"La mayor cacicada de los últimos 45 años en España". Con estas palabras ha calificado el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, la amnistía para los encausados del procés aprobada en el Congreso por el PSOE, Sumar y sus socios secesionistas. El líder de los populares ha acusado a los socialistas de estar fuera del constitucionalismo por sus continuas cesiones y alianzas con partidos como ERC y Junts. Una crítica pronunciada durante el acto de presentación en Barcelona de los candidatos del PPC en las elecciones catalanas del próximo 12 de mayo, en el cual sus dirigentes se han presentado como la "única" opción constitucionalista frente al secesionismo gobernante en la autonomía y un PSC que "compadrea" con éste.
Así lo han expresado tanto Feijóo como el candidato del Partido Popular de Cataluña (PPC) a presidir la Generalitat, Alejandro Fernández. Según el número uno de la lista por Barcelona, estas autonómicas son la oportunidad de "acabar con el procés y con el sanchismo, todo a la vez". Y en términos similares se han expresado también el resto de cabezas de lista: Pere Lluís Huguet (Tarragona), Jaume Veray (Girona) y Montserrat Berenguer (Lleida).
Acabar con el 'procés' y el "infierno fiscal" catalán
Feijóo ha aprovechado su intervención para asegurar que el PP bajará el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) desde el 1 de enero de 2024, y con efecto retroactivo, si gana las próximas elecciones generales y llega al Gobierno.
En este sentido, los dirigentes populares han coincidido en denunciar, entre otras cuestiones, la elevada presión fiscal de la Generalitat a los contribuyentes de Cataluña: "No me resigno a que los catalanes sean los que paguen más impuestos de España. Cuando veo la decena de impuestos autonómicos que no existen en el resto del país, la presión fiscal que soporta el pueblo catalán, no puedo aceptar que este sea el modelo", ha manifestado Feijóo.
Según el líder del PP, el modelo debería el contrario, y ha defendido que Cataluña sea una tierra rica que genere inversión y confianza, donde "ninguna empresa se vaya de ella, como ha pasado, sino que lleguen miles".
Ven al PSC fuera de la Constitución
Feijóo y los candidatos populares han puesto énfasis en la idea de poner fin al procés. Algo que, a su juicio, no hará un PSC que "compadrea" con el independentismo. "Tenemos la responsabilidad de ser la alternativa a ERC, Junts y el PSC", ha manifestado el primero, recordando que los votos al PP "no van a servir para el referéndum, ni para el procés. Nuestros votos se ponen al servicio de las personas, familias y trabajadores de Cataluña". "Quien quiera independencia y procés, que vote a ERC, Junts y PSC. Quien quiera libertad, que vote al PPC", ha añadido.
Según Feijóo, "no hay ningún partido que gobierne con más independentistas que el PSC. Les vale todo, y les da igual A que B, defender la Constitución o criticarla, rechazar la amnistía y luego abrazarla. Les da igual todo, salvo el poder". "Sin el independentismo, Sánchez no es nadie. Y sin Sánchez, el independentismo aún es menos", ha resumido.
"No me resigno a pensar que a los agricultores y ganaderos catalanes les importe más la amnistía que la sequía. Ni que la amnistía preocupe más a los vecinos la okupación. Ni si ERC o Junts presionan más a Sánchez que tener una vivienda en el futuro. No me lo creo. Ni que les interesen más las embajadas de la Generalitat que la educación de sus hijos", ha proclamado Feijóo, quien ha acusado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de haber creado una deuda de 400.000 millones de euros desde que gobierna.
Críticas a la gestión de la Generalitat
Las críticas a la deficiente gestión de la Generalitat de Cataluña en cuestiones como la sequía, la sanidad o la educación han centrado buena parte de las intervenciones de Feijóo como del candidato popular a la Generalitat, Alejandro Fernández, según el cual "el tiempo nos ha dado la razón: el procés era una estafa, una ruina y la decadencia".
Fernández ha lamentado la "década" de mandato de los dirigentes secesionistas, y se ha comprometido a revertirla si el PP gana las elecciones. Según ha dicho, su objetivo es "contradecir a quienes dicen que Cataluña no tiene remedio. No hay que resignarse con tener los peores datos de calidad educativa de la Europa occidental. Ni tampoco a que, a causa de la mala gestión hídrica del Govern en la última década, llegue el momento de que "no salga agua del grifo", ni "a tener el 42% de las okupaciones de toda España", lo que según él ha convertido a Cataluña en "el paraíso europeo de los okupas". No tampoco resignarse a ser un "infierno fiscal" ni a "perder el liderazgo económico".
Según Fernández, el PP ha demostrado donde gobierna que "se pueden bajar los impuestos", pues "así se puede mejorar la actividad económica, recaudar más y, por lo tanto, proteger y mejorar los servicios sociales".
"Abandono de la Generalitat"
Los cabezas de lista del PP en Girona, Lleida y Tarragona, Jaume Veray, Montserrat Berenguer y Pere Lluís Huguet respectivamente, han defendido que quieren llevar la voz de sus provincias al Parlament, y han criticado el abandono tanto de la Generalitat como del Gobierno en sus respectivos territorios.
Veray, por ejemplo, ha lamentado que Girona "sigue siendo la provincia de Cataluña con más barracones escolares", y que sufre grandes listas de espera en la sanidad. Y ha lamentado que "Cataluña ha perdido 10 años con el procés".
Berenguer ha dicho que el objetivo del PP es la estabilidad, "lejos de la confrontación y de la crispación". Y ha apostado por un futuro fuerte, oportunidades y voz propia para Lleida.
Huguet ha criticado que el procés "ha llevado a que la Generalitat haya abandonado Tarragona". Y ha prometido que el PP trabajará desde el Parlament para que la provincia vuelva a ser uno de los motores económicos de Cataluña y de toda España.