Ahora resulta que hasta Francisco Correa, el jefe de la trama corrupta del PP, es de izquierdas, su primer mitin fue uno de La Pasionaria y trabajó para el PSOE hasta que se peleó con Julio Feo, el intendente mayor de Felipe González. Un gran tipo Correa, que entró en Génova de la mano de Luis Bárcenas y rompiendo los precios de la organización de eventos. Le llaman don Vito y ha empezado a tirar de una manta que elude con escrúpulo la época de Rajoy al timón del partido.
El diario Público tiene a bien recopilar las mejores frases de Correa en la sesión del jueves, en las que el acusado echó un montón de escombros sobre Bárcenas y cantó de plano. Su testimonio serviría para publicar un manual de la corrupción en España, métodos, prácticas y consejos sobre cómo cobrar, derivar, desviar, tapar y vivir de lujo, a lo grande, sin reparar en gastos, salvo en los mítines, que así de chungos le salen al PP.
La mordida era de entre el dos y el tres por ciento, igualico que en el caso de los Pujol y Convergència. En el diario La Información, Fernando H. Valls firma la crónica judicial de la que extraemos un par de párrafos: "Sobre Jesús Sepúlveda, exmarido de Ana Mato y exalcalde de Pozuelo de Alarcón, Correa ha reconocido que tuvo "atenciones": "Le regalé un coche", viajes, le envió para un cumpleaños de su hijo un payaso o un castillo hinchable... Regalos, ha dicho, que no le costaba apenas dinero. Sobre Alberto López Viejo, Correa ha reconocido también que le retribuyó con comisiones. También ha admitido dádivas a Jesús Merino".
Sigue: "Francisco Correa ha relatado ante el tribunal que se repartía comisiones con Luis Bárcenas procedentes de empresarios a los que se les cobraba comisiones del 2 ó 3%. "Yo me quedaba con una parte y otra se la daba a Luis Bárcenas". Ha reconocido que se hacía con varias empresas y que correspondían a adjudicaciones de autopistas o del AVE. Habla de que podría haber llevado 1.000 millones de pesetas a Génova. "Es una práctica habitual en el país, del sistema. Esto se ha hecho con muchos partidos". "Existen muchos Franciscos Correa", ha añadido".
Hay que tener cuajo. Claro, la sociedad es la culpable, como en la canción de Siniestro Total: "Señor comisario yo no he sido se lo juro/ que es la sociedad que no hay trabajo ni hay un duro/ mire señor juez no me cuelgue más marrones/ que yo voy de legal deme la condicional".
Le pegas una patada a un terrón de hierba y salen Correas como pitufillos. Ahí está la familia Pujol para demostrarlo. Esteban Urreiztieta aporta una nueva información en El Mundo sobre la historia interminable: "La Policía conecta por primera vez la fortuna familiar de los Pujol en Andorra con contratos públicos adjudicados por CiU. La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) concluye que una parte del botín oculto en el Principado procede de comisiones que pagó la empresa Euroenergo a cambio de llevarse la adjudicación del almacenaje de combustible en el Puerto de Tarragona".
Continúa: "En un nuevo informe al que ha tenido acceso El Mundo, los investigadores sostienen que Jordi Pujol Ferrusola «intermedió con su influencia» para que el alto cargo de CiU Lluís Badia Chancho otorgara en 1998 la concesión a esta empresa. La Udef ha encontrado un primer pago de nueve millones de pesetas en las cuentas familiares días después de la adjudicación y sigue el rastro de 22 millones desviados por Euroenergo a FCC porque sospecha que esconden sobornos a la familia que fueron luego abonados a través de una empresa pantalla en el Reino Unido".
No cabe un corrupto más, pero todo esto acabará por prescribir como prescrito parece el caso Gürtel en relación a la investidura. ¿O no? Juanma Romero e Isabel Morillo trazan una crónica en El Confidencial que describe la rueda de molino que se está comiendo Javier Fernández: "El camino del PSOE hacia la abstención se parece más a un calvario que a uno de rosas. A las resistencias internas, que preocupan y ocupan al presidente de la gestora, Javier Fernández, se añade el suma y sigue del endiablado panorama judicial para el PP. Y que Francisco Correa, cabecilla de la Gürtel, tirase de la manta y reconociera haber entregado dádivas a políticos del PP que daba al extesorero Luis Bárcenas para que las repartiera no podía pasar inadvertido en un PSOE fracturado y a tan solo 10 días de adoptar su decisión más delicada: facilitar o no el Gobierno a Mariano Rajoy".
El TSJC juzgará a Artur Mas, Joana Ortega e Irene Rigau. El juez instructor cree que no ha lugar acusarles de malversación, por lo que se libran de una petición de cárcel. Afrontan diez años de inhabilitación. Puigdemont avisa de que habrá respuesta. Así pues, a Arnaldo Otegi le tumban la candidatura y no pasa nada. En cambio, a Mas no lo puede inhabilitar más que la CUP. Cataluña, idílico pasado, cuando se iba a por setas y no a por rolex. Ahora, Puigdemont, alias Kokomotxo, Mas, alias el Astuto, y Homs, alias el señor Brown y el Metternich de Taradell, se dedican a amenazar a los jueces como si estuvieran de calimochos hasta arriba. Han pasado de Calimeros a Kalimeros. ¡Tiembla, Madrit!
Bob Dylan, premio nobel de Literatura. Es lo que hay. La academia sueca está porque se vendan discos en vez de libros. Dylan, sí. ¿A quién coño le importa la literatura? La literatura no existe. Ha muerto. Todo es literatura. Como reza la pintada, ella era poesía y él, un cuento. Para el Planeta suena Lluís Llach.
14 de octubre, santoral: Calixto I, Donaciano, Fortunato, Gaudencio y Lúpulo de Capua.