El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha cargado contra Laura Borràs por su última polémica. Ha acusado a la presidenta de Junts de contratar a "un asesino confeso" para su defensa en el caso de corrupción por el que deberá declarar por su etapa al frente de la Institució de les Lletres Catalanes (ILC). Se trata de Emilio Hellín --ahora Luis Enrique--, a quien la posconvergente ha fichado para que le redacte el informe pericial. "Que se sepa", ha expresado el republicano.
Y es que Borràs ha elegido a un integrante de la ultraderechista Fuerza Nueva, condenado en 1980 por el secuestro, tortura y asesinato de la joven Yolanda González el 1 de febrero de 1980. La decisión ha suscitado las críticas de sus exsocios republicanos. "Tenía 19 años y era comunista. Emilio Hellín, uno de sus asesinos confesos, fue instructor de la Policía Nacional de 2006 a 2011 y hoy participa en la defensa de Laura Borràs. Que se sepa", ha manifestado en las redes sociales.
La trayectoria de Hellín
Según ha avanzado el Diario este jueves, la Fiscalía se ha echado las manos a la cabeza tras conocer este fichaje, por lo que ha pedido al juez que lo expulse de la investigación. “Quien ha transgredido la ley y el derecho de esta forma no puede ser considerado como cooperador válido en ningún acto o efecto de la Justicia”.
Cabe recordar que Hellín fue condenado a 43 años de cárcel por la Audiencia Nacional en 1982 por disparar a la joven militante del Partido Socialista de los Trabajadores, bajo el pretexto erróneo de que era miembro de la banda ETA. En 1987 se fugó a Paraguay aprovechando un permiso penitenciario, pero la Interpol lo acabó deteniendo y fue entregado a España, donde ingresó de nuevo en prisión durante seis años.
En 1995 obtuvo el tercer grado y, un año más tarde, formalizó ante el Registro Civil el cambio de nombre pasando a llamarse Luis Enrique. En ese momento empezó a trabajar como perito judicial experto en análisis informático.
Anular las pruebas que incriminan a Borràs
No es el primer caso en el que Hellín está involucrado. De hecho, según su currículum ha formado parte del caso Malaya de corrupción en Marbella, el caso Bretón de asesinato de dos niños en Córdoba o el caso Villarejo. También impartió cursos forenses para los Mossos d'Esquadra, Policía Nacional, Guardia Civil, Ertzaintza y cuerpos de Perú, Venezuela o Marruecos.
¿Pero qué busca? Anular las pruebas que incriminan a Borràs. Es decir, los correos electrónicos que la policía catalana obtuvo de los ordenadores de Isaías H., otro de los acusados del caso Borràs.
Por su parte, la Fiscalía avisa de que las pruebas científicas periciales auxilian a los tribunales, por lo que las personas deben tener una titulación adecuada y deben ser adecuadas, teniendo en cuenta sus "antecedentes y la calidad del trabajo realizado". “En definitiva, adquirir el convencimiento de que la persona que transmite los conocimientos es apta para realizarlo tanto por su trayectoria profesional como personal”, añade el documento al que ha accedido ese medio.