Un municipio del Pirineo de Lleida podría tener como concejal en la próxima legislatura a uno de los altos cargos más relevantes del Estado. Se trata de Saül Garreta Puig, en la actualidad presidente de la Autoridad Portuaria de Tarragona, que a pesar de su responsabilidad en el puerto de esta ciudad, se presentará en las elecciones locales de este domingo como número dos de la lista de ERC en Montferrer i Castellbó.
Garreta gobierna el Puerto de Tarragona desde el pasado noviembre, cuando los republicanos le eligieron para reemplazar a su antecesor, Josep Maria Cruset, días después de la marcha de Junts per Catalunya del Govern catalán.
Perfil político
Arquitecto de profesión, Garreta tiene a su vez un marcado perfil político, pues milita en ERC desde 2020 y, ya en 2015, se presentó con esta misma formación secesionista en otras elecciones municipales: concretamente como número 16 de la lista de Pau Ricomà, el actual alcalde de Tarragona.
Tras ser nombrado al frente del puerto a finales del año pasado, Garreta explicó a la prensa que no se lo esperaba, y se definió como un “activista y empresario que ve esta oportunidad como una manera de servir a la comunidad”. Al parecer, el partido con el que simpatiza pensó en él, en parte, por ser natural de Tarragona y por sus conocimientos en materia urbanística, dado que esta infraestructura tiene previsto crecer en los últimos años.
Sueldo de 100.000 euros al año
Gracias a su cargo como presidente de la Autoridad Portuaria de Tarragona, Garreta percibe en la actualidad un salario anual de 100.592 euros, tal como se desprende de las retribuciones previstas para su antecesor en 2022: 78.869 fijos y otros 21.723 variables, según datos de Puertos del Estado.
A partir del próximo lunes, Saül Garreta podría añadir otro cargo más a sus espaldas, dado que a pesar de su responsabilidad se presenta como número dos de ERC en Montferrer i Castellbó. Así consta en la proclamación de candidaturas del Boletín Oficial de la Provincia de Lleida del pasado 2 de mayo en el caso de este municipio cercano a La Seu d’Urgell y a Andorra con algo más de un millar de habitantes.
Sólo un concejal en las pasadas municipales
El alto cargo del Puerto de Tarragona tiene posibilidades de salir elegido, aunque también de no serlo, puesto que en las municipales de 2019 ERC sólo obtuvo un concejal en esta localidad. En aquella ocasión, la formación más votada fue, de largo, Junts per Catalunya, con más de un 65% de los votos y siete ediles, seguida por los republicanos (18,4% de los votos) y CxMC-CP, con un 13,5% y otro concejal.
Sea como fuere, Garreta no duda en hacer campaña estos días a favor de su lista electoral a través de sus redes sociales, con mensajes como este: “Queremos un Montferrer y Castellbó para todos. Que priorice la mejora de la calidad de vida y bienestar de sus habitantes, atendiendo a las necesidades ambientales, sociales, culturales y económicas”. Consignas políticas que, en el caso de su perfil personal en Twitter, alterna con tuits en los que se difunde la actividad del Puerto de Tarragona.
Vínculos con el Pirineo
El directivo, que con anterioridad fue gerente del despacho de arquitectura y urbanismo Garreta Arquitectos SL, tiene estrechos vínculos con la comarca del Alt Urgell, pues al mismo tiempo es presidente de Reviure Solanell, una cooperativa que ha contribuido a recuperar este último pueblo pirenaico.
Como presidente del Port de Tarragona, Garreta es vicepresidente del primer clúster químico del sur de Europa (ChemMed), vocal del consejo de administración de la Agrupación para la Promoción del Port de Tarragona (APPORTT), vocal de la asociación Barcelona Cataluña Centro Logístico (BCCL) y presidente del Centro de Estudios Marítimos del Port de Tarragona (CEMAPT). También es miembro de las organizaciones portuarias internacionales MEDPorts Association y Mediterranean Puertos Community.
Posible incompatibilidad con la LOREG
El activismo de Garreta en las elecciones municipales no es único, pues en el pasado otros presidentes portuarios del resto de España también decidieron dar el paso a la política municipal, dando lugar con ello a la controversia. El pasado febrero, por ejemplo, el PSOE de Vigo instó a dimitir al presidente del puerto de esta ciudad gallega, Jesús Vázquez Almuiña, tras decidir presentarse a las elecciones a la alcaldía de Baiona.
El secretario general del PSdeG-PSOE de Vigo, Carlos López Font, aseguró que Almuiña está afectado por el artículo 6.3 b) de la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (LOREG), por el que se regulan las causas de “inelegibilidad”.
Dicho artículo estipula que "durante su mandato, no serán elegibles por las circunscripciones electorales", entre otros, "los presidentes, directores y cargos asimilados de entidades autónomas de competencia territorial limitada, así como los delegados del Gobierno en las mismas".
Los precedentes de Melilla y de Abel Caballero en Vigo
López Font aludió además a una resolución de la Junta Electoral General del año 2015, según la cual el presidente de la Autoridad Portuaria de Melilla debía dimitir para presentarse a las elecciones municipales de 2019. Según este órgano, las autoridades portuarias encajan en las citadas "entidades autónomas de competencia territorial limitada", por lo que a su juicio no sería posible estar al frente de este tipo de organismos mientras se hace campaña electoral.
Una década antes, se dio una situación similar con el actual alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, que en 2007 se presentó a los comicios cuando era presidente del puerto de la ciudad. En su caso, no obstante, acabó dimitiendo de este último cargo.