Porrazos en la manifestación contra la cumbre hispano-francesa: dos heridos leves

La manifestación convocada por la ANC, Òmnium y Consell per la República Catalana ha continuado su curso desde el Consulado General de Francia hasta la plaza de Sant Jaume, donde los independentistas se han concentrado frente al Palau de la Generalitat. Los antidisturbios de los Mossos d'Esquadra han intentado cortar el paso a los manifestantes para evitar que la marcha transcurriese por la plaza de Urquinaona, donde los CDR han protagonizado importantes disturbios en el pasado, y por la Via Laietana, donde se encuentra la Jefatura Superior de la Policía Nacional, blanco de los radicales durante las protestas independentistas y que hoy estaba blindada por los agentes. Aquellos que han intentado saltarse el cordón policial de la Ronda de Sant Pere han recibido golpes de los agentes de la Brigada Móvil de la policía autonómica. Uno de los manifestantes que ha recibido un porrazo ha sido el vicepresidente de la ANC, Jordi Pesarrodona.

Manifestación independentista por la Cumbre Hispano Francesa en Plaza Cataluña / LUÍS MIGUEL AÑÓN (CG)

Los sanitarios voluntarios que acompañan a la marcha han atendido in situ a dos personas con heridas leves por contusiones. Uno de los sanitarios ha explicado a este medio que los Mossos d'Esquadra "le han dejado las marcas de las porras" en brazos y piernas a una mujer. Después de este pequeño incidente, los manifestantes han continuado el recorrido hasta la plaza de Sant Jaume, donde han hecho una pitada frente al Palau de la Generalitat y han pedido el retorno del expresident de la Generalitat fugado Carles Puigdemont. 

Los Mossos blindan el Palau

Los gritos de Aragonès, traidor, han sido constantes durante la mañana de este jueves, dado que un sector del independentismo afea al Govern que el president de la Generalitat haya asistido a la cumbre hispano-francesa. La manifestación, que ha congregado a unas 6.500 personas según la Guardia Urbana de Barcelona y a 30.000 según los organizadores, se ha desinflado y ha terminado en la plaza de Sant Jaume, blindada en sus accesos por los antidisturbios de Mossos d'Esquadra.