La eurodiputada de Junts Clara Ponsatí ha entrado unos metros en España pese a que está fugada de la justicia y se la reclama por presuntos delitos de sedición por su papel en el procés independentista en Cataluña. La exconsellera del Govern huida ha irrumpido apenas unos metros en el país durante una protesta en la frontera con Francia en la loma del Coll de Banyuls, de difícil acceso.
Lo ha avanzado El Món, que ha precisado Ponsatí ha "llegado a pisar" suelo nacional antes de volver a Francia, donde no rige la euroorden de entrega. Todo ello ha ocurrido al mediodía durante una protesta en la cima para reivindicar la apertura de la carretera que asciende a este puerto de montaña que separa los dos países.
Reclamada por sedición
Cabe recordar que Ponsatí es reclamada por el Tribunal Supremo por un presunto delito de sedición que habría cometido durante su etapa como consejera catalana de Enseñanza, por cuanto los centros escolares fueron algunos de los lugares donde se votó en el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.
Pese a ello, la justicia escocesa, donde residía anteriormente, desestimó el proceso de entrega porque la exconsellera fugada cambió su domicilio a Bruselas (Bélgica), donde ejerce de euroelecta.
Cuestión prejudicial
A este respecto, las peticiones de extradición de la propia Ponsatí, el también exconseller Toni Comín y el expresident Carles Puigdemont se encuentran detenidas a la espera de una cuestión prejudicial planteada por el juez del Supremo Pablo Llarena al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE). En julio, el abogado general dio la razón al juez y concluyó que Bélgica debió haber cursado las peticiones del tribunal español.
Pero la decisión en el TJUE no está tomada, y la resolución de esta instancia judicial será clave para que el togado decida si mantiene las euroórdenes, si las retira o si se emiten nuevas peticiones.