Momentos de tensión en la sesión de control al Govern cuando ha tomado la palabra el diputado de la CUP Xavier Pellicer para, visiblemente alterado, reprochar a la consellera de Interior Núria Parlon la actuación de los Mossos d'Esquadra durante las manifestaciones propalestinas celebradas en Barcelona, concretamente la del pasado miércoles 15 de octubre.
El anticapitalista, presente en las marchas como se ha esmerado en recordar, ha denunciado la "brutalidad policial" subiendo el tono contra un Govern al que ha acusado de tener "muy poca vergüenza" para "tolerar que se fumigue a los manifestantes, sentados en el suelo", y pidiendo al ejecutivo la prohibición del uso del gas pimienta por parte de los cuerpos policiales.
Parlon ha defendido a los Mossos asegurando que se garantizó el derecho de protesta, celebrando que en su mayoría fueran de carácter pacífico, pero matizando que "hay determinadas personas que tienen un comportamiento violento".
"Cuando se tiran artefactos, se invade la línea policial, se pone en riesgo establecimiento y comercios con personas dentro, los Mossos, con el uso de la fuerza proporcional, minimizan daños", ha añadido la consellera de Interior. "Hable con los agentes de la BRIMO", le ha dicho, asimismo, al diputado de la CUP: "Nosotros no controlamos políticamente a la policía, se toman decisiones profesionales de acuerdo a criterios técnicos y protocolos que permiten utilizar la minima fuerza posible".
