Los monitores de las colonias infantiles están ahora en el punto de mira de Plataforma per la Llengua. Y es que promover el catalán en el sector del ocio es el nuevo objetivo de la autodenominada ONG del catalán en la tercera fase de su campaña Todos somos referentes lingüísticos. ¡No te excuses!.
La iniciativa, impulsada junto a los sindicatos SEPC, USTEC-STEs e Intersindical-CSC, ya ha conseguido más de 37.000 firmas y tiene el objetivo de "promover la responsabilidad lingüística de las personas más vinculadas con los niños y jóvenes". Así pues, ahora los señalados son los monitores, que deberán ejercer como "referentes lingüísticos".
Sector clave para la "vitalidad de la lengua"
Después de las dos primeras fases, centradas en las familias y en los docentes, esta vez la campaña señala al ámbito de la educación en el ocio, un sector clave para "la vitalidad de la lengua", según ha explicado la entidad en un comunicado.
Un vídeo dará el pistoletazo de salida a esta tercera etapa que servirá para "animar a los monitores a ejercer de referentes lingüísticos". Después, serán los jóvenes del casal del Centro de Artes Escénicas la Excéntrica de Santa Coloma de Gramenet quienes expliquen "la importancia de defender el catalán" en este ámbito.
Consejos para "referentes lingüísticos"
Plataforma per la Llengua ha habilitado una guía con consejos y recursos del mundo de la educación en el ocio para que los monitores sean "ejemplares en sus usos lingüísticos y saquen partido de su rol como referentes para niños y adolescentes". Entre otras acciones, se les anima a no dejar de lado el catalán con ninguno de los niños, a comunicarse en esta lengua con familias y tutores, y a mostrar referentes educativos y culturales en catalán con el objetivo de que los jóvenes descubran ejemplos a seguir.
Una de las imágenes de la campaña de Plataforma per la Llengua
Según el comunicado, ya tiene "más de 37.000 adhesiones, pero necesita el apoyo de todos para conseguir revertir la tendencia de los últimos años" ya que, según la entidad, el catalán ha estado en retroceso en los últimos años. Una afirmación también apoyada por el Govern.