Junts comienza la campaña a favor y en contra de la continuidad en el Govern. Cuando quedan pocos días para la consulta a la militancia, los posconvergentes comienzan a anunciar si son partidarios de seguir en el Ejecutivo autonómico o si, por el contrario, son favorables a romper con ERC. Algo que evidencia la fractura dentro del partido.
“¿Quieres que Junts continúe formando parte del actual Govern de la Generalitat de Cataluña?”, será la pregunta que lancen a sus 3.000 militantes, que decidirán el futuro del Govern y también de su partido, que se juega no sólo su unidad sino su situación económica que se vería perjudicada por la salida del gobierno.
Sànchez, a favor de seguir
Cada vez son menos los cargos de Junts que esconden su opinión. Este martes, el exsecretario general, Jordi Sànchez, ha asegurado que votará a favor en la consulta del próximo jueves y viernes porque es "la mejor manera de continuar sirviendo a Cataluña". "Nadie dijo que este gobierno sería fácil", ha defendido en una entrevista en Els Matins de TV3.
En este sentido, ha sostenido que la continuidad de Junts en el Govern es la garantía de que los acuerdos alcanzados con ERC se cumplan y que éstos no se vean empujados a un tripartito con En Comú Podem y PSC.
De la misma forma se ha expresado la consellera de Acción Exterior, Victòria Alsina, que a través de las redes sociales ha advertido de que "abandonar el Govern les aleja de la independencia". "Está claro que ERC no está cumpliendo el acuerdo, pero renunciar a estar en el gobierno pone las instituciones catalanas en manos del PSC y cierra la carpeta catalana por muchos años".
Borràs y los suyos optan por la ruptura
En cambio, la presidenta del partido, Laura Borràs, se ha mostrado muy crítica con los republicanos y partidaria de la ruptura con sus todavía socios. "Ya no es un gobierno de coalición, es un gobierno de colisión", ha manifestado este martes en una entrevista en la televisión pública. En su misma línea se han posicionado otros sectores de JxCat muy cercanos a la presidenta. "Hemos de salir del Govern porque ya nos han echado", han denunciado en un manifiesto en el que han criticado la destitución del ya exvicepresidente, Jordi Puigneró.
Entre ellas se encuentran la vicepresidenta de Junts, Aurora Madaula, la diputada en el Parlament, Cristina Casol, y varios miembros de la ejecutiva, como Montserrat Caupena. También algunas de las personas que encabezaron candidaturas alternativas a los afines al secretario general, Jordi Turull, en las últimas elecciones locales y sectoriales de JxCat. "Junts no puede continuar tragándose humillaciones y deslealtades sin reaccionar", añade el documento.
Con todo, la continuidad de Junts en el Govern será una incógnita hasta el próximo viernes, cuando se hará pública la decisión de la militancia. Mientras tanto, ERC se prepara para afrontar un gobierno en solitario en el que podrían acoger a esos consejeros posconvergentes que se muestren partidarios de seguir, como es el caso de Jaume Giró o Victòria Alsina --consellers de Economía y Acción Exterior, respectivamente--.