Este martes la exdiputada de la CUP en el Parlament de Cataluña Anna Gabriel ha regresado a España tras cuatro años fugada en Suiza para entregarse al Tribunal Supremo y regularizar su situación procesal. Pero no lo ha hecho sola. La cupaire lo ha hecho asesorada por Iñigo Iruin, un abogado histórico de la izquierda abertzale.
No es casualidad que Anna Gabriel haya elegido a este letrado para acompañarla en su entrega ante el Tribunal Supremo, dado que el vasco tiene una dilatada experiencia en el alto tribunal. Allí Iruin defendió a tres de los fundadores, promotores y directivos de un diario vasco acusados de pertenencia a una asociación ilícita subordinada a ETA en el caso Egunkaria. No obstante, su gran victoria judicial fue el caso Lasa y Zabala, donde defendió a las familias de los dos jóvenes torturados por los GAL y consiguió la condena de Enrique Rodríguez Galindo, general de la Guardia Civil. También destacan el caso Zabalza y el proceso de legalización de batasuna.
Del entorno de la izquierda abertzale
Iruin no solo estuvo vinculado a la izquierda abertzale en los tribunales. En 1984 fue elegido como diputado de Herri Batasuna en las elecciones para el Parlamento Vasco, donde ocupó el cargo hasta 1989. También participó en la redacción de los estatutos de Sortu y consiguió que, tras décadas de ilegalizaciones de los partidos del entorno de batasuna, la nueva formación pasara los filtros del Tribunal Constitucional y de la Ley de Partidos.
En aquel momento, el abogado expresó que la nueva formación política cumplía tres de los cuatro parámetros que marca el supremo Tribunal Supremo para constatar que no es una formación sucesora de otra ilegalizada anteriormente. Iruin argumentó entonces que no había similitud de estructuras ni de medios de financiación, ni tampoco la disposición a apoyar el terrorismo. No obstante, reconoció que quienes la integraban eran miembros de la izquierda abertzale.
Sigue los pasos de Serret
Con la elección de su nuevo abogado, Anna Gabriel ha decidido seguir los mismos pasos que la exconsellera Meritxell Serret, que también estuvo asesorada por Iruin y que compareció de forma voluntaria ante el Tribunal Supremo.