Corren malos tiempos para Alba Vergés. Investigada por la Justicia por la decisión de no administrar la vacuna contra el Covid a agentes de la Guardia Civil y Policía Nacional destinados en Cataluña a la vez que a los mossos d'esquadra y los policías municipales, la exconsejera de Salud acaba de afrontar un importante revés en su propio partido, ERC. Solo el 66% de la militancia votó ayer a favor de que Vergés sea la candidata a la alcaldía de Igualada (Barcelona), pese a ser la única que se postuló. En concreto, de los 51 militantes que participaron en la votación, 33 le dieron su apoyo, mientras que se registraron 17 votos en blanco y uno nulo.
De esta forma, las bases republicanas de Igualada lanzan una seria advertencia a la ejecutiva local, a la que reprochan su mala gestión. Falta de transparencia, decisiones unilaterales e incluso “prepotencia” son algunas de las quejas de la militancia, según fuentes municipales. El malestar, aseguran, existe desde hace tiempo.
Aval de Junqueras
Vergés es la candidata avalada por el presidente de ERC, Oriol Junqueras. El jueves ya fue presentada como cabeza de lista en las próximas elecciones municipales sin que se hubiera celebrado aún la asamblea.
Es un ejemplo más, indican los críticos, de las decisiones impuestas por la dirección del partido.