Marlene Wind: “El independentismo tribal ha utilizado la violencia en Barcelona”

En enero de 2018, Marlene Wind se convirtió en el azote de Carles Puigdemont, a quien le sacó los colores en un acto en la Universidad de Copenhague con preguntas sobre los peligros del nacionalismo que nada gustaron al expresidente. Han pasado muchas cosas desde entonces, entre ellas la sentencia del Tribunal Supremo sobre el 1-O y el vandalismo radical que estos días arrasan las calles de las principales ciudades catalanas como respuesta.

De todo ello habla con Crónica Global esta profesora de Ciencias Políticas y directora del Centro de Política Europea de la Universidad de Copenhague.

-- En su libro La tribalización de Europa (Espasa) asegura que la independencia es un peligro para la democracia y una amenaza populista. ¿Sigue siendo así o cree que el proyecto de independencia ya ha fracasado?

-- Ciertamente sigo pensando que el separatismo es una especie de tribalismo, que excluye mediante campañas y, a veces, con violencia (como vemos en Barcelona en estos días) a aquellos que no son "verdaderos creyentes". Pero a veces la secesión puede ser la solución menos mala, por lo que depende de las circunstancias. Sin embargo, el separatismo es en general muy peligroso, en particular si quienes no están de acuerdo tiene miedo de hablar en contra. En mi opinión, los separatistas catalanes se han movido en una dirección radical y han tomado como rehenes a una gran mayoría que no está de acuerdo.

Radicales siembran el caos en Cataluña / EFE

-- Ya hay sentencia del Tribunal Supremo sobre el referéndum del 1-O. ¿Cuál creo que será la respuesta de los tribunales europeos?

-- El Tribunal de Estrasburgo ya han rechazado tres veces escuchar casos similares y creo que será lo mismo esta vez. Principalmente, porque este camino ha sido muy largo y cuidadoso, se han escuchado a más de 400 testigos. Además, la sentencia está muy matizada y enfatiza claramente que existe y siempre habrá derecho a hablar en una democracia pero no a rebelarse contra la Constitución.

-- ¿Se ha reencontrado con Puigdemont después de aquella jornada?

-- No. He oído que se ha entregado. Creo que esto es sabio, pero también temo que los separatistas intenten exprimir un nuevo rumbo con Puigdemont como líder.

-- Los partidos españoles ha optado por bajar la tensión ante el conflicto (PSOE) o endurecer el discurso (Ciudadanos). ¿Cuál es la mejor opción?

-- Creo que solo se alimentará la tensión y la causa separatista si el conflicto se intensifica. La mayoría en Cataluña está harta y cansada de este conflicto. Se sienten tanto españoles como catalanes y solo quieren vivir en paz. Las partes deberían hacer todo lo que esté en su poder para tratar de reducir los niveles de tensión, ya que una organización como el movimiento independentista catalán está condicionada por el conflicto y solo espera que continúe.

Marlene Wind junto a Carles Puigdemont en el acto celebrado en el Universidad de Copenhague en enero de 2018 / EFE

-- ¿Ve una salida al conflicto?

-- En este momento no lo veo, pero creo que los separatistas se han pegado un tiro en el pie al intensificar la violencia, bloquear los aeropuertos y convertir en un infierno la vida de los turistas y de todos los que solo quieren vivir en paz. Esperemos que la oposición unionista en Cataluña tenga menos miedo de hablar en contra de las tendencias totalitarias que actualmente influyen en la sociedad catalana. España no puede (y no debe) trabajar por la unidad continua por su cuenta: necesita el apoyo activo y vigilante de los catalanes que están a favor de España.

-- ¿Un nuevo referéndum legal acordado con España?

-- Si hubiera un referéndum legal y ganara el sí (lo cual dudo mucho), los ciudadanos de Cataluña perderían tanto su ciudadanía española como la de la Unión Europea, por lo que muy pocos optarían por este resultado, creo. Sería un resultado extremadamente malo para Cataluña, por lo que, de hecho, no debería dar miedo celebrar un referéndum. En el último sondeo de opinión que vi, el apoyo a la independencia se redujo al 35%, por lo que celebrar un referéndum legal podría ser una forma de cerrar la discusión de una vez por todas. Dudo que el movimiento independentista gane si la campaña de información que conduce a una votación fuera objetiva e informada.

-- ¿Qué piensan sus alumnos del conflicto catalán?

-- Cuando hablo con ellos sobre el separatismo y el tribalismo, están de acuerdo en que lo que Europa necesita ahora no son más guerras culturales, separatismo y fanatismo. Ya hemos tenido suficiente de eso.

-- ¿Está preparando un nuevo libro?

-- Mi libro sobre la tribalización saldrá en primavera en una versión actualizada más larga en inglés en Polity Press. Acabo de terminar el manuscrito. Espero con ansia debatir esos temas de forma amplia con una audiencia internacional en primavera y verano.