El Mundo: Bogotá envía tropas en busca de la reportera desaparecida
El País: La carta a Bruselas desmonta las promesas económicas de Rajoy
La Razón: Cataluña volverá a ir a elecciones si la CUP veta los presupuestos
Ara: El PP pagarà una fiança d'1,2 milions pel cas Bárcenas
El Periódico: El gasto social del Govern crecerá en 874 millones
El Punt Avui: 1.800 nens estrangers sols, atesos en cinc anys
La Vanguardia: La CUP irrita a Mas, mientras Junqueras tiende la mano
Al suelo, que vienen los nuestros. Aznar no se presenta a las elecciones del 26-J, pero está dispuesto a tener una cuota no menor de protagonismo, como si estuviera de vuelta a la política, esperando un gran batacazo para regresar al púlpito. A Rajoy le altera lo justo, acostumbrado como está a contemplar cómo los problemas se diluyen o se agrandan por su cuenta. La revelación de su carta a Juncker prometiendo más recortes tras los comicios es otra prueba de cargo contra el PP, igual que la fianza de 1,2 millones impuesta por la Audiencia Nacional ante el caso Bárcenas. Podría ser peor, cuentan que ha musitado Mariano.
En El País le muerden los tobillos a cuenta de la misiva a la Comisión Europea, lo que ha suscitado una bronca preelectoral de consideración. Anabel Díez y Francesco Manetto firman la noticia de las secuelas comunitarias: "La precampaña tomó el lunes derroteros inesperados al desvelar El País el compromiso de Rajoy con la Comisión Europea de efectuar nuevos recortes si sigue al frente del Gobierno. La oposición y los sindicatos consideran este hecho de extrema gravedad y contrario a las promesas electorales de Rajoy. “El PP debe someter a votación sus propuestas de recorte e incluirlas en su programa”, exige el PSOE, cuyo líder acusó ayer a Rajoy de “mentir sin pudor”. “¿Por qué se compromete con Bruselas si no sabe si gobernará?”, reprocha Ciudadanos. “Ese es su programa electoral oculto”, denuncia Unidos Podemos".
El fuego amigo viene en el ABC, en forma de tostón de opinión de Aznar que el diario monárquico resume en modo noticia: "El expresidente Aznar escribe este martes en la «Tercera» de ABC un agudo análisis sobre el peso del déficit público en la política nacional. En él, propone a aquellos partidos «que puedan formar parte de un gobierno razonable» tras el 26-J que alcancen un «pacto nacional de estabilidad y crecimiento». El actual problema fiscal, critica, es producto «de nuestra política o de la falta de ella». Recuerda Aznar que el compromiso de estabilidad no es sólo «ante Europa» sino también «ante nosotros», y tiene dimensión económica y política. También asegura que la disciplina presupuestaria «no es un obstáculo al crecimiento ni una limitación para las políticas de bienestar», como él demostró durante su gobierno 1996-2000".
Continúa el sondeo exploratorio sobre el "agudo" y picudo texto aznariano: "El expresidente es tajante al afirmar que un endeudamiento excesivo —como el que ahora soporta España— «constituye una restricción de soberanía indeseable y una quiebra inadmisible de la solidaridad entre generaciones». Advertencias que ya formuló la pasada semana en público, y que fueron recibidas con una respuesta oficial que el propio Aznar califica de «errada comparación» entre la primera legislatura de Rajoy y la primera que él mismo presidió. Un símil que además, insiste, resulta «inexacto y forzado» ya que él cumplió con el objetivo de déficit mientras que el Gobierno de Rajoy no lo ha hecho. Y encima durante su mandato «se bajaron los impuestos», remacha".
Menudo disgusto se va a llevar luego Rajoy cuando le resuman lo escrito por su antecesor. Joder, que tropa, suele parafrasear el presidente a Romanones cuando le vienen con las broncas de Esperanza Aguirre, Rita Barberá o del siempre constructivo Aznar.
Se dan por tanto las condiciones habituales en el PP para afrontar la campaña: desunión, marrones corruptos y tiritos en los pies. Nunca ha sido de otra manera y no es muy diferente a lo que pasa en el resto de los partidos. Ley de vida y ley de la selva.
Como prueba, Toni Bolaño da cuenta en un análisis en La Razón del tremendo carajal en el seno del Govern, en Junts pel Sí y entre todos y la CUP: "El Gobierno de la Generalitat ha reaccionado con frialdad a la decisión de la asamblea de la CUP de «librarse» del pacto que en su día se firmó para dar estabilidad al ejecutivo de Carles Puigdemont y dejar en la cuneta a Artur Mas. Una estabilidad que ahora parece peligrar y amenaza con romperse, y que, si se le suma a la hipótesis de que las cuentas catalanas no salgan adelante, todo apunta a una nueva llamada a las urnas en otoño. La cuarta en casi seis años... El primer obstáculo llega hoy, con el proyecto de presupuestos que presenta la Generalitat. Y a partir de ahí, los debates, las batallas...".
Junqueras dispone de 874 millones para satisfacer las pretensiones cuperas. Opera en contra del acuerdo el maximalismo antisistema, la división entre CDC y ERC y el gusto nacionalista por convocar elecciones cuando no toca.
Espeluznante noche de disturbios en el barrio de Gràcia. Los Mossos desalojaron una oficina bancaria okupada y se armó una revuelta juvenil en Mongolia tras una marcha de protesta. Coches volcados, contenedores cruzados, incendios y pelotazos. La CUP se ha quejado de los métodos policiales. En medio del desorden, la alcaldesa Colau ha salido en defensa de su tercer teniente de alcalde, Jaume Asens, que presionó a la abogada de la Guardia Urbana al efecto de que no pidiera prisión preventiva para el mantero que le abrió la cabeza a un agente. Es conocido que Asens le dijo a la letrada que el Ayuntamiento prefería una manifestación de guardias que de manteros.
Como aquí no dimite nadie, Asens sigue en el cargo al igual que enteroconseller Comín.
24 de mayo, santoral, María Auxiliadora, Sérvulo de Trieste, Simeón estilita el joven.