Renace el caso Pegasus. Lo hace el mismo día que ha trascendido el borrador de un informe del Parlamento Europeo que ha dado un toque de atención al Gobierno y, en concreto, al Centro de Inteligencia Nacional (CNI), a quien acusa de ser poco transparente, dando por hecho que 65 dirigentes independentistas fueron espiados a través de ese software. El documento ha servido para que el Govern se victimice de nuevo y reactive sus críticas hacia el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
De hecho, el gobierno autonómico podría utilizar las advertencias de la Eurocámara para forzar las negociaciones con el presidente y presionar con la rebaja del delito de la sedición en la próxima reunión de la mesa de diálogo, que todavía no tiene fecha. "Es evidente que el Govern no renunciará nunca al diálogo, a la negociación y a la vía política y democrática para la resolución del conflicto".
En manos de la Audiencia Nacional
La portavoz del gobierno autonómico, Patrícia Plaja, se ha felicitado por el informe y ha advertido de que su gobierno llegará "hasta el fondo de la cuestión". Cabe recordar que el president Pere Aragonès presentó una querella ante el Juzgado de Instrucción número 29 de Barcelona que ha sido elevada a la Audiencia Nacional, donde la Generalitat se presentará como acusación particular.
Plaja considera que los tempos que maneja la justicia en España no son equivalentes a los de Europa, lo que ve una "constatación de que el espionaje político tiene un trato y ritmos diferentes en función de quiénes son las personas o el gobierno espiados". "En cualquier caso, esperamos que se llegue al fondo del asunto sea cual sea el tribunal que lo investigue", ha espetado en una rueda de prensa tras la reunión semanal del consell executiu.
Un borrador pendiente de enmiendas
Por su parte, la consellera de Acción Exterior, Meritxell Serret, ha recibido con "satisfacción" el informe que ha redactado la Comisión de Investigación de la Eurocámara sobre el uso de Pegasus y otros programas espía y en el que ven "lagunas" en el marco legal de España para autorizar el seguimiento de personas, señalando que la protección legal es "obsoleta". "Este informe relaciona abiertamente el espionaje con el procés y la celebración del referéndum del 1-O", ha manifestado, y propone la creación de un protocolo de actuación para responder a estos casos.
Sin embargo, el informe es solamente un borrador redactado por la liberal neerlandesa Sophie in't Veld y debe superar todavía las enmiendas del resto de grupos parlamentarios, ser votado en comisión y en el pleno de la Eurocámara. Las propuestas de populares, socialistas y liberales rebajarán el tono del texto, según se prevé.
También Aragonès ha exigido "llegar al fondo" del caso Pegasus. "¿El motivo? Trabajar por la libertad de nuestro país. En una democracia no se espía al adversario político. Es necesario llegar al fondo de la cuestión por justicia y dignidad política", ha dicho a través de las redes sociales.