El Mundo: El TC liquida la resolución soberanista por al vía rápida
El País: Un 70% critica la ausencia de Rajoy del debate electoral
La Razón: El TC tumba la "desconexión" al ser más que una aspiración política
Ara: Més asfíxia
El Periódico: En manos de Rivera
El Punt Avui: TC ràpid, procés lent
La Vanguardia: El TC liquidará toda la declaración de ruptura
Cinco Días: Abengoa pide 800 millones
El Economista: Abengoa pone en riesgo pedidos por 1.700 millones en España
Expansión: Abengoa: Santander lidera la negociación de la quita
Coincidencia generalizada en el quiosco. El Tribunal Constitucional se lleva la palma con su rauda anulación de la declaración soberanista del Parlament del 9-N. Liquidar es el verbo. Según la información de El Mundo, que firman Manuel Marraco y Daniel G. Sastre: "El Tribunal Constitucional ha acordado ya anular la declaración independentista. Así se desprende de la reunión que el Pleno del Alto Tribunal mantuvo el martes por la mañana, en la que los magistrados coincidieron en que la resolución del Parlament choca frontalmente con la Carta Magna. La combinación de esa evidente inconstitucionalidad y del deseo del TC de despachar el asunto cuanto antes ha llevado a que el recurso se resuelva apenas tres semanas después de presentado. Todo un récord para el Constitucional".
Continúan: "La resolución definitiva se adoptará previsiblemente en la reunión del miércoles, cuando el Pleno vuelve a reunirse para que el magistrado ponente, Andrés Ollero, presente una propuesta de sentencia que reúna sus planteamientos iniciales y las observaciones aportadas ayer por otros magistrados, según explicaron fuentes del tribunal. Al final de ese encuentro, que arranca a las 11.00 horas, la llamada «Resolución 1/XI del Parlamento de Cataluña, sobre el inicio del proceso político en Cataluña como consecuencia de los resultados electorales del 27 de septiembre de 2015» se declarará inconstitucional y nula".
Así pues, no somos una república y dice Mas que no llegamos ni a autonomía. Vista la patética comparecencia de Andreu Mas-Colell, tal vez no alcancen ni la categoría bastante rasa de la Diputación de Barcelona. Qué ardor y qué racismo lingüístico. "Se lo diré en castellano para que me entiendan, paguen ya". Querido profesor, ya le entienden, hable usted con un calcetín en la boca, en catalán o en inglés. Se desconectan pero recurren al Supremo por las condiciones para el acceso al FLA, que no son otras que presentar las facturas para que no se gasten el dinero en el vino del proceso sino en las boticas y en los hospitales. Papelón el de Mas-Colell.
En clave procesal, El País da cuenta del zurriagazo de la Audiencia Nacional a dos ayuntamientos catalanes. Corre a cargo el texto de Pere Ríos: "La Audiencia Nacional ha abierto diligencias, a instancias de la fiscalía, contra los Ayuntamientos de La Seu d’Urgell, en Lleida, y Celrà, en Girona, por haber votado a favor de apoyar la declaración de independencia aprobada por los soberanistas en el Parlamento catalán el pasado 9 de noviembre y que fue suspendida posteriormente por el Tribunal Constitucional. Dos juzgados de la Audiencia Nacional han abierto diligencias contra los Ayuntamientos de La Seu d’Urgell (Lleida) y Celrà (Girona) para investigar si los miembros del pleno municipal cometieron delitos de rebelión, sedición y otros al aprobar una moción de apoyo a la resolución independentista del Parlament. Esa resolución fue suspendida por el Tribunal Constitucional. Las causas judiciales tienen su origen en los escritos de la fiscalía en los que “urge” a que se identifique a los ediles que adoptaron los acuerdos y reclama documentación. Las diligencias se abrieron en los juzgados centrales de instrucción 1 y 4 de la Audiencia Nacional a partir de los atestados que había realizado la Guardia Civil por la aprobación de sendas mociones en los plenos municipales de Celrà y La Seu d'Urgell".
Sedición y rebelión, poca broma. Y en la Audiencia Nacional nada menos.
En resumen: PP 98-102 escaños; PSOE,82-86; C's, 76-80; Podemos, 52-56; ERC, 9-11; Democràcia i Llibertat, 7-8; IU, 4-6 y otras fuerzas,11-15.
Rafa Julve, en el mismo diario, firma la nota sobre los resultados en Cataluña en la que destacan las valoraciones de los líderes: "Los populares siempre se aferran al voto oculto, pero esta vez les costará remontar. Su cabeza de cartel, Jorge Fernández Díaz, es el peor valorado por los entrevistados, que solo le dan una nota de 2,3. El que mejor puntuación obtiene es Rufián (4,6). Homs logra escalar al segundo puesto (4,2), aunque saca peor nota que el candidato de ERC entre los votantes de Junts pel Sí, y Domènech queda tercero (4), seguido de Duran (3,7), Chacón (3,6) y Girauta (3,2). En notoriedad, la aspirante socialista es la más conocida (97,3%), y el de En Comú Podem, el que menos (23,1%)".
Rufián el más valorado, como antaño David Fernàndez. ¿Qué nos pasa, doctor? Sea como fuere, el titular de portada del diario del grupo Z no deja lugar a dudas: "En manos de Rivera". Se ha convertido en el centro de todas las miradas. Ayer, en El Mundo, Arcadi Espada, razonaba en torno al éxito del líder naranja en un texto titulado "Gajos": Se preguntaba el periodista Iñaki Ellakuria, autor con José María Albert de Paco de Alternativa naranja, el último y notable libro sobre Ciudadanos, cuál era la razón de que aquel diputado al que tantas veces había visto vagando por el parlamento de Cataluña, en la más absoluta soledad política y mediática, estuviese ahora en condiciones de disputar al Partido Popular y al Partido Socialista la presidencia del Gobierno de España. La pregunta es pertinente y de respuesta múltiple. Hay que decir, obviamente, que Albert Rivera estuvo en el instante justo y en el lugar oportuno, y eso no fue nada fácil. Tuvo que vencer sus propias limitaciones, y la primera la juventud; tuvo que inutilizar el cerco higiénico al que le sometió el mainstream y tuvo que construir un partido, no ya de cero, sino de bajo cero. Pero eso le permitió estar, aun a modo de superviviente, cuando sucedieron tres cosas decisivas. La primera fue el desencadenamiento del delirio nacionalista. De pronto los españoles, catalanes o no, empezaron a valorar la claridad y la contundencia con que Ciudadanos había encarado el peor desafío a la democracia desde el 23 de febrero. Ese 80 por ciento de españoles que quieren que se respete su derecho a decidir sobre lo que deba ser su Estado, han visto en Ciudadanos (hasta ahora) un rigor y una garantía democrática frente al nacionalismo que no vieron nunca en el PP ni en el PSOE".
En El País, Pau Marí-Klose, profesor de Sociología en la Universidad de Zaragoza, e Ignacio Molina profesor de Ciencia Política en la Universidad Autónoma de Madrid, rubrican un artículo en el que desmontan el artefacto nacionalista. En uno de sus párrafos más destacados cuestionan el mantra de la mayoría partidaria de un referéndum: "Para empezar, puede en efecto dudarse del supuesto clamor por el “derecho a decidir”. Se suele repetir que un 80% de los catalanes querría ser consultado sobre su futuro. En realidad, esa evidencia demoscópica se deriva del sesgo simplificador que resulta de preguntar algo así como: “¿Prefiere usted ser tenido en cuenta o ninguneado?”. Sin embargo, cuando las encuestas son más sofisticadas y las posibles respuestas incluyen otras opciones como la negociación entre Gobiernos, entonces las posturas se matizan. Así ocurrió, por ejemplo, en el barómetro de GESOP (febrero 2014), donde solo un 49% se decantaba por el referéndum como solución; esto es, un número algo mayor, pero no muy alejado, de los que prefieren la independencia".
2 de diciembre, Bibiana, Adria, Anselmo, Aurelia, Constantino abad, Hababuc, Martana, Nono, Pimenio, Seguro y Silverio Papa.