La presidenta de la Cámara de Tarragona, Laura Roigé, ha advertido de que la intención del Gobierno de hacer permanente el impuesto a las energéticas tiene "consecuencias que ponen en riesgo" la supervivencia del complejo industrial de Repsol y el sector petroquímico de Tarragona.
La entidad apunta en un comunicado que la conversión del gravamen en definitivo "implicaría, de entrada, la pérdida de centenares de millones de euros en inversiones y de decenas de miles de empleos".
Roigé también ha apuntado que "es precisamente de estos beneficios de donde deben salir los recursos" para la descarbonización del sector, por lo el impuesto desincentiva la transformación y favorece la deslocalización.
Pide "responsabilidad" al Gobierno
La Cámara tarraconense reclama "responsabilidad y rigor" al Gobierno, destacando la importancia de esta industria en Tarragona.
Ha criticado que es un gravamen adicional, tras destacar que las energéticas ya tributan por sus beneficios a través del impuesto de sociedades.