará jamás a un puerto italiano», subrayó Matteo Salvini. Los inmigrantes fueron rescatados en dos operaciones. En la primera fueron salvadas 26 personas, entre ellas seis mujeres, a 26 millas de la costa libia. Habían permanecido durante 35 horas a la deriva en una pequeña barca. Poco más tarde se produjo el segundo salvamento en aguas internacionales: en una patera viajaban hacinadas 116 personas, entre ellas 67 menores".

ABC

La tripulación pide puerto y los gobiernos miran para otro lado. Sánchez adquirió una obligación moral que costea con pólvora del rey. Entre Sánchez y Merkel han arbitrado la "solución" de pagar más al reino alauita para que tenga a bien blindar sus fronteras. Menudo plan. 

Notas sobre el 17A. La Razón augura una encerrona al Rey. Firma Pilar Ferrer: "Un hipócrita doble juego, entre una aparente frialdad institucional permisiva con la radicalidad en las calles. Esta es la estrategia del actual presidente de La Generalitat, Joaquim Torra, ante los actos conmemorativos del aniversario de los atentados del 17A.

Según fuentes del Govern, Torra tiene previsto entregar al rey Felipe VI lo que en lenguaje soberanista denominan «un manifiesto por la libertad». Es decir, un escrito en el que se denuncian las prácticas opresoras del Estado español y, sobre todo, se reclaman las inmediatas excarcelaciones de los líderes independentistas ahora en prisión. La intención de Torra, por el momento, es acudir al acto principal de conmemoración en Barcelona el próximo viernes presidido por el Rey, pero con la entrega de este documento que en su núcleo duro califican como «necesario y exigente para el pueblo de Cataluña». Será algo similar a lo que hizo en la pasada inauguración de los Juegos Mediterráneos en Tarragona, donde acudió al acto con el Rey y le hizo entrega de un documento reivindicativo separatista".



Eso de que el acto de las víctimas estará presidido por el Rey es harto dudoso, pues la intención de Ada Colau pasa por diluir a las autoridades fuera de foco y reducir el riesgo de chuscos incidentes protocolarios. 



El Periódico aprovecha la cercanía del aniversario de los atentados para repasar algunos de los hechos más relevantes en torno al espinoso asunto del aviso de la CIA que con tanto ahínco negaron haber recibido los Mossos. Uno de esos hechos relevantes es el frustrado intento de eliminación de las pruebas físicas del comunicado de la agencia estadounideses. Escribe Luis Mauri: "Casi dos meses después, el 26 de octubre, la Policía Nacional interceptó una furgoneta de los Mossos que transportaba decenas de cajas de documentos para quemar en la incineradora. La Audiencia Nacional reclamó los papeles y entre ellos apareció la nota original de la inteligencia de EEUU y un documento de uso interno de los Mossos que reproducía y apostillaba el mensaje que cinco meses antes había tecleado un agente estadounidense ajeno a la tormenta que su trabajo iba a desencadenar en Catalunya".



En El Confidencial añaden al expediente el viaje a Estados Unidos de tres mandos de los Mossos. La pieza es de Antonio Fernández: "El cúmulo de despropósitos en la prevención de atentados es solo superado por la capacidad de la Administración catalana de falsear la realidad. Según ha podido confirmar El Confidencial, el 12 de junio del año pasado, solo unos días después de recibir el aviso de los norteamericanos, Trapero envió a Washington a tres de sus hombres para recibir más detalles sobre los posibles atentados. A la capital norteamericana se desplazaron el comisario jefe de Información, Manel Castellví, el inspector Lluís Paradell y el sargento Daniel Canals. Los tres regresaron en el vuelo UA-140, que salió a las 17:45 del aeropuerto Dulles International de Washington, y aterrizaron en El Prat a las 7:45 del 16 de junio".



Continúa la pieza: "El relevante dato del viaje a los Estados Unidos de la cúpula de la Brigada de Información demuestra que no solo el Gobierno catalán tomó en consideración el aviso del mes de mayo sobre acciones terroristas en la Rambla sino que conoció de primera mano todos los detalles, contrariamente a lo que luego dijeron públicamente los responsables de la Generalitat. Además, se llevó a cabo una campaña en las redes sociales, en que el independentismo trata de criminalizar al Gobierno español y al CNI argumentando que el imán de Ripoll estaba a sueldo de los servicios de Inteligencia españoles, que la CIA había alertado a España de que se preparaba el atentado, que los Mossos no fueron avisados (la alerta de la CIA fue, precisamente, a los Mossos) y que el fin último de que se cometieran los atentados era provocar que el Ejército ocupase Cataluña y no permitir el referéndum del 1 de octubre. Una campaña, en resumen, de desinformación total, orientada a crear confusión, de manera similar a otras llevadas a cabo en los últimos años contra el Estado español, entre ellas la del más que sospechoso 'expolio fiscal'".



Ha fallecido a los 52 años el subdirector de ABC Manuel Erice, corresponsal del diario en Washington y autor del libro Trump, el triunfo del showman. Mayte Alcaraz escribe el obituario en el diario donde Erice volcó su vida.



13 de agosto, santoral: Casiano, Gertrudis, Hipólito mártir, Ponciano papa y Radegunda de Poitiers.