El expresidente catalán huido, Carles Puigdemont, ha perdido hoy los estribos con el sondeo de Centro de Estudios d'Opinió (CEO) que apunta a que su partido, Junts, sufriría un descalabro frente a Aliança Catalana. El ex jefe del Ejecutivo ha tildado de "propaganda" la encuesta, que también ha visto "intervenida", "carente" y un derroche de "dinero público".
Lo ha dicho Puigdemont en un extenso post en su cuenta de X --antes Twitter--, donde ha considerado que el CEO "se ha convertido en una herramienta de propaganda política".
Bajo su punto de vista, la cata demoscópica carece de "rigor" y está "intervenida" como lo estuvieron las previas a las últimas elecciones autonómicas para "engordar las opciones de unos [Aliança] y frenar las de otros [Junts]".