Ecos de un debate entre "el indecente" y el "chulo de barrio"
PP y PSOE sacan la artillería pesada después del cara a cara de perro entre Rajoy y Sánchez. Homenaje a Boadella en Madrid de "Libres e Iguales". Las Rodalies de Renfe y los robos de cobre
16 diciembre, 2015 08:34ABC: El estruendo electoral enmudece para despedir a "dos valientes españoles"
El Mundo: La bronca sitúa al PSOE y al PP en el foco de la campaña
El País: Rajoy pone a Ciudadanos ante el reto de pactar toda la legislatura
La Razón: Sólo el 4,7% de los seguidores del "Cara a cara" asegura que cambiará su voto
Ara: Els retards a Renfe encara duraran dies
El Punt Avui: El petroli ho té cru
El Periódico: Otra vez Rodalies
La Vanguardia: El bronco cara a cara aún deja más abierto el pulso PP-PSOE
Ganar un debate no es ganar unas elecciones, pero condiciona el tramo final de la campaña, los últimos días y horas de un combate a cara de perro flaco y apaleado. El candidato del PSOE, Pedro Sánchez, se ha revuelto contra los augurios y contra los críticos de su propio partido. Hay partido, titulaba hace un par de días El Periódico a la vista de las encuestas. Y habrá pacto o no habrá Gobierno, constata la portada de hoy de El País. El cabeza de lista del PP, Mariano Rajoy, no llegará a la mayoría y necesitará la muleta de los Ciudadanos de Albert Rivera, del que quiere un apoyo general, no puntual.
Enric Juliana, en La Vanguardia, recurre al cuadro de Goya "Duelo a garrotazos" para expresar la dureza entre Rajoy y Sánchez, o más bien del segundo contra el primero. Le llamó "indecente", cosa que el registrador pontevedrés no está dispuesto a aceptar. En El País, Anabel Díaz, entrevista al aspirante tras la batalla: "Pedro Sánchez Pérez-Castejón, (Madrid, 1972) no se arrepiente del tono ni del contenido empleado en su cara a cara de anteanoche con el presidente del Gobierno. “Tenía que desmontar las mentiras de Mariano Rajoy y poner voz a los millones de españoles que piensan que debía haber dimitido”, enfatiza.
Pregunta. ¿Era necesario ese tono bronco y agresivo en el debate con Mariano Rajoy?
Respuesta. No lo comparto. No fue un debate bronco. Creo que fue vibrante y yo tenía la necesidad de desmontar las mentiras de Rajoy. Mi intervención fue directa y se corresponde con un juicio muy severo sobre las graves responsabilidades políticas que comprometen al presidente del Gobierno tras más de seis años, con una catarata de casos de corrupción a cada cual más grave y en la que siempre aparece el PP.
P. ¿Sopesó usted las consecuencias de decir que el presidente del Gobierno no es una persona decente?
R. Sí, y pensé en un artículo del filósofo Emilio Lledó en el que decía que la decencia tenía que volver a las instituciones. Me inspiré en esa frase al decir que el presidente del Gobierno tenía que ser una persona decente... y Rajoy no lo es. Dije y puse voz a lo que piensan millones de españoles: que debía haber dimitido hace dos años cuando salieron los papeles de Bárcenas".
En la contraparte, el PP, y en El Mundo, Marisol Hernández y Luis Ángel Sanz firman la crónica del día después: "El cañón de luz de la campaña volvió a alumbrar al bipartidismo. Un día sólo para PP y PSOE, sin Ciudadanos y Podemos restándoles protagonismo. Los partidos de siempre otra vez como narradores únicos de la política española. Solos para recrear juntos la monumental bronca que Mariano Rajoy y Pedro Sánchez mantuvieron en su cara a cara. Los dos partidos prolongaron este martes el fuego cruzado. El candidato socialista no se retracta de nada, considera que su actuación del lunes por la noche ha movilizado a sus bases y presume de haberle dicho a Rajoy «lo que piensan millones de españoles». El PP cree que Sánchez ha convertido al presidente en una «víctima». Horas después del debate, el barro seguía salpicando a la campaña y los populares llamaban «chulo de barrio» al líder del PSOE. (...) Lo del insulto nos da cuerda», aseguraron fuentes del PP, que sostienen que Sánchez «metió la pata». (...) La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró que hizo un «ejercicio de macarrismo a la desesperada». El secretario de Estado de Relaciones en las Cortes, José Luis Ayllón, que es un «chulo de barrio». En este lodazal se mantuvo este martes la campaña".
En la contraparte, el PP, y en
Sin salir de El Mundo, Federico Jiménez Losantos se queja del bloqueo demoscópico: "Si lo que Rajoy quería al retrasar las elecciones hasta las vacaciones de Navidad era jorobarnos el turrón -sobre todo, por si lo perdía él- puede tener el justo castigo que merece su perversidad. El tabernario rifirrafe en que, por la inacción del tabernero, que ya aguaba el vino en tiempos de Tutankamon, se convirtió en el único debate que el presidente ha tenido a bien celebrar contra su rival más flojo, terminó justo a la misma hora, las 00.00 del martes, en que la infame Ley Electoral prohíbe la publicación de encuestas. Así que las elecciones más reñidas de la historia democrática, no sólo por el primero sino por el segundo, el tercero y el cuarto puestos, van a tener que dilucidarse prácticamente a oscuras, sin esa orientación que facilitan los sondeos y que llevan a un grupo pequeño pero a veces decisivo de votantes a inclinarse por una u otra opción. Es verdad que las estadísticas no son muy fiables, pero menos fiable es no tenerlas...".
En La Razón destilan optimismo respeto a la actuación de Rajoy y alegan que sólo el 4,7% de seguidores del cara a cara cambiará de voto en relación al macroevento televisivo. No es poca cosa cuando la teoría dice que los debates engordan el "share" de las teles pero no tienen grandes efectos electorales.
Hay vida más allá de las elecciones, como se encarga de demostrar Emilia Landaluce en la última página de El Mundo. Homenaje a Boadella de "Libres e Iguales": "En Adiós a Cataluña, Boadella escribe una de las frases más hermosas que he leído: «He necesitado 20 años para que ese simple gesto sea natural (...) reservar las mejores ostras al amor de tu vida». ¿Han leído alguna vez sentencia más delicada? El bufón caminaba frenético por las calles de París mientras operaban a corazón abierto a Dolors Caminal, su mujer. «La cabeza corría a ritmo de mi trote. Cada rincón provocaba analogías mentales con el lugar. El paso por el Pont Neuf incitaba los planes desesperados. Si mi amada no superaba la crisis, ¿cómo acabar más rápido?». El lunes, Libres e Iguales organizó un homenaje al dramaturgo catalán. Pocos he visto tan merecidos. Boadella encierra en sus huesecillos de pájaro un ingenio gigantesco, misterioso, capaz de la sátira descarnada pero también dispuesto a ofrecer, por amor, ostras y muerte. Cayetana Álvarez de Toledo, promotora del acto, dice que vivimos tiempos de una pésima calidad política. Tiene razón. El lunes, mientras se emitía el debate entre Rajoy y SnchZP, Boadella, Dolors, Arcadi Espada, Esperanza Aguirre, Nicolás Redondo, Leguina... cenaban en El pimiento verde cantando zarzuelas y tangos. Lo imagino como réquiem feliz de lo que se muere en España: la calidad. [También en el humor. En vez del Ubú, Daaalí, Pla o La Torna, tenemos Ocho apellidos catalanes]".
Por lo demás, caos en Cercanías, Rodalies de la Generalidad. Más robos de cobre.
16 de diciembre, santoral: Adela, Adón, Ageo Azarías, Beano, Everardo, Macario de Collesano y Santas Vírgenes mártires de África.