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La Conferencia de Presidentes prevista para este viernes en Barcelona corre el riesgo de suspenderse, pues los dirigentes autonómicos del PP amenazan con plantar al Gobierno de Pedro Sánchez si no incluye en la agenda los temas que los populares han puesto encima de la mesa, entre ellos el modelo de financiación.

Alegan que el presidente "incumple" al no incorporar, por ahora, las "inquietudes" de su formación. Esto podría cambiar --de hecho, es lo que pretende la presión--, pero la polémica está servida y la suspensión del encuentro es, en estos momentos, una opción.

"Sería lamentable"

El Govern, en palabras de la consellera y portavoz Sílvia Paneque, ha sido muy crítico con esta cuestión. En tanto que anfitrión de la cita, el ejecutivo catalán ha pedido "responsabilidad" a las regiones gobernadas por el PP, entre otras, Madrid, Andalucía y Comunidad Valenciana.

Paneque ha asegurado que "sería lamentable" que decidiesen 'plantar' al presidente de la Generalitat, Salvador Illa, al resto de líderes socialistas y al lehendakari Imanol Pradales. La consejera ha puesto el foco en Isabel Díaz Ayuso y su presunto afán de "politizar" un encuentro planteado "en positivo".

"Pronto" para debatir sobre el concierto

Desde el Ejecutivo autonómico temen que los populares aprovechen la cita para achacar tanto a Sánchez como a Illa un modelo de financiación singular para Cataluña que consideran "injusto" respecto al resto de autonomías.

El Govern piensa que "es pronto" para debatir sobre el concierto económico, que estará listo a finales de mes, pero todavía está inmerso en complejas negociaciones, y añade que "no va en contra de nadie" y que, en cualquier caso, "no hay inconveniente en explicarlo".

"Desprecio" a la institución

"Uno puede ir a la conferencia de presidentes a mostrar discrepancias, pero no venir sería un desprecio absoluto a la institución", ha concluido Paneque, asimismo prudente con que "quedan todavía unos días".

Desde el Ejecutivo catalán, por otra parte, temen que la orden del día no sea el motivo real del plantón con el que amenazan los populares, que el próximo domingo organizan una manifestación en Madrid contra Sánchez y creen que "la foto" podría restarles credibilidad.