La secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha sacado pecho este sábado del continuado chantaje de su partido al PSOE en el último mandato y da por "descontada" la amnistía si se reedita el llamado Gobierno de coalición, para lo que Pedro Sánchez necesita los apoyos de los republicanos y de Junts. Sin embargo, Rovira ha dicho que venderán caros sus síes.
Lo ha dejado muy claro en el consejo nacional de ERC, donde ha recordado que la "vía" del diálogo con el Gobierno que abrió ERC hace tres años está "vigente". "Siempre hemos considerado que en el centro de la agenda política debía haber esta mesa de negociación que debía conducirnos a la resolución del conflicto político, al fin de la represión y a acordar un referéndum inevitable", ha afirmado.
No va "del todo bien"
Acto seguido, Rovira ha asegurado que "ERC solo permitirá que comience una nueva legislatura española si el Gobierno pone en el centro de la agenda política el proceso de negociación del conflicto político", aunque, ha reconocido, este diálogo no va "del todo bien" ahora mismo.
"Damos por descontada una amnistía que debe poner fin a la asimetría, a la desigualdad en esta negociación", ha declarado, al tiempo que ha deslizado que esta amnistía ya la puso ERC como condición para apoyar la constitución de la Mesa del Congreso.
Indultos, sedición, malversación... ¿amnistía?
"Para nosotros era imprescindible tener el compromiso firme y firmado del PSOE y de Sumar de poner fin a la represión política, lo que ellos llaman la desjudicialización, por todas las vías legales necesarias. Y ERC entiende incluida, asumida y da por descontada una ley de amnistía que solo falta acabar de concretar", ha presumido.
"Hemos logrado la liberación de los presos políticos, la reforma del Código Penal con la eliminación de la sedición y la reforma del delito de malversación", ha continuado Rovira, para quien la amnistía es el siguiente paso en este "camino de la negociación".
Mensaje a Junts
Aunque no lo ha dicho de forma explícita, las constantes referencias a la "negociación" son también un mensaje para Junts, pues los herederos de Convergència, cuyos votos también son cruciales para investir a Sánchez, optan ahora por sentarse a hablar con el PSOE y Sumar, cuando hasta ahora lo apostaban todo al enfrentamiento y a la unilateralidad y afeaban a ERC su vuelta a un cierto autonomismo.
Sea como sea, Rovira ha comentado que "ERC no se quiere encontrar en una negociación de último minuto, con concesiones de última hora con finalidades claramente partidistas". Por eso, los republicanos quieren garantías de que la "negociación" seguirá en el centro de la agenda política, así como que se abordará "el fin de la represión" y se avanzará hacia un "referéndum" pactado.
Desde Suiza
Rovira ha comparecido ante el consejo nacional de ERC de manera telemática, pues huyó a Suiza en 2018 tras plantar al Tribunal Supremo, que iba a comunicarle que sería procesada por rebelión en el marco del procés, lo que podría llevarla a la cárcel.
Sin embargo, tras la eliminación de la sedición del Código Penal, ahora solo se la acusa de desobediencia, y lo máximo a lo que se enfrenta es a una inhabilitación. Pero no parece dispuesta a regresar.