Me gusta Marc Aloy
'Lo que me gusta de Marc Aloy', por Andrea Rodés
Me gusta que Marc Aloy tenga una sección de vídeos en su Instagram titulada Cuinetes: recetas cocinadas durante el confinamiento con productos Km0 de proveedores de Manresa: flan de huevo sepia con patatas, garbanzos con pulpo... se nota que a Aloy le gusta ponerse el delantal y pasar tiempo en la cocina. Un hombre como Dios manda.
Me gusta que entre foto y foto de campaña publique un selfie junto a un buen amigo de sus tiempos en Barcelona. “Han pasado dos años y medio sin darnos cuenta. Pero las buenas amistades siempre perduran”. Estoy de acuerdo con él, aunque también hay que cuidarlas.
Me encanta que Aloy se haga selfies. El más llamativo es el que se hizo con Shakira después de toparse con ella en un supermercado de Manresa. “Cosas insólitas que te ocurren siendo alcalde”, escribe. Después le da las gracias por haber elegido Manresa para grabar el videoclip de Monotonía y ayudado a proyectar su ciudad al mundo. Lo mejor de todo, sin embargo, el comentario de una seguidora del alcalde en Instagram: “Elige Manresa por ser conocida como la ciudad con más infidelidades de España”.
No me gusta Marc Aloy
'Lo que no me gusta de Marc Aloy', por Joaquín Romero
Marc Aloy ha sido alcalde de Manresa algo más de la mitad de la legislatura gracias al pacto sellado entre su partido, ERC y Junts después de que en 2019 empataran en concejales y casi en votos. La fragmentación posterior de los neoconvergentes le podría facilitar la victoria el día 28 y presidir el equipo de gobierno municipal, aunque en coalición y con los mismos socios.
La sostenibilidad ha sido la bandera de sus dos años largos de gestión, en los que ha presumido de cosas como disponer de autobuses eléctricos. Sorprende, sin embargo, que él mismo utilice un Seat Ibiza adquirido en 2014, no se sabe si de primera mano. Un sueldo anual de 63.000 euros da para conducir un coche menos contaminante.
Tampoco me gusta que los graves problemas de okupación e inseguridad que han estallado durante los últimos años en Manresa no ocupen el primer lugar en su programa.