Nicolás Maduro y sus secuaces cabalgan a lomos de la mentira, que tendrá las piernas muy cortas, pero la porra larga. No hay vuelta atrás y lo de menos es la pulcritud formal en unas elecciones montadas para crear un parlamento paralelo que convierta al autócrata en tirano. No cuela. La compañía responsable del voto electrónico ha dejado en evidencia a los titanes de la democracia bolivariana, vulgares aprendices de los asesores de Podemos.



El periodista que destapó la enfermedad de Chávez que el régimen ocultó durante meses, Emili J. Blasco, es el autor de la crónica en el ABC sobre el monumental escándalo del pucherazo 2.0: "Smartmatic, la empresa encargada del voto electrónico en Venezuela, denunció este miércoles la manipulación de los resultados de las elecciones celebradas el pasado domingo. El consejero delegado de la compañía, Antonio Múgica, aseguró desde Londres que entre el recuento anunciado por el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el que registró el sistema (en Venezuela todo el voto es electrónico) hay una diferencia de "al menos un millón de votos". "Hubo manipulación de los datos en la elección de la Asamblea Constituyente", aseguró".



Sigue Blasco: "Smartmatic, empresa de origen venezolano y siempre cuestionada por haber crecido bajo el manto del chavismo, denunciaba así que el CNE se inventó la cifra de 8.089.320 electores. Es probable que quisiera superar los 7,68 millones de votantes que la oposición aseguró haber movilizado en su referéndum contra la Constituyente de dos semanas antes. Pero Smartmatic, como en elecciones anteriores, daba por buenos los votos registrados por el sistema, cuando todo indica que el chavismo aprovecha especialmente las últimas horas de la jornada electoral para producir votos falsos, operando ilegalmente las máquinas de votación".



Portada de 'El Mundo' del 3 de agosto de 2017

Portada de 'El Mundo' del 3 de agosto de 2017

La denuncia, se aclara en la información, viene dada cuando la veintena de técnicos de la compañía se han evaporado del país para evitarse molestias, represalias y las típicas inconveniencias que concurren en sitios donde el que manda presume de demócrata rodeado de fanáticos.



En el diario Público, la situación venezolana provoca gran desasosiego. La administración Trump sobrevuela el panorama del patio trasero con aviesas intenciones. Un texto de agencias advierte de las maquinaciones: "El secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, reveló en una rueda de prensa anoche (horario español) que las diversas agencias de inteligencia de Estados Unidos están estudiando la forma de obligar al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a abandonar el poder. En una frase de su larga conferencia de prensa que pasó desapercibida para muchos, porque trató de numerosos temas internacionales y de organización interna del Departamento de Estado, Tillerson afirmó: "Estamos evaluando todas nuestras opciones políticas para ver qué podemos hacer para crear un cambio de condiciones [en Venezuela] donde o bien Maduro decida que no tiene futuro y quiera marcharse por voluntad propia, o nosotros podamos hacer que el Gobierno [venezolano] vuelva a su Constitución". Es decir, que sean anuladas las elecciones a la Asamblea Constituyente y el presidente pierda el poder. "Pero estamos muy preocupados sobre lo que estamos viendo allá abajo", continuó Tillerson".



Como hay gente para todo y a cascoporro, un veterano socialista valenciano, Vicent Garcés, ha estado de observador en las constituyentes y sostiene en una entrevista en El Diario que el proceso ha sido impecable y que lo que pasa es que hay una "insurrección de la oligarquía".



Vida local. Tocar las pelotas a los turistas es tendencia. Arran, la facción acné de la CUP, está en la vanguardia del "activismo". En pocos años, los espantaguiris serán concejales y diputados que podrán presumir de haber dedicado los mejores años de su vida a una gran causa social, el exterminio de los camareros y la extinción del turismo.



Los borrokas originales del País Vasco observan con admiración la renovación de sus tácticas callejeras y se apuntan al carro, según la información de Josean Izarra en El Mundo: "La izquierda abertzale se ha sumado a la campaña radical contra el turismo y llevará al País Vasco las protestas y los boicots que se están produciendo en Cataluña y otros puntos. Ernai, las juventudes de la izquierda abertzale (Sortu), ha decidido realizar una campaña de protestas y sabotajes en San Sebastián, la capital vasca con mayor potencial turístico. Las calles de su Parte Vieja muestran carteles y pintadas con el mensaje Tourist, go home (Fuera turistas) e incluso invitando a «incinerar» a visitantes foráneos".



Continúa: "Además, la Ertzaintza investiga el sabotaje sufrido por un hotel situado en el barrio de Gross durante la celebración del último 1 de Mayo y las autoridades temen que los jóvenes radicales vuelvan a activar la kale borroka tras la celebración de una manifestación contra el turismo prevista para el próximo jueves 17 de agosto, en mitad de la Semana Grande donostiarra. "No es una coincidencia que los nacionalismos radicales interpreten la llegada de turistas como un ataque a sus esencias", lamentó ayer el teniente de diputado general de Guipúzcoa, Denis Itxaso. 



Para que a los turistas les quede clarito que no queremos su dinero, la huelga de seguridad en el aeropuerto de El Prat puede ser un argumento definitivo. Situaciones excepcionales, medidas desesperadas, aunque afecten a los indígenas de Barcelona que hacen interesantes viajes culturales a los callejones del sexo de Bangkok, las playas cubanas y los resorts mexicanos. Se recomienda hacer noche en la terminal para no perder el vuelo.



El proceso, bien. Lo típico de estas fechas. Por ejemplo, en Directe explican cómo se organiza un boicot a Naturhouse dando cuerda a un tuit de Xavier Sala Martín. Muy ilustrativo.



Una buena nueva. Cristina Sáez firma un texto en La Vanguardia sobre la posibilidad de modificar los embriones humanos para evitar los casos congénitos de muerte súbita: "El titular de la noticia ya se sabía desde hacía una semana, después de que un periodista freelance británico lo publicara en la revista Technology Review y medios de comunicación de todo el planeta se hicieran eco. Pero hoy finalmente Nature confirma lo que será, sin duda, uno de los hitos científicos del año y aporta todos los detalles de la investigación: un equipo internacional de científicos ha logrado modificar genéticamente embriones humanos con éxito. Utilizando la herramienta de edición genética CRISPR-Cas9 ha logrado librarlos de una mutación en un gen causante de una enfermedad cardíaca congénita. Y, a diferencia de intentos previos, esta vez sin introducir errores adicionales en su genoma".



3 de agosto, santoral: Lidia, Asprenio, Eufrosio y Gustavo.