Núria de Gispert, expresidenta del Parlament de Cataluña y actual portavoz de Demòcrates, ha asegurado que en la época en la que Laura Borràs fraccionó --presuntamente-- un total de 18 contratos públicos por un importe de 259.863 euros para adjudicárselos a su amigo Isaías Herrero, "todo el mundo" en la administración, "lo hacía".
"Me consta que en aquella época todo el mundo fraccionaba contratos para no tener que sacarlos a concurso público. A veces tenía explicación y otras no, pero se hacía", ha asegurado la que fue consellera de Justicia y de Gobernación durante los mandatos de CiU este lunes en su intervención el programa Cafè d'Idees de La2
"Persecución política"
Gispert ha afirmado que en aquella época se trataba de una "práctica habitual" y ha criticado que la justicia solo esté persiguiendo a Borràs y ha tildado de "persecución política" el proceso judicial abierto contra la presidenta de Junts.
Asimismo, ha asegurado que ella no habría votado a favor de la suspensión de Borràs ya que "la presunción de inocencia es lo primero que se debería tener en cuenta". También ha destacado que, en el caso de que fuese absuelta del caso, sería un "doble castigo" sacarla de la presidencia del Parlament.
Continúa el juicio a Borràs
El juicio a la presidenta suspendida del Parlament de Cataluña por presuntamente fraccionar 18 contratos cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC) seguirá este lunes, cuando está prevista su declaración.
La jornada en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) empezará con una prueba pericial informática con agentes de la Guardia Civil y dos peritos contratados por la defensa. Después será el turno del interrogatorio a Borràs. La fiscalía pide para Laura Borràs seis años de prisión y 21 de inhabilitación por los delitos de prevaricación y falsedad documental, comúnmente conocido como corrupción.